Va a convertirse en una costumbre que cuando Telecinco estrena una serie tengamos que dedicar unas líneas a la forma que tiene de hacerlo. Normalmente, los artículos en los que analizamos el primer capítulo de una nueva serie de Telecinco vienen acompañados de un rapapolvo a la cadena, que suelen centrarse en que no ha cumplido el horario de emisión anunciado, que ha emitido demasiados anuncios entre medio o que la emisión se ha prolongado hasta altas horas de la madrugada. Con el estreno de ‘Frágiles‘ a Telecinco le tenemos que reprochar un poco de cada cosa, una serie de características que profundizan en esa mala imagen que desprende la cadena, que hace que muchos espectadores no quieran saber nada de ella cuando en el futuro llegan nuevas ficciones a su programación.
Mucho ha mejorado durante la pasada temporada la principal rival, Antena 3, que parece haber aprendido que las series, al menos el día de su estreno, hay que envolverlas con un mimo especial, dándole todos los cuidados posibles y todas las facilidades para que el espectador pueda engancharse a ella. Así, si la audiencia la rechaza la culpa será de la serie y no de las tácticas llevadas a cabo por la cadena a la hora de su emisión. A Telecinco tenemos muchas cosas que reprocharle hoy, pero lo peor es que sabemos que la cadena continuará con estas prácticas, hasta que llegue ese día en el que se den cuenta que la ficción nacional es una de las partes más importantes con las que cuenta toda cadena de televisión que se precie.
Después de este desahogo, provocado en gran medida por la hora a la que Telecinco me dejó irme a la cama ayer, toca comentar las primeras impresiones que nos dejó el estreno de ‘Frágiles’, una ficción producida por Isla Producciones que sigue la estela que ya crearon con ‘La Pecera de Eva’ en el pasado. No podemos evitar nombrar a la serie protagonizada por Alexandra Jiménez porque ‘Frágiles’ bebe mucho de esa ficción, no solo por su método de trabajo, basado en la improvisación de los actores, sino también en la forma en intercalar las diferentes historias que centran cada uno de sus capítulos. Es normal sentir al principio cierta confusión con el montaje, algo que se olvida rápidamente cuando el espectador se adentra en el desarrollo de la serie.
Y, al igual que ocurría en ‘La Pecera de Eva’, en ‘Frágiles’ nos encontramos con una figura protagonista sobre la que giran las historias de los demás. En este caso no se trata de una orientadora en un instituto en el que estudian jóvenes con problemas, sino de Pablo, un fisioterapeuta al que acuden personas acusadas de dolor en alguna parte de su cuerpo y que también ocultan problemas en su vida para los que Pablo intentará poner solución. Puestos a comparar me quedo con el personaje que interpretaba Alexandra Jiménez en su día, ya que al personaje de Santi Millán en ‘Frágiles’ le encuentro que aún le queda algún que otro paso que dar para llegar a conectar con los espectadores. Le sobran chistes fáciles y le falta algo de presencia.
Mujeres que brillan con luz propia
Sobre el resto del reparto regular, cabe destacar la presencia de tres mujeres: Elia Galera, Luisa Martín y Ruth Núñez. Las tres han dado los mejores momentos del estreno de ‘Frágiles’ y todo indica que será todo un acierto que sus personajes se mantengan los ocho capítulos que dura la primera temporada de la ficción. Si tuviera que elegir me quedaría con la relación entre los personajes de Luisa Martín y Ruth Núñez, madre e hija en ‘Frágiles’, la primera demostrando la grandeza a la que ha llegado su carrera y la segunda interprentando un personaje que parece diseñado a su imagen y tonalidad de voz.

Otro punto a favor de la serie se encuentra en la intervención de numerosos actores conocidos para dar vida a los personajes en los que se centran los casos autoconclusivos que aparecen en ‘Frágiles’, uno por capítulo. Entre ellos, ayer pudimos ver a una magistral Blanca Portillo interpretando a una mujer embarazada con una enfermedad que le afecta a sus huesos, una de las historias más emotivas, aunque predecible, de las que pudimos encontrar en los dos primeros capítulos de la serie. Porque, realmente, ‘Frágiles’ busca emocionar al espectador, algo que consigue en algunas ocasiones. En otras peca de ser algo pretenciosa (los monólogos del personaje de Pablo son un ejemplo de ello).
‘Frágiles’ se convierte en otra ficción desperdiciada en verano, una serie que cuenta con buenos elementos para conseguir unos elevados datos de audiencia: una historia que atrapa, una duración envidiable para otras ficciones nacionales y unos personajes interesantes dispuestos a conquistarnos. Lo peor es el lugar donde ha recaído, en una cadena de televisión que da la espalda a nuevas e interesantes propuestas con un trato despreciable, tal y como a la competencia le gustaría que hiciera. Así, después de que ‘Frágiles’ concluyera anoche en torno a las 01:30, podemos confirmar que la nueva serie de Isla Producciones tiene al enemigo en casa. O, mejor dicho, ha entrado a jugar en casa del enemigo.
En ¡Vaya tele! | ‘Frágiles’: lo que necesitas saber
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fgss
Para mí no comparala con la Pecera de Eva, es inevitable, y si la comparo sale perdiendo. Ya que en la Pecera los casos eran más rápidos, los capítulos más cortos y Eva era psicologa y por lo tanto hacia de tal, sin embargo Pablo es fisioterapeuta, pero hace de psicologo, esto unido a su monólogo final al estilo Meredith Grey, hace que le reste bastante puntos a la serie, sin contar la manera de emitirla de Telecinco, que eso da para escribir un artículo entero. Asi que en conclusión, está bien, pero no me motiva para seguirla como si lo hizo la Pecera de Eva, antes de que Telecinco empezase a marearla.
skymonty
Espectaculares Ruth Nuñez y Luisa Martín. Solo por ver a sus dos personajes merece la pena seguir la serie. Una pena el personaje de Santi Millan. Sus gracietas estuvieron a punto de hacerme cambiar de canal al principio. Por lo demás buena serie con guiones bien desarrollados.
mner90
No se a vosotros, pero a mi Frágiles me gusto bastante. Alomejor es que estoy acostumbrado a las series de antena3 pero vi un buen trabajo en los actores y una serie diferente. Ha tenido buen share (14,2 y 17,5) pero no ha llegado a los 2 millones de espectadores, aún asi espero que suba por que merece la pena. Un saludo.
DrivE ThrougH
A priori, tenía interés en ver esta serie. Se había creado bastante "hype" alrededor de ella, pero cuando dieron las 11:50 de la noche y no había empezado y vi que daban 2 capítulos seguidos, cambié de canal y segui viendo los JJOO.
Esta mañana, al levantarme, lo primero que había entrado en mi Feed, era el capítulo doble, sin cortes ni publicidad. BIEN POR T5
Una vez vista, la serie no me ha parecido gran cosa. A mi familia le ha encantado. Mucho humor facilón, sentimientos huecos para provocar la lagrima fácil, lugares comunes y lo que me mata, la introducción y el epílogo final.
Las interpretaciones me parecen correctas, la mayoría muy forzadas y sobreactuadas, pero lo peor son los guiones.
En definitiva, una serie normalita, que si fuera británica o americana la tacharíamos de mediocre o directamente de truño.
Y lo de T5 no tiene perdón de dios, pero que sigan así. Les va bien económicamente, pero algún día la gallina de los huevos de oro puede dejar de poner
je.re.94064
Yo, cuando vi que el protagonista era capaz de asegurarle a alguien que le iba a curar de su asperger (¿?, tal cual asi lo dijo), que descubria, cual detective, que otro tenia un desorden a raiz de un comentario aislado, y que era capaz de identificar una enfermedad en la mano del tercero, y todo eso en el mismo capitulo, pensé "jodo, es incluso mejor que House". Y luego, pues claro, me fascinaba la capacidad que tenia el actor para ir siempre vestido de azul pero siempre cambiando los tonos, para no repetirse. También me sorprendió la chica con Asperger, porque yo tengo dos amigas con Asperger y como se comportan ellas nada tiene que ver con el personaje de la serie, que más que tener un trastorno de la personalidad parecía una adolescente malhumorada, obtusa y esquiva. Asi que, pues no sé que pensar, supongo que es mejor no tomarse muy en serio la serie. Aunque, no tomarse en serio un drama... Yo le doy una temporada y va que chuta.
inisensei
A mi la serie no me ha disgustado, creo que hay buena materia prima pero con muchas cosas que mejorar. Para empezar se ve un cambio bastante evidente del piloto al segundo episodio. En el primer episodio caaasi todas las escenas estaban acompañadas de música cantada, cosa con la que me entró ganas de apalizar al encargado de ello. En el segundo ya la cosa mejoró bastante. Santi Millán sobreactúa en más de una ocasión, sobre todo en el primero episodio, pero en el segundo se controló más. A mi Ruth Núñez me parece que hace su papel bastante bien y creo que puede ser de lo más aprovechable de la serie. Como bien dicen arriba, han exagerado la sintomatología de los aspergers (mi hermano es autista, no es lo mismo, pero por el ambiente he tratado ya con más de uno), y la verdad, hay de todo. Cada uno tiene obsesiones diferentes y bueno, puede que sea un caso extremo el caso que del que hablamos, pero al ser una ficción y estar aoostumbrado (véase Sheldon Cooper, del que nadie dice nada), pues se digiere mejor.
Yo lo únic que espero, es que la gente no sea EXCESIVAMENTE exigente con la serie, porque si bien es cierto como dicen arriba, el protagonista hace cosas que piensas "pero donde vaaas!", resulta que las hace House y no pasa nada, ¿por qué? Porque es una serie americana y tiene licencia para ellos, las españolas no, verdad? Seamos más flexibles de mente.
Yo por ahora voy a seguir dándole una oportunidad a la serie y ver si pulen los fallos de realización, guión, etc que tiene.
tejerus
Nada del otro mundo para desplazar a hospital central,que por cierto conociendo como las gastan en casacotillas veremos cuando la ponen o donde....saludos.
alpesa
Siento estar en total desacuerdo. Para gustos, los colores, claro. Pero sinceramente, después de ver los dos primeros capítulos de la serie, me quedé igual. Francamente soy un asiduo consumidor de series de televisión desde los años ochenta (por desgracia soy ya mayor) y siempre trato de dar una oportunidad a series españolas. Salvo "contadas" excepciones, no me convence la ficción española, muy alejada de la comercial norteamericana o de la fabulosa británica, que nos dan siempre 100 vueltas. Respecto a "Frágiles" es para mí, por supuesto, un "esperpento" y con ello lo sustantivo en demasía (puesto que literariamente no puede compararse con ese rico movimiento de nuestra literatura a la que pertenecen autores de la talla de Miguel Mihura o Enrique Jardiel Poncela) al servicio y lucimiento de un típico y exagerado Santi Millán, que por un lado se pasa cien pueblos con su típico humor (lo que hace siempre con El Terrat o cuando presentaba su night-light en cuatro) que no ha lugar en la trama de la serie, y que no hace reír, sino más bien llorar, o su falso sentimentalismo y ternura, que no tiene credibilidad. Lo siento, Santi, pero serás tal vez un buen showman para quien le gustes, pero como actor tienes mucho que desear, porque ni te crees lo que haces, o su situación sentimental (por Dios, parece imposible exagerar más, con un triángulo amoroso con dos hermanas). Y respecto a los casos, y a los demás actores y actrices, por favor, todos sobreactuados y sin ninguna credibilidad en lo que hacen. Muchos sacados de "Yo soy Bea" o de "La Pecera de Eva" por lo de la productora claro. Mención aparte lo de "Luisa Martín" que está sin pena ni gloria (qué tiempos aquellos con la "Juani" en Médico de Familia, vamos nada que ver) o Ruth Núñez (La fea de Yo soy Bea) interpretando de manera muy exagerada a una persona con el síndrome de "asperger" (los síntomas que se han buscado me parecieron muy extremos, cosa que no dudo que haya personas que lo sufran). Y lo de Elia Galera y su marido, o lo de Blanca Portillo y su síndrome de huesos de cristal. En definitiva, otra ficción española nada creíble.