Se estrena hoy ‘La casa del lago’, (‘The Lake House’), de cuyo trailer ya os informé. El director argentino Alejandro Agresti ha firmado esta cinta estadounidense protagonizada por Keanu Reeves y Sandra Bullock y que en realidad es un remake de ‘Siworae’ ('Il mare'). A continuación publicamos una entrevista de Pablo O. Scholz al cineasta en la que habla sobre esta producción.
Setenta millones de dólares, Keanu Reeves y Sandra Bullock como protagonistas, temas compuestos especialmente por Prince, producción de Warner Bros. ¿Qué más puede pedir Alejandro Agresti?
“Estoy viviendo un sueño”, dice desde Los Angeles el director de Valentín, en un descanso del ensayo que tenía con el astro de Matrix. “Estamos en preproducción de The Lake House desde hace dos semanas aquí, y vamos a filmar en Chicago”, por lo que se la pasa viajando de una ciudad a otra, ensayando con Reeves y Sandra Bullock en Hollywood, y supervisando los decorados en Chicago. “La película se basa en una producción coreana, Siworae, toma una intriga sobre tiempo y espacio. Yo empecé a cambiar cosas, y ahora trabajamos juntos con David Auborn (ganador del premio Pulitzer), y confirmamos el guión”. Reeves será un arquitecto y Bullock, médica, cuando "en el original ella era dobladora de películas, y él, otra cosa", minimiza Agresti. "La ambientación es distinta, está muy trabajada, siendo él un arquitecto muy famoso, en torno a Frank Lloyd Wright. Visualmente tiene mucho que ver Chicago, que es una ciudad maravillosa."
La trama indica que los personajes vivieron en la misma casa con dos años de diferencia, y por una extraña razón "comparten el mailbox de la casa." Al comienzo, ella deja una casa "muy peculiar, que construimos sobre un lago, y él llega como si fuera el nuevo inquilino. Pero está llegando hace dos años, y de pronto encuentra una carta de ella fechada en 2005, cuando él está en 2003. Primero piensan que es un juego, cada día dejan una carta cada uno, pero se van acercando día a día, y lo que parece ilógico tiene su lógica: descubrís que ellos una vez se encontraron".
- ¿La idea de juntar a los protagonistas de ‘Speed’ once años más tarde fue adrede?
- No. Me fui encontrando con diferentes actores. Bullock me quiso conocer hace dos meses en Nueva York, y aceptó. Y una vez que la tenía a Sandy, me entrevisté con muchos actores, hasta que nos encontramos un día con Keanu. El es un fanático de Valentín, vio Un mundo menos peor, a ambos les gusta cómo dirijo, y entonces le dije al estudio: 'Tengo a ellos dos'. Lo de Máxima velocidad fue una coincidencia. Al comienzo era como que en Warner pensaban si era un buen movimiento o no.
- ¿Como veremos a los símpaticos Bullock y Reeves en tu película?
- No es una comedia, es un drama romántico. Uno le da un toque de vida y humor, pero no son roles de comedia.
- ¿El resto del equipo está decidido?
- Los únicos que están confirmados son ellos. En otro rol va estar Jeremy Irons, el padre de Keanu, y hay otros tres actores, que estamos decidiendo. El equipo técnico es un lujo. Lo integran el director de fotografía David Tattersal (los últimos tres episodios de Star Wars), el diseñador de producción es Nathan Crowley (Batman Begins), el productor de la película es Doug Davison (el mismo de Dark Water, la nueva de Walter Salles).
- ¿Como son los pasos a seguir con el proyecto?
- Se filma en doce semanas, desde el 14 de marzo en Maple Lake, a 25 minutos del centro de Chicago. La fecha de estreno prevista es el primer trimestre de 2006. Estoy terminando el 10 u 11 de junio, y la edición la haré con Kevin Tent, el mismo que trabaja con Alexander Payne (Entre copas). La idea es tener en Chicago oficinas de edición mientras filmo, y cuando terminamos el rodaje nos trasladamos a un rancho cerca de San Francisco, propiedad de George Lucas.
- ¿Cómo es el ritmo de trabajo en Hollywood?
- Enloquecedor, por las herramientas que tenés. Es una película muy original, te lo dice todo el mundo. Es muy raro que un estudio grande la convierta en una de sus superproducciones. Tengo un privilegio enorme, el poder trabajar con tanta libertad que me da el estudio. Siempre está el prurito, esto es cine industrial, pero aquí se hace muy buen cine. Tengo un contrato grande con Warner Bros, para producir y dirigir mis propias películas, que es lo que Alfonso Cuaron (la última Harry Potter) firmó con Warner.
Agresti ya había comentado a Clarín que era amigo de Alexander Payne. "Realmente lo quiero mucho, pero él no trabaja para Warner. El que sí tiene su productora dentro de Warner, y tengo la emoción de poder relacionarme con él, es Clint Eastwood. Tuve la suerte de sentarme a ver con él la primera copia de Million Dollar Baby", dice sobre la ganadora del Oscar.
Sigue soñando despierto. "Después de tantas películas, creo que los dos últimos años Hollywood me ofreció cosas y yo las tiré por la borda. Aquí muchos directores fueron inmigrantes, desde William Wyler a Billy Wilder. No es fácil venir y hacer cualquier cosa, el sueño es ése, poder contar con las herramientas y hacer un buen cine, historias bien contadas. Espero poder hacerlo".
Agresti dice que no cuenta con tiempo "para extrañar. Sí a veces pienso qué lindo sería poder compartir todo esto con mis amigos, pero a los amigos siempre los tenés en mente, y los imaginás viendo las películas. Tu trabajo no lo hacés sólo para vos, lo hacés para la gente que te quiere."
Otras entrevistas a este director sobre temas genéricos y sobre su película ‘Valentín’.