Telecinco, pocas horas después de anunciar la participación del presentador Eduard Forés en su nuevo programa Supervivientes, ha dado marcha atrás al considerar que "no es oportuno" vincular a este presentador a la empresa. Eduard Forés fué condenado en primera instancia en 2003 por una relación sexual (consentida) con una menor en 2001 y parece que es éste el motivo que ha llevado a la cadena a arrepentirse de su incorporación...
Esta situación me genera varias reflexiones. Una es de índole "moral", y es persar hasta qué punto la carrera profesional de una persona se puede ver afectada por una situación personal por la que, además, ya ha sido juzgado y condenado en las instancias correspondientes. ¿Acaso alguien merece un juicio y condena paralelos? En fin, yo soy de los que opinan que no, que bastante tendría el chico con lo que tuvo como para encima soportar este tipo de actuaciones. Sobre todo, porque apostaría lo que fuese a que hay mucha gente en el mundo de la televisión (delante y detrás de las pantallas, en los despachos, etc.) que tiene sus propios monstruos (y muchos más feos, seguro) en el armario. Hay otra reflexión que me indigna: ¿cómo es posible que Telecinco sea capaz de ponerse tan melindres? ¿Serán hipócritas? ¿No es la misma cadena donde salía un tipo condenado por ridiculizar a deficientes mentales? ¿La misma que pone encima de la mesa semana tras semana lo peor del mundo aderezado con salsa rosa? ¿La que permitía apologías de la drogadicción por parte del Matamoros? ¿La que acostumbra a desenterrar la memoria de los muertos para hacer espectáculo con ellos? ¿La que paga el sueldo a un tipo llamado Torito? Me parece, la verdad, alucinante.
Y, por último. Si uno ponía en Google "Eduard Forés", la noticia de sus avatares con la justicia aparecía en primer término. ¿Nadie les ha enseñado a esta gente a usar Google?
