Como ya os comentamos en las películas de la semana en TV, hoy es el día de Michael Moore en Canal+. A las 22:00 emitirán Bowling for Columbine, a las 23:55 pondrán Fahrenheit 9/11, y a continuación un documental de la casa sobre Michael Moore titulado 'Michael Moore, el gran agitador'. Y, por si esto no fuera poco, el miércoles 12 de octubre en Cinemanía, se podrá ver su primer documental, Roger and me.
Un ciclo completo y que personalmente me tendrá mañana pegado a la pequeña pantalla. No he visto Bowling for Columbine y tampoco Roger and me, pero sí Fahrenheit 9/11, y aunque muchos la critiquen me parece muy buen cine, con un inicio y un final soberbio, algo sobre lo que hace ya un tiempo escribí:
Fahrenheit 9/11, la película de Michael Moore (buen cine que te obliga a observar y analizar, y además te emociona), tiene en una de sus historias algo que no he logrado aún quitarme de la cabeza. Uno de los problemas morales y desgarradores que plantea el filme es el retrato de una madre que animó a sus hijos a que entraran en el ejército porque era la única forma de sufragar su educación, y que al principio de la película apoya la guerra de Irak. Un día, recibe la comunicación de que uno de sus hijos ha muerto en Irak (con lo que supone que una madre pierda a su hijo), y dos días después recibe una carta de ese hijo ya fallecido. En esa carta, su hijo le indica que no entiende que pintan allí y escribe preguntándose qué le está pasando a su presidente... Resulta que esa madre, que apoyó a Bush, ya no entiende la justificación de la guerra y el porqué mandan a chavales de 18 años al matadero. Para aliviar su pena decide ir a Washington, a intentar comprender algo. Allí escucha a una mujer que se manifiesta en contra de Bush y a la que ahora comprende, y de repente es recriminada por otras personas que pasean por allí, la echan en cara el que se sienta indignada, porque ellos no han vivido la misma tragedia que está sufriendo ella. Al final se retira llorando... y en ese momento, que es muy duro, suelta una frase que es como una patada en el estómago: "La ignorancia... Ese es el gran problema de la gente". Esta tremenda frase la uno con este otro comentario que leo de Michael Moore: "...cuando eres un ignorante, ¿para que te vas a molestar en participar en nada?, ¿para qué te van a preocupar las cosas? La gente educada e inteligente participa." Es lapidario.
Cine comprometido, duro, que a uno le remueve las tripas y le trata con inteligencia. Más allá de las buenas series de TV americanas, el otro buen cine en USA viene vía los documentales. Eso lo tengo muy claro.
Por cierto, esta preparando Sicko, una visión sobre la industria farmaceútica americana, pero visto lo que ha sucedido en Nueva Orleans, y lo que ha provocado Katrina tanto en el gobierno como en la sociedad americana, no me extrañaría que Michael Moore empezase a realizar dos proyectos a la vez. Esto es una suposición mía, pero con lo listo que es este tío, no me parece demasiado desencaminada esta idea.
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