La censura no distingue entre géneros, autores, o épocas, ni tampoco entiende de lógica.
Si hace poco tuvimos de ejemplo a Rocco Siffredi censurado por unas patatas fritas, hoy podemos añadir unas imágenes recuperadas que muestran los injustos (e innecesarios) recortes que sufrieron algunos films del fabuloso Billy Wilder.
El primer vídeo incluye algunos cambios en La Tentación vive arriba, con los que se intentó inútilmente contener algo tan incontenible como la sensualidad de Marilyn Monroe.
En el segundo se recogen fragmentos eliminados en contra de la voluntad de Billy Wilder de Perdición, y La vida privada de Sherlock Holmes, y también una secuencia con la que debía iniciarse El Crepúsculo de los Dioses, de la que el propio Wilder decidió prescindir tras comprobar en una proyección de prueba que las reacciones del público eran las contrarias a las que esperaba.
Vía | Off-Hollywood