La semana televisiva que hoy termina ha estado marcada por dos grandes estrenos en nuestro país. Por fin, después de semanas de suposiciones, tanto ‘Toledo’ como ‘La fuga’ han visto la luz, cosechando datos de audiencia muy aceptables y demostrando las ganas que tienen los espectadores por obtener savia nueva seriéfila con la llegada del nuevo año. Y, ya que de ‘Toledo’ hablamos hace unos días, ahora toca analizar lo que ha supuesto el segundo de estos estrenos, ‘La fuga‘, que ha conseguido sorprendernos con su puesta en escena.
Hay ocasiones que llegamos a conocer el proceso que vive una ficción antes de su estreno, por lo que podemos hacernos una idea de lo que nos espera antes de que lo conozcamos de primera mano. Algo así ha ocurrido con ‘La fuga’, ficción que había sido bautizada en un principio con el nombre de ‘2055’ y que se nos vendió con una premisa que parece que no se ha mantenido en su totalidad hasta el final. De ahí podemos deducir que la apuesta era más arriesgada de lo que vimos el miércoles, y que ese thriller futurista que creó Boca Boca le vino algo grande a una cadena como Telecinco, por lo que las remodelaciones que sufrió la serie fueron dirigidas a ampliar el público que normalmente se sienta a ver una serie en una cadena como Telecinco.
No aparece ‘La fuga’ como una mala serie, o al menos entra dentro de esa categoría de ficciones que obtiene un aprobado con su capítulo piloto, pero que también tiene todos los ingredientes para que se vaya desmoronando con el paso del tiempo. Lo que sí creo es que se han cometido errores o, al menos, lo que para mi juicio son errores, pero que para Telecinco ha formado parte de la estrategia que ha querido llevar a cabo para que el mayor número posible de personas sintiera curiosidad por la serie. Yo, en cambio, sentía más atracción por ‘2055’ que por ‘La fuga’, cuando el centro de atención parecía ser ese ambiente futurista con el que querían llamar nuestra atención.
Con ‘La fuga’ la historia fue redefinida como una historia de amor, momento en el que entiendo que se comenzó a introducir los elementos que españolarizaron la ficción y la acercaron a algo con lo que el público está más familiarizado, pero que la alejaban del riesgo y la innovación que pretendía en un principio. Por supuesto que también sentía más atracción por el proyecto antes de que Mai Meneses le pusiera voz al tema central de su banda sonora, que no hace más que seguir focalizando el principal punto de interés en esa relación de amor con la que no puede existir ninguna ficción en nuestro país hoy en día. De nuevo, una trama que parecía interesante queda en segundo plano para mostrar algo que estamos hartos de ver.
En cuanto lo que vimos el miércoles, habría que dar la razón a todos aquellos que afirman que ‘La fuga’ es un ‘Prison Break’ a la española, con todo lo que eso conlleva, sobre todo, rellenar los más de ochenta minutos que debe tener cada capítulo. Una vez más es el aspecto futurista el único que la hubiera diferenciado de otras ficciones ya emitidas, aunque al final sea lo que menos se llegue a explotar de todo lo que vayamos a ver de la serie. Actores correctos y la oportunidad de crear a un buen número de personajes interesantes que podrían atraer al espectador, pero en general hemos visto poco más. Y, cómo no, la eterna pregunta: ¿cuánto podrá sostenerse la fuga que da nombre a la serie?
El principal peso que carga ‘La fuga’ desde su primer minuto es esa predisposición que se muestra para escapar de la estación petrolífera, algo que puede jugar en su contra cuando la trama se complique y ya hayan surgido demasiados problemas en torno a la esperada fuga. Pero por lo que hemos visto hasta el momento, llegamos a la conclusión que Telecinco no era la mejor cadena en la que podía recaer este proyecto y de hecho todo indica a que han sido las exigencias de la cadena las que han provocado que una serie que quería ser grande se quede en un quiero y no puedo de algo que, como mínimo, habría conseguido entusiasmarnos desde su primer episodio.
En ¡Vaya tele! | ‘La fuga’, ¿un rescate para la ficción de Telecinco?
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