En un principio este artículo se titulaba con el típico tópico de "300, entre el amor y el odio". Pretendía entonces comentar las reacciones encontradas que despertó la proyección de 300, de Zack Snyder, en el pasado Festival de Berlín, basándome en los reportes de varias páginas y weblogs.
Afortundamente no pude escribirlo antes de las vacaciones de carnavales. Y si digo "afortunadamente" es porque a mi vuelta encuentro todo un revuelo armado en torno a la proyección (y su reseña). ¿Fue ovacionado o abucheado el filme de Snyder? ¿Sucedieron ambas cosas? ¿O sólo se trató de un reducido grupo de periodistas franceses los perpetradores de los abucheos, como se dijo en el caso de Marie Antoniette?
Independientemente de si fue abucheada o no, el caso ha reeditado la discusión sobre la responsabilidad de los bloggers que escriben sobre cine, a la hora de informar los hechos o criticar un filme. Al fin y al cabo, en el negocio de las películas hay millones en juego, en la era de Internet y, los rumores se riegan como la pólvora—¿es así como de dice? ¿Por qué como la pólvora? Es algo que siempre me ha intrigado.
Por un lado Erik Davis, crítico de Cinematical y quien reseñara el pase de la prensa de 300; es el blanco de todos los ataques. Fue él quien habló de abucheos, de carcajadas fuera de lugar y salidas en masa de la sala. Film School Rejects, por su parte, habla de una ovación de pie en el estreno del film en el festival. Hay que destacar el detalle de que se trata de dos proyecciones diferentes. Pero, por otro lado, GreenCine describe una reacción dividida en el pase de prensa: por cada persona que abucheó, hubo otra que aplaudió.
En All These Wonderful Things encontrarán, en inglés, un buen resumen de la polémica: When Blogs Attack: Did 300 Really Get Booed in Berlin? (Cuando los blogs atacan: ¿Fue realmente abucheada 300 en Berlín?)