Hoy es el Día del Padre y muchos de vosotros estaréis celebrándolo con vuestros progenitores. Los padres son esos señores que, en el mejor de los casos, nos acompañan, nos ayudan, nos aconsejan. Y luego están ellos, esos individuos a los que los la vida les ha regalados unos hijos que no saben muy bien cómo tratar.
Las series de televisión están plagadas de conflictos familiares. No todos los padres son perfectos, ni mucho menos. Hoy queremos acercarnos a algunos de los más estupendos personajes televisivos, a los que adoramos, pero que no se distinguen precisamente por ser los mejores padres del mundo.
Don Draper
El bueno de Don, bastante tiene con sus campañas, sus alcoholes, sus cigarros y sus amantes... como para darse cuenta de que igual sus hijos le necesitan. Él mismo tuvo una infancia, digamos, un tanto complicada, sin un referente paterno muy claro, así que le cuesta conectar con sus hijos. Aún así, nos dejó algunos grandes momentos con Sally.
George Bluth
En una comedia como 'Arrested Development' ninguno de los personajes era perfecto que dijéramos, ni falta que hacía. El gran patriarca, ese George Bluth interprteado por Jeffrey Tambor, no podía ser un buen padre, básicamente, porque no era muy buena persona en general. Los escrúpulos los tenía guardados al fondo del armario, cogiendo polvo.
Frank Gallagher
La familia protagonista de 'Shameless' tiene también sus puntos flojos (diciéndolo suavemente). Seguramente, todo es más complicado cuando el padre de familia que, supuestamente ha de cuidar a sus vástagos, se convierte en un niño más. O más bien, en el más "travieso" de todos. Aún así, Frank, a su manera, sí demuestra que quiere a sus hijos.
Stannis Baratheon
En 'Juegos de Tronos' hay muchos nominados al padre del año. Está Tywin Lannister por odiar a su hijo menor; está Craster por abusar de todas sus hijas y matar a los varones... Pero el galardón se lo va a llevar Stannis por (redoble de tambores) quemar viva a su hija. Una acción que nos hizo odiarle con todas nuestras fuezas.
J.R.
Estos padres de ahora que son unos sentimentales y unos flojos. Cuánto tienen que aprender de J.R., el killer absoluto. Las grandes series nos regalan grandes personajes y este hombre, con su sombrero de ala ancha, repartía maldad a partes iguales, fueras hijo suyo o no. Él no hacía discriminaciones.
Frank Reynolds
'It's Always Sunny in Philadelphia' ganó pero que muchísimo cuando Danny de Vito comenzó a trabajar a ella. A Frank le encanta tener hijos, porque así puede aprovecharse de ellos y todo queda en familia. Desde bien pequeñitos, los hermanos Reynolds supieron que tenían al enemigo en casa.
Anthony Cooper
'Lost' era otra de esas series que ponía mucho el foco en las relaciones padre-hijo. De hecho, la mayoría de los personajes tenían bastante conflicto con quienes deberían de ser el espejo en el que mirarse. Pero, seguramente, el peor de todos fuera el padre de Locke, un hombre dispuesto a timar a su hijo a y tirarlo por una ventana. Casi nada.
En ¡Vaya Tele! | Padres que no son padres, cuando los lazos de sangre no importan
