Esta mañana nos hemos enterado de que ha fallecido Lina Morgan en Madrid, a los 78 años de edad, y después de haber estado enferma durante una larga temporada. Su verdadero nombre era María de los Ángeles López Segovia, había nacido en 1937 y había empezado a trabajar en el mundo del espectáculo, a los 16 años, en las revistas del teatro La Latina, que ella gestionaría ya de adulta. Lina Morgan dio de ahí el salto al cine en los 60, a comedias como 'La tonta del bote' o 'Soltera y madre en la vida', pero donde ella tuvo siempre más éxito fue en el teatro y, especialmente, en televisión.
Es probable que muchos la recordéis todavía por 'Hostal Royal Manzanares', una comedia que TVE emitió entre 1996 y 1998 y que tuvo una gran acogida entre la audiencia, superando sin problema el 30% de share (algo que ahora es impensable para una serie) y hasta llegando al 50% en momentos puntuales. Su personaje allí, Reme, era un poco una amalgama del tipo de personajes que había interpretado durante buena parte de su carrera: la mujer inocente, de pueblo, que hace reír al público con su humor muy gestual y muy de no creerse las situaciones que está viviendo.
'Hostal Royal Manzanares' no fue su única serie. Antes había protagonizado 'Compuesta y sin novio' en Antena 3 y, después, 'Una de dos' (que no acabó de funcionar en TVE) y 'Academia de baile Gloria', también en la cadena pública, en 2001, y que no pasó de la primera temporada. Sus series mantenían el tono teatral de sus obras y, excepto 'Compuesta y sin novio', destacaban porque se grababan con público, con el que Morgan interactuaba constantemente aunque fuera simplemente guiñándoles un ojo.
En realidad, ella era más una cómica teatral que televisiva. TVE llegó a emitir algunas de sus obras más exitosas en los 80 y principios de los 90, como 'El último tranvía', 'Vaya par de gemelas' o 'Celeste no es un color', y de sus representaciones teatrales ha quedado lo que, tal vez, haya terminado más asociado a su figura, y que ha sido más fuente de parodias y versiones; la canción 'Gracias por venir' con la que las terminaba todas, y que a lo mejor os suena más por ese "agradecida y emocionada" con el que empezaba el estribillo.
Vía | El País
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