En los últimos años, Antena 3 ha buscado distanciarse de la competencia ofreciendo programas con señas de identidad independiente capaz de marcar la diferencia. Este hecho se observa de forma clara en 'Me resbala', el espacio de humor que la cadena tiene reservado para los viernes por la noche y con el que busca ofrecer algo que se diferencie de lo que el resto de cadenas reservan para ese día. En este aspecto, Antena 3 consigue su objetivo, ya que 'Me resbala' es un espacio blanco que consigue llenar un prime time haciendo honores a esa imagen buscada y explotada por Antena 3 en la actualidad.
Aún así, 'Me resbala' no las tiene todas consigo para tener una vida de larga duración. El programa presentado por Arturo Valls muestra dificultades para mantener a los espectadores cada semana, también tras el inicio de su segunda temporada, y ofrece indicios para que pensemos que su particular guerra contra 'Sálvame Deluxe' terminará por retirarlo de la parrilla. No sería el primer programa emitido el viernes por la noche al que le pasa esto pese a ofrecer una buena acogida en el pasado, seguimiento que va desapareciendo semana tras semana. Y es que los pilares en los que se basa 'Me resbala' no parecen suficientes para asentar a los espectadores tras la pantalla de la televisión.
Para explicar este descenso de espectadores podríamos apuntar hacia lo repetitivo que se vuelve un programa de estas características, centrado en repetir la mayoría de las pruebas que mejor funcionan. Es un elemento que no ayuda a mantener a la audiencia, que puede desconectar del espacio en cualquier momento al tener la sensación de que ya ha visto lo que aparece en pantalla. Aún así, 'Me resbala' logra su principal objetivo, ese en el que se transmite un buen rollo por parte de los participantes que provoca que el espectador pase un rato de sano entretenimiento televisivo.
En este punto juega un factor clave algunos de los participantes que acuden como invitados a 'Me resbala', otra de las claves positivas que presenta el formato. Cómicos como Anabel Alonso, Miki Nadal, Edu Soto o David Fernández se adaptan a la perfección a la estructura del espacio, junto con Florentino Fernández, un personaje recurrente en el programa que sabe dar juego a la hora de ofrecer espectáculo. Todos ellos ofrecen su mejor versión cuando se dejan llevar en las pruebas y se dedican a divertirse, algo que consiguen transmitir a los espectadores.
El contrapunto se encuentra en aquellos invitados que acuden a 'Me resbala' por primera vez y que tienen más difícil conquistar a la audiencia u ofrecer motivos para permanecer tras la pantalla, unos personajes que se alejan de la descripción de "los mejores cómicos del país" al que Valls hace referencia. Todos ellos forman parte de esa noche de juegos en la que se convierte 'Me resbala', un plan entretenido para pasar el viernes por la noche pero del que es fácil despegarse en cualquier momento. Y esa es su principal desventaja para mantener a la audiencia.
En ¡Vaya tele! | 'Me resbala', una forzada maquinaria para hacer reír
Ver 21 comentarios