Un 4 de diciembre nacía Gérard Philipe, actor de culto en Francia, y al que se le llegó a apodar como "El príncipe de los actores". Apadrinado por el mismísimo Jean Cocteau, Philipe fue uno de los sexy symbol de la época, debido a su espectacular físico. Un cáncer de hídago se lo llevó a la temprana edad de 36 años, habiendo participado en 34 películas, y obteniendo un prestigio fuera de lo común sobre los escenarios teatrales. La película que le lanzó a la fama mundial fue 'Fanfán el invencible' ('Fanfan la Tulipe', Christian-Jacque, 1952), al lado de Gina Lollobrigida. Una pena que su temprana muerte dejara al séptimo arte sin uno de los mejores actores que han sabido mezclar hitrionismo y contención.
Películas imprescindibles para un buen homenaje: 'El diablo y la dama' ('Le diable au corps', Claude Autant-Lara, 1947), todo un escándalo en su época, una historia de amor entre un estudiante francés y una mujer comprometida, durante la I Guerra Mundial; 'La belleza del diablo' ('La beauté du diable', René Clair, 1950), reinterpretación de la historia de Fausto; 'Los orgullosos' ('Les orgueilleux', Yves Allégret, Rafael E. Portas, 1953), una historia de amor terrorífica entre dos seres perdidos en un país extranejero; 'Los amantes de Montparnasse' ('Les amants de Montparnasse', Jacques Becker, 1958), para el que suscribe una de las cien mejores historias de amor de la historia; 'Las relaciones peligrosas' ('Les liaisons dangereuses', Roger Vadim, 1959), probablemente la mejor película de su director, y la mejor versión sobre la novela de Choderlos de Laclos.