Ningún rodaje está exento de problemas. Si tienes a un grupo variopinto de gente que trabaja durante 14 horas al día en el mismo lugar cerrado, y muchas veces contrarreloj, es inevitable que haya tensiones entre ellos. El problema es cuando esas tensiones terminan desembocando en un atolladero bastante serio. En eso es en lo que parece estar convirtiéndose el plató de Anatomía de Grey en su tercera temporada triunfal, con audiencias de vértigo y premios por todas partes.
Recapitulemos. Quizás recordéis que, allá por el mes de octubre, Isaiah Washington, el actor que interpreta a Preston Burke, llamó marica a T.R. Knight (en inglés, la palabra faggot es realmente despectiva), que interpreta a George O'Malley, en medio de una discusión en el set. Patrick Dempsey se encaró con Washington por insultar a Knight, y ambos estuvieron cerca de llegar a las manos. Al final, Knight terminó haciendo pública su homosexualidad y Washington pidió perdón en público por su comportamiento.
El tema parecía solucionado hasta el pasado lunes, cuando Anatomía de Grey ganó el Globo de Oro a la mejor serie dramática y todo el reparto subió al escenario a recoger el galardón. En la sala de prensa, los periodistas preguntaron a Washington sobre el famoso incidente, y éste lo negó todo. A partir de ese momento, la prensa preguntó a más actores de la serie su opinión, y parece que Washington está creando un clima de trabajo tenso, cuanto menos (ya llegó a la serie con fama de actor difícil), hasta el punto de que se rumorea que su personaje podría dejar el hospital Seattle Grace más pronto que tarde.
No sería el primer actor cuyas diferencias y discusiones con el resto del reparto o con los productores lo obligan a dejar una serie. El caso más famoso es Shannen Doherty, despedida de Sensación de vivir y Embrujadas por sus continuas peleas con los productores. Al final, más que los insultos de Washington, lo que termina pesando más es la incómoda situación en la que su comportamiento coloca a sus compañeros y a los responsables de la serie y de la ABC. En las entrevistas post-Globos del programa Access Hollywood ya pudo verse a Katherine Heigl expresando su desconcierto por la negativa de Washington a reconocer lo que pasó, y en la entrevista que Ellen DeGeneres hizo a T.R. Knight el pasado miércoles queda patente también este desconcierto, y la evidente incomodidad de Knight al hablar del asunto. Unos días después, Isaiah Washington emitió un comunicado disculpándose de nuevo, después de que la ABC hiciera público otro recriminándole su actitud en los Globos de Oro. Sin embargo, los rumores sobre su posible marcha siguen ahí. Sólo falta esperar que toda esta situación no termine afectando al desarrollo de la serie.
Por otro lado, si queréis ver la otra disputa entre famosos de la que más se habla en la televisión estadounidense, en este caso entre Donald Trump y Rosie O'Donnell, aquí hacen un buen resumen.
Vía | AmbienteG