Al hablar sobre los primeros pasos que deberíamos seguir a la hora de elegir nuevo televisor no sólo el tipo de pantalla y tamaño o si necesitamos que sea o no Smart TV es importante. Podría considerarse como algo secundario pero creo que, a día de hoy, la conectividad de un televisor es igual de importante. Tanto a nivel de conexiones físicas como opciones para interconectar con otros dispositivos.
Las conexiones del televisor
Las conexiones de un televisor, a estas alturas, no creo que necesitemos explicarlas. Todos conocemos el clásico euroconector, las salidas de vídeo y audio compuesto, vídeo por componentes, auricular, VGA o DVI para el ordenador y el ya omnipresente HDMI.
Por tanto, lo que debemos considerar cuando vamos a por una nueva tele es ¿cuántas conexiones necesitamos? Seguro que la mayoría no tiene un único dispositivo conectado a vuestro actual televisor. La videoconsola, un reproductor bluray, DVD o ambos, el descodificador de ONO o Canal+,… son muchos de los dispositivos que conectamos. En la actualidad la mayoría opta por el uso del conector HDMI. Por tanto, es importante calcular bien para, incluso, ir sobrados en un futuro si, por el momento, nos sobre con un par de ellos.
Igualmente otras conexiones como la salida óptica debe ser tenida en cuenta. Modelos de gama media/alta la incluyen pero mejor asegurarse para no llevarse sorpresas. Y con el euroconector sería la que menos debe preocuparse. Va cayendo en desuso y sólo se incluye una en la actualidad. Si tenemos varios dispositivos conectados a varios conectores SCART o Euroconector tendremos que recurrir a un multiplicador o “encadenar” los dispositivos.
Cada usuario tendrá sus propias necesidades pues cada uno usará el televisor para diferentes actividades. Puede que algunos sólo veáis series y películas a través de los servicios de pago y TDT o quien además juega a la consola, dispone de un Apple TV, etc.
Por tanto, intentando encontrar el esquema más general posible, lo ideal podría ser un televisor con 3 conectores HDMI, 1 entrada por componente (Y/Pb/Pr), 1 entrada por componente (AV), salida de audio digital (óptica), 1 euroconector, salida de auricular y un par de USB.
HDMI CEC y HDMI ARC
Estos dos nombres son los que definen dos características del conector HDMI que cada vez resultan más importantes. El conector HDMI como sabréis es un conector digital y eso implica que, según las diferentes versiones, vaya permitiendo cada vez más y mejores funcionalidades.
HDMI CEC (HDMI Consumer electronics control) es el nombre estándar aunque a veces cada fabricante se refiere a ellos de forma diferentes: HDMI Control, SimpLink, Anynet+, Bravia Link,… pero la función es la misma, permitir usar dos dispositivos con un mismo mando. Así podremos controlar un reproductor bluray con el mismo mando de la tele. Evitando esa invasión de mandos que a veces sufrimos.
Por su parte, HDMI ARC (HDMI Audio Return Channel) nos ofrece la función de reproducir el sonido de nuestro televisor en un sistema de cine en casa simplemente haciendo uso de un cable HDMI. Una solución para conectar equipos de sonido sin necesidad del cable de audio SPDIF. Claro que tanto nuestro tele como equipo home cinema deben ser compatibles con HDMI ARC. Una forma muy sencilla de saberlo es mirar en la parte trasera, en alguna de las tomas HDMI aparecerá HDMI OUT/HDMI OUt (ARC) o HDMI IN/HDMI IN (ARC).
Conectividad
Dejando de lado los conectores físicos, contar con un televisor que ofrezca diferentes opciones para interconectar con otros dispositivos resulta muy interesantes ahora que la mayoría disponemos de smartphone o tablet.
Según las tecnologías soportadas tendremos más o menos opciones para conectar otros dispositivos a nuestro televisor. Y no hablamos de tener wifi o sólo conexión ethernet, nos referimos a soportar protocolos como WiDi o Miracast. Ambas opciones nos permiten opciones de gran valor.
Mediante WiDi o Wireless Display, tecnología de Intel, podremos conectar un ordenador compatible a nuestro televisor y usarlo como segundo monitor. Nos olvidaremos de llevar el ordenador de un lado a otro de la casa, conectar cables al televisor, etc y todo para ver alguna película que tengáis en él o simplemente mostrar las fotos del último viaje.
Miracast por su parte es básicamente igual que el AirPlay de Apple y sólo necesitamos que ambos dispositivos estén conectados a la misma red local. La mayoría de fabricantes están apostando por ella facilitando la posibilidad de compartir contenido entre móvil o tablet desde todas aquellas apps compatibles.
Luego hay otras opciones como Bluetooh o NFC. El primero sólo está presente en algunos modelos de gama alta y nos permite entre otras opciones conectar teclados bluetooth, perfectos para usar con las plataformas Smart TV, sin tener que hacer uso de adaptadores USB; la segunda, NFC, es una apuesta de algunos fabricantes como Sony y facilita mucho la configuración y proceso de conexión entre televisor y dispositivo móvil.
Si sois usuarios a los que os gusta mostrar en el televisor las últimas fotos realizadas, vídeos de internet y el algunos casos hasta duplicar la pantalla de vuestro móvil o tablet para disfrutar de los juegos en ellos instalados a lo grande, entonces merece la pena tener en cuenta estas opciones.
Por supuesto, aquí entra el soporte DLNA del televisor, algo vital desde mi punto de vista, u otras opciones como el uso de apps móviles que nos permiten controlar la tele con nuestro smartphone.
Conclusiones
Planifica bien qué dispositivos conectarás, cómo lo harás y las posibles conexiones que podrías necesitar a corto o medio plazo. Luego, según las necesidades u opciones que quieras tener mira que ofrezca opciones como Miracast, NFC o WiDi. Pueden parecer pijadas pero una vez te vas acostumbrando a no usar cables cada vez cuesta más hacerlo. Sin mencionar que resulta muy cómodo estar visualizando las fotos del móvil o tablet en la pantalla de la tele cuando vienes amigos a casa y no varias cabezas agolpadas mirando una pantalla de pocas pulgadas.
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