'Su media naranja', Nostalgia TV

'Su media naranja', Nostalgia TV
2 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

e: {"alt":"NostalgiaTV_SuMediaNaranja","src":"3ba030\/nostalgia-tv_sumedianaranja","extension":"jpg","layout":"normal","height":400,"width":650}]]

Hoy voy a tener que exigirle un esfuerzo extra a mi memoria. El expolio de vídeos que ha perpetrado Mediaset en YouTube --además de que encontrar alguna foto es casi como buscar el arca perdida-- hace muy complicado hablar de aquellos maravillosos años de los inicios de Telecinco. Una década --la de los 90-- en la que la televisión privada hacía de su capa un sayo y jugaba con la ventaja de la novedad. Así, se permitieron cosas como Manolo Escobar presentando un programa de fútbol y folklore ('Goles son amores'), Jesús Gil hablando (¿de qué hablaba?) desde su jacuzzi, rodeado de azafatas en 'Las noches de tal y tal' o que Leticia Sabater se convirtiera en la ídola de una muchachada estupefacta.

Todo un catálogo de bizarradas que guardaban mucha coherencia entre ellas: ese toque picarón de Lazarov en sus primeros tiempos, tan a imagen y semejanza de la televisión italiana. La edición de hoy de Nostalgia TV viajará hasta las amenas tardes de Telecinco para hablaros de 'Su media naranja' un concurso que entretenía a la par que encogía (más aún hoy en día, con la perspectiva del paso del tiempo), por la innecesaria sinceridad de sus participantes. Cabecera en tres, dos, uno...

Exhibicionismo doméstico

'Su media naranja' era un concurso de tres parejas --conducido por el afable Jesús Puente-- que se enfrentaban entre sí para demostrar que su matrimonio era el más compenetrado y el que se conocía mejor. Mediante una serie de preguntas de toda índole sobre su vida en pareja demostraban cuánto sabían el uno del otro. La mítica frase "Señores... al jardín" y aquella sintonía de gag erótico, precedía al tercer grado. Unos abandonaban el plató; sus parejas se quedaban en el "salón" y respondían a las preguntas de Jesús Puente, tratando de ponerse en la piel del otro y adivinar qué dirían; cuantas más coincidencias, más puntos.

Todo sería más o menos normal si no fuera porque el programa tendía a juguetear con el aspecto morboso. No se cortaban a la hora de interrogar sobre la vida sexual de aquellas parejas (aunque de una manera políticamente correcta) y el propio Jesús se avergonzaba más de una vez (aquellas ocasiones en las que le salía esa risa nerviosa "jo, jo, jo" que le caracterizaba). Llamadme exagerada, pero me parece más exhibicionista hablar de tus costumbres domésticas en televisión que salir a la calle completamente en bolas. Porque al fin y al cabo, la desnudez del cuerpo no tiene ningún misterio. Creo que es peor mostrar ante el mundo las "miserias" de tu matrimonio y lavar los trapos sucios en televisión. Vale, tampoco es que estuvieran al nivel de 'Sálvame'; pero no puedo evitar recordar el programa con cierta vergüenza ajena.

Una fórmula que enganchó

La parte cómica del concurso venía con las desavenencias entre las parejas. Si las miradas matasen, más de uno habría caído fulminado en plató. Ahí es cuando se podía sondear la situación real de la pareja y quién llevaba los pantalones en casa. A veces fallar una pregunta parecía condenar a más de uno a dormir en el sofá. Claro que también había parejas muy unidas y que demostraban estar realmente conectados. De hecho, algunas permanecieron meses en el programa porque no había un dúo mejor avenido que ellos, como el matrimonio de Cáceres que llegó a estar 32 semanas y a llevarse cuatro millones y medio de las antiguas pesetas (el récord en seis años de programa).

Y el caso es que la fórmula triunfaba. El programa se emitió durante seis años (entre 1990 y 1996) haciendo una media de casi un 30% de cuota de pantalla llegando, incluso, a máximos del 42% (cierto que había menos donde elegir). A Jesús Puente le dieron un Ondas por su labor al frente del espacio durante cuatro años, que abandonó después para irse con su caravana del amor a Antena 3 y sustituir a Isabel Gemio en 'Lo que necesitas es amor', otra joya de nuestro archivo audiovisual. El puesto de Jesús Puente lo ocupó el cantante Tate Montoya, pero la verdad, no tengo ya ningún recuerdo de esta época (supongo que las reacciones de Puente eran mi aliciente para verlo).

Un formato adaptado

[[image: {"alt":"SuMediaNaranja","src":"2f6e35\/su_media_naranja","extension":"jpg","layout":"normal","height":388,"width":650}]]

Como tantos otros programas de la época, 'Su media naranja' era el resultado de adaptar el formato americano 'The Newlywed Game', emitido originalmente en ABC (1966-1974). El programa sobrevivió después gracias a la sindicación y vive una segunda época de gloria desde 2009 en el canal Game Show Network. Y por lo visto la tendencia al morbo es más descarada que nunca. En su paso por GSN se han oído preguntas como "When your husband's private space shuttle is looking for a landing area and the home planet is unavailable, would he rather dock between the twin mountains of Mars, in the jaws of Jupiter, or in the mysterious and desolate caverns of Uranus?"

España no fue el único país que hizo su propia versión; también los italianos (de los que copiamos la sintonía de apertura), los franceses o incluso los indonesios tuvieron su propio 'Newlywed Game'. En nuestro país Boomerang TV no sólo adaptó el formato; también fue el responsable de crear una versión algo más moderna en 2006 con su 'Tal para cual' --esta vez en Antena 3-- conducido por Anabel Alonso y que compartía mecánica con 'Su media naranja'. Aunque, diez años después, aquello resultaba sin duda menos rancio (y, paradójicamente, con ello perdía la gracia).

Ficha Técnica: Su media naranja

Hoy voy a tener que exigirle un esfuerzo extra a mi memoria. El expolio de vídeos que ha perpetrado Mediaset en YouTube --además de que encontrar alguna foto es casi como buscar el arca perdida-- hace muy complicado hablar de aquellos maravillosos años de los inicios de Telecinco. Una década --la de los 90-- en la que la televisión privada hacía de su capa un sayo y jugaba con la ventaja de la novedad. Así, se permitieron cosas como Manolo Escobar presentando un programa de fútbol y folklore ('Goles son amores'), Jesús Gil hablando (¿de qué hablaba?) desde su jacuzzi, rodeado de azafatas en 'Las noches de tal y tal' o que Leticia Sabater se convirtiera en la ídola de una muchachada estupefacta.

Todo un catálogo de bizarradas que guardaban mucha coherencia entre ellas: ese toque picarón de Lazarov en sus primeros tiempos, tan a imagen y semejanza de la televisión italiana. La edición de hoy de Nostalgia TV viajará hasta las amenas tardes de Telecinco para hablaros de 'Su media naranja' un concurso que entretenía a la par que encogía (más aún hoy en día, con la perspectiva del paso del tiempo), por la innecesaria sinceridad de sus participantes. Cabecera en tres, dos, uno...

Exhibicionismo doméstico

'Su media naranja' era un concurso de tres parejas --conducido por el afable Jesús Puente-- que se enfrentaban entre sí para demostrar que su matrimonio era el más compenetrado y el que se conocía mejor. Mediante una serie de preguntas de toda índole sobre su vida en pareja demostraban cuánto sabían el uno del otro. La mítica frase "Señores... al jardín" y aquella sintonía de gag erótico, precedía al tercer grado. Unos abandonaban el plató; sus parejas se quedaban en el "salón" y respondían a las preguntas de Jesús Puente, tratando de ponerse en la piel del otro y adivinar qué dirían; cuantas más coincidencias, más puntos.

Todo sería más o menos normal si no fuera porque el programa tendía a juguetear con el aspecto morboso. No se cortaban a la hora de interrogar sobre la vida sexual de aquellas parejas (aunque de una manera políticamente correcta) y el propio Jesús se avergonzaba más de una vez (aquellas ocasiones en las que le salía esa risa nerviosa "jo, jo, jo" que le caracterizaba). Llamadme exagerada, pero me parece más exhibicionista hablar de tus costumbres domésticas en televisión que salir a la calle completamente en bolas. Porque al fin y al cabo, la desnudez del cuerpo no tiene ningún misterio. Creo que es peor mostrar ante el mundo las "miserias" de tu matrimonio y lavar los trapos sucios en televisión. Vale, tampoco es que estuvieran al nivel de 'Sálvame'; pero no puedo evitar recordar el programa con cierta vergüenza ajena.

Una fórmula que enganchó

La parte cómica del concurso venía con las desavenencias entre las parejas. Si las miradas matasen, más de uno habría caído fulminado en plató. Ahí es cuando se podía sondear la situación real de la pareja y quién llevaba los pantalones en casa. A veces fallar una pregunta parecía condenar a más de uno a dormir en el sofá. Claro que también había parejas muy unidas y que demostraban estar realmente conectados. De hecho, algunas permanecieron meses en el programa porque no había un dúo mejor avenido que ellos, como el matrimonio de Cáceres que llegó a estar 32 semanas y a llevarse cuatro millones y medio de las antiguas pesetas (el récord en seis años de programa).

Y el caso es que la fórmula triunfaba. El programa se emitió durante seis años (entre 1990 y 1996) haciendo una media de casi un 30% de cuota de pantalla llegando, incluso, a máximos del 42% (cierto que había menos donde elegir). A Jesús Puente le dieron un Ondas por su labor al frente del espacio durante cuatro años, que abandonó después para irse con su caravana del amor a Antena 3 y sustituir a Isabel Gemio en 'Lo que necesitas es amor', otra joya de nuestro archivo audiovisual. El puesto de Jesús Puente lo ocupó el cantante Tate Montoya, pero la verdad, no tengo ya ningún recuerdo de esta época (supongo que las reacciones de Puente eran mi aliciente para verlo).

Un formato adaptado

SuMediaNaranja

Como tantos otros programas de la época, 'Su media naranja' era el resultado de adaptar el formato americano 'The Newlywed Game', emitido originalmente en ABC (1966-1974). El programa sobrevivió después gracias a la sindicación y vive una segunda época de gloria desde 2009 en el canal Game Show Network. Y por lo visto la tendencia al morbo es más descarada que nunca. En su paso por GSN se han oído preguntas como "When your husband's private space shuttle is looking for a landing area and the home planet is unavailable, would he rather dock between the twin mountains of Mars, in the jaws of Jupiter, or in the mysterious and desolate caverns of Uranus?"

España no fue el único país que hizo su propia versión; también los italianos (de los que copiamos la sintonía de apertura), los franceses o incluso los indonesios tuvieron su propio 'Newlywed Game'. En nuestro país Boomerang TV no sólo adaptó el formato; también fue el responsable de crear una versión algo más moderna en 2006 con su 'Tal para cual' --esta vez en Antena 3-- conducido por Anabel Alonso y que compartía mecánica con 'Su media naranja'. Aunque, diez años después, aquello resultaba sin duda menos rancio (y, paradójicamente, con ello perdía la gracia).

NostalgiaTV_SuMediaNaranja

Exhibicionismo doméstico

NostalgiaTV_SuMediaNaranja

Ficha Técnica: Su media naranja

[[image: {"alt":"LogoT5peq","src":"59d435\/tele5","extension":"jpg","layout":"small","height":200,"width":255}]]
  • Título Original: Su media naranja
  • Género: Concurso
  • Cadena: Telecinco (1990-1996)
  • LogoT5peq
             <li><strong>Título Original</strong>: Su media naranja</li>
             <li><strong>Género</strong>: Concurso</li>
             <li><strong>Cadena</strong>: <span class="caps">Telecinco (1990-1996)</span></li>
    

    En ¡Vaya Tele! | Nostalgia TV

    Comentarios cerrados
    Inicio