'United States of Tara', el acuerdo entre los alters

El dúo femenino más loco de la televisión ha vuelto a Showtime; Jackie y Tara han vuelto de la mano en la noche de los lunes en el cable americano, y a ninguna de las dos le está yendo demasiado bien. Quizá sea porque ambas han empezado sus respectivas terceras temporadas con lentitud aunque con precisión, pero evidentemente por debajo de los niveles de surrealismo a los que estábamos acostumbrados. ‘United States of Tara‘ se ha decantado definitivamente por la co-personalidad, en la que varios alters conviven al mismo tiempo dentro del cuerpo de Tara, y sólo eso está salvando a una temporada que, por el momento, ha comenzado bastante flojita.

El deseo de Tara este año ha sido incorporarse a la Universidad, y apenas tardó unos minutos en aparecer en el campus dispuesta a indagar más en su Trastorno Disociativo de la Personalidad; y aunque nos prometieron un nuevo alter basado en los años de universidad de tara, de momento no ha habido noticias. Los que sí están teniendo más protagonismo por el momento son Shoshana, que se ha venido arriba con las clases de Psicología, y “T”, que hace su aparición cada vez que Tara se ve sobrepasada. Bueno, ellas dos y Puck Buck, el único que está avanzando un poco en la investigación del pasado de Tara.

Y es que aun a pesar de la revelación que tuvimos al final de la pasada temporada, con ese hermano que abusaba de Tara, de momento poco o nada sabemos de él. Sólo Buck está interesado en encontrarle, y para ello está recorriendo la guía telefónica al completo con todos los nombres que coinciden. Parece claro que tienen intención de avanzar en ese evento del pasado que llevó a Tara a disociar su personalidad, pero no van a hacerlo a corto plazo. Como siempre, tendremos que esperar a la recta final de temporada para conocer algo más.

En el terreno de los secundarios, la mayoría está avanzando como buenamente puede. Kate es la que más está destacando por el momento, decidida a irse finalmente de casa al no poder soportar más el surrealismo de los alters de Tara; y también tenemos a una embarazadísima Charmaine, que ahora con el bebé espera recibir más atención que su hermana, aunque no por ello deja ese carácter frío y desencantado con el que siempre nos deleita. Los personajes masculinos están un poco más abandonados, aunque Max sí que parece estar un poco más cascado; entre las personalidades de Tara y el recién descubierto Síndrome de Diógenes de su madre (que por cierto, siempre es un placer volver a ver a Frances Conroy, aunque sea con personajes episódicos), Max está mostrando cada vez más síntomas de cansancio. ¿Tendrá esto consecuencias en su matrimonio?

Finalmente, volviendo al tema de las personalidades de Tara, la co-personalidad va a estar más presente que nunca. Ese final del primer capítulo, con Shoshana dictando a Tara la redacción mientras el resto intentaba que ella se sintiera cómoda, era toda una declaración de intenciones. Cada uno puede utilizar el cuerpo de Tara cuando lo necesite, pero algunos se están aprovechando más de la cuenta. Parece que para el próximo capítulo, el cuarto, tendremos reunión de emergencia entre Tara y todos sus huéspedes para poner las cartas sobre la mesa, dejando claro quién manda y cuándo se les permite aparecer. Con esto, a ver si remontan un poquito en audiencia, que como la cosa siga así, quizá haya que empezar a temer por su continuidad. ¡Y que nos devuelvan la intro de la serie!

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