Cuanto más tiempo paso sumergido en el mundo del cine, menos lo entiendo. Cuando antes los nombres relevantes del medio nos decían que internet era el futuro, ahora resulta que es un problema que va a destruir la industria; lo que se suponía que era una película, ahora resulta que no lo es —y ni siquiera han puesto un nombre nuevo—; y, lo que es más preocupante, aquella sana costumbre de bajar al videoclub de la esquina y ver una película en tu televisor un domingo por la tarde en calzoncillos, se ha convertido en una ofensa que mancilla el séptimo arte.
No se preocupen, queridos lectores; no se ha desatado el apocalipsis. Lo único que ha sucedido es que Netflix ha producido un par de largometrajes y han sido programados en la actual edición del Festival de Cannes. Un hecho, a priori, sin mayor importancia, que ha desembocado en una contienda guerracivilista entre realizadores, productores, exhibidores, y el público de un certamen que, como ya comprobó Nicolas Winding Refn, tiene una pasión desbordante por el arte del abucheo.
La sonora queja de los exhibidores franceses, la bajada de pantalones de Cannes vetando filmes destinados a la explotación en plataformas VOD, los cruces de declaraciones entre Pedro Almodóvar y Will Smith… Cada nuevo episodio de esta batalla entre el modelo tradicional y las nuevas alternativas de mercado, lejos de aclarar el panorama, no hace más que generar nuevas preguntas sobre las que habría que reflexionar —o no—.
¿El que paga manda?
Tal vez mi postura al respecto peque de simple, básica y naíf, pero, si Netflix es la principal inversora en la producción de ‘Okja’ y ‘The Meyerowitz Stories’, ¿no está en su pleno derecho de explotarlas comercialmente donde considere oportuno? Pase que nos encontremos ante un escenario atípico en el que la misma compañía haga las veces de productora y exhibidora, pero, bajo mi punto de vista, la razón impera en esta cuestión.
Démosle la vuelta a la tortilla y planteemos la sigiente incógnita a los exhibidores franceses, enemigos íntimos del video on demand: Si una cadena de salas comerciales gala —por acotar fronteras— decide iniciar una aventura en el campo de la producción, y financia un largo, ¿sería igual de desleal que la competencia de Netflix que esa compañía proyectase dicho filme únicamente en sus salas? Confiemos en que la respuesta fuese afirmativa.
¿Qué hace que una película sea más película?

Esta pregunta va dirigida al señor Pedro Almodóvar, actual presidente del jurado del Festival de Cannes, quien ha reconocido verse incapaz de premiar a cualquier “filme que no pueda ver en una pantalla grande”. Como han demostrado las producciones Netflix presentes en Cannes, la esencia de estos productos, destinados a un consumo vía streaming, no está reñida en absoluto con que puedan disfrutarse en el confort de una sala de cine.
No obstante, dejemos de lado las obviedades que convierten la afirmación de Almodóvar en una sandez de notorias dimensiones, y pongámonos metafísicos, porque el director manchego parece sugerir que el soporte sobre el que se se proyecta una obra condiciona radicalmente su naturaleza como película, transformándola en algún otro tipo de ente abstracto que no merece galardones ni reconocimiento alguno.
Sinceramente, dudo muchísimo que el mero factor del formato de exhibición de un filme modifique su categoría y cualidades, por así decirlo; del mismo modo que el hecho de que algo cuente con la firma de un “artista” no lo convierte en una obra de arte automáticamente, como demostró Piero Manzoni con su obra “Mierda de artista” hace casi seis décadas.
Señor Almodóvar; la pantalla del proyector con el que veo Netflix en casa es casi tan grande como algunas de las que hay en las salas de los multicines de mi barrio. Si quiere, cuando estrenen ‘Okja’, le invito a verla en el sofá, a ver si aquí le parece más película y se plantea elogiarla como están haciendo los críticos que ya han tenido el placer de verla.
¿Deberían las plataformas digitales sustituir a los cines?

Las declaraciones del director de ‘Todo sobre mi madre’ nos conducen también a esta otra cuestión. Dejando de lado la prepotencia y el aura mesiánica de quien trae la verdad absoluta transmitida en su frase “bajo ninguna circunstancia, deben [las plataformas digitales] cambiar los hábitos de los espectadores.” —veremos las películas cómo y cuándo nos plazca, faltaría más—, Almodóvar ha sostenido que las nuevas formas de exhibición “no deberían sustituir a las salas de cine”.
Por supuestísimo que las plataformas de streaming ni deberían reemplazar a las salas tradicionales, ni probablemente lleguen a hacerlo. Como ya explicó Will Smith en sus declaraciones al respecto desde Cannes, los cines y el VOD son dos sistemas complementarios para experimentar el séptimo arte de formas distintas, y para facilitar el acceso del público a contenidos que, de otro modo serían incapaces de disfrutar.

No hay más que abandonar las facilidades y la oferta cultural que ofrecen las grandes ciudades, y atender a la cartelera de cualquier cine de una provincia más pequeña para darse cuenta que, en ocasiones, plataformas como Netflix pueden dar la vida al cinéfilo hambriento de títulos más variados y, lo que es más importante, en versión original.
Aún así, para la inmensa mayoría, la experiencia de poder adentrarse en la oscuridad de una sala de cine correctamente equipada, con una pantalla de dimensiones considerables y un buen sistema de sonido Dolby Atmos, y disfrutar de un largometraje, no podrá ser sustituida jamás; por muy cómodo que sea coger el mando de la televisión y navegar por un catálogo infinito desde el sofá de casa.
¿Es Netflix el paraíso terrenal y la salvación de la industria?

Que Netflix y su potentísima maquinaria han puesto patas arriba la industria cinematográfica, y han abierto muchísimas puertas y vías de producción y exhibición a todo tipo de proyectos, es algo innegable. Pese a ello, dista mucho de ser, a menos a día de hoy, el caballero andante de impecable armadura que salve al cine a lomos de su corcel.
Como todo en esta vida, el modelo de Netflix tiene claroscuros, pero hasta el momento, parece estar ofreciendo oportunidades únicas a realizadores y equipos de todas las categorías y trayectorias, facilitando la financiación de cintas que, de otro modo, no verían la luz, y dando una libertad creativa a realizadores consagrados como Bong Joon-Ho, impensable en otras circunstancias.
En lo que respecta a los espectadores que amamos el cine, aún no sabemos si, en un futuro, tendremos que maldecir a Netflix por destruir nuestro amado medio como presagian en Cannes, pero, por el momento, nadie nos quitará nuestras sesiones dominicales en ropa interior.
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maginder
Lo curioso del señor Almodóvar, es que, película tras película, va reduciendo el numero de espectadores que lleva a las salas. Por mucho que ahora coja el estandarte de los "artistas de verdad" no creo que tarde mucho, en que empiece a trabajar para alguna de estas plataformas. Quizás no Netflix, pero con Movistar tiene muchas papeletas...
Y recordemos que este señor, empezó en una época donde cualquier sucesión de planos grabado con una cámara, era proyectado en cines de barrio. El tuvo que luchar desde el Cine Pavón, contra las superproducciones que se exhibían en la Gran Vía. Es hijo de su tiempo, de su contexto. Y ahora que su tiempo ha acabado, debería simplemente sentarse en el cómodo sillón de "vivir de los éxitos pasados" y dejar que los nuevos artistas, encuentren la maneras mas eficientes de producir sus obras.
jush 🍑
Os apuesto lo que sea a que Almodóvar termina haciendo algo para Netflix.
🖕🏻
Estoy suscrito y lo veo a diario. Me encanta. Pero ¿de verdad es necesario poner NETFLIX en negrita 9 veces? Y el logo, y en el titular?
Parece más un anuncio de Netflix que la lego película del juguete.
🖕🏻
Personalmente me parece más cine casi cualquier película de Netflix que las de Almodóvar. Es muy personal, no me gusta su cine. Pero el articulo manipula la realidad con un par.
katre
Al cine lo que lo va a matar es que te metan 15 minutos de publicidad antes de las películas, los precios y la gran cantidad de maleducados que van a los cines, no Netflix.
gunzalobill
Al cine ya lo ha matado Disney, pero todavía no os habéis dado cuenta.
cliff_lda
El streaming si puede matar al cine, si Warner crea un formato parecido a Netflix pero con todo su catalogo y sus estrenos y Disney replica lo mismo, despídanse del cine. Todos se unirían a la tendencia, no soy experto en el tema pero se ahorran los intermediarios
noel_delmar
Almodovar está chocho y desde hace muchos años en decadencia, simple y claro. De aquí a un tiempo me lo veo dirigiendo algo para Netflix, o bueno no... mejor Amazon que es más de "culto" XD
Usuario desactivado
Defender Netflix diciendo que vosotros tenéis una tele gigante en vuestro salón es para mataros directamente, vaya gentuza, yo creo que hay argumentos de sobra para no tener que recurrir a semejante glilipollez
dark.tron
En todo caso lo que no matará será a las "salas de cine".
therealaserra
Sinceramente, no entiendo a Almodóvar. Hoy en día está demostrado que las únicas películas que realmente obtienen suculentos beneficios son las superproducciones como las de Marvel/DC, Piratas del Caribe, Star Wars, etc., porque son películas que la mayoría de los aficionados al cine entendemos que, por su espectacularidad (que no calidad), deben ser vistas en la gran pantalla. El cine de Almodóvar, más íntimo y 'terrenal', aunque se pueda disfrutar en el cine, no lo necesita. Es más, precisamente por su, de nuevo, íntima cercanía, es posible que sus películas sean más 'disfrutables' en la intimidad del hogar.
Otra cosa es entrar en la melancolía y fetichismo de ver cualquier producto en una sala de cine o la de apoyar públicamente una industria- la de las salas de cine -que vive sus horas más bajas y está en plena fase de extinción. Y creo que la postura de Almodóvar, amante de lo clásico, a pesar de haber sido, en su momento, todo un revolucionario, parte más de esta dirección, más romántica que práctica... y realista.
Al final no puedes obligar a la gente a disfrutar de algo del modo concreto que tú quieres. Lo que más tendría que importarte es que todos quieran ver tu arte, del modo que sea, porque eso hará que los que tienen la pasta, los productores, golpeen tu puerta para que hagas más películas.
uti
A Almodóvar lo han encumbrado tanto, que se cree poseedor de la verdad absoluta.
El cine es cine se vea donde se vea, en una televisión o en una pantalla panorámica con dolby surround, y que venga este mente obtusa sentando cátedra con sus gilipolleces es para mear y no echar gota.
Donde vivo cerraron el multicine hace varios años, me tengo que desplazar más de 30 kms para ir al cine, en consecuencia, veo todo lo que puedo en mi smarttv curvo de 55". . . . . . . .¡y lo que veo sigue siendo cine! Le guste o no le guste al señor Almodóvar.
Esta noche han repuesto en un canal las dos películas de Alien que marcaron un hito, ¿eso no es cine por verlas en un televisor?
sergiovilla piera
nos estamos yendo demasiado por los cerros de Úbeda... Netflix, Amazon, Hulu, etc. no van a matar al cine, ni le harán tilín.... así que todos tranquilos/as.... pero en consideración a que para el festival de Cannes tienen que ir películas que se estrenen en salas de cine (a partir del 2018 digo) lo veo bien; existen una gran cantidad de festivales y Netflix puede ganar en esas... ¿o porque Idris Elba por "Beasts of No Nation" no fue nominado? ¿alguna película de Netflix en los Oscars?... y es mentira con lo de que películas de Cannes no se estrenen en cines, no vivo en Austria, ni en Polonia, ni en Holanda, pero sí ganara una de ese país se estrenaría allí (segurísimo), así que, chitón!... otra cosa, es que no tengan distribuidoras aquí, que eso, ahora mismo es muy normal... y por ende, damos las gracias a Netflix o incluso al DVD/Bluray por poder disfrutarlas... (las que no se exhiben digo...)
irontark
Lo que va a matar al cine es que películas mediocres como rápido y furioso 8 o remakes hechos para vender nostalgia como la bella y la bestia hagan mas de mil millones en taquilla y que una leyenda como martin scorsese tenga que acudir a netflix porque un estudio no quiera financiar su películas.
briyino
Estoy con Will y con Pedro, por un lado Netflix y similares, son una forma complementaria al cine para acceder a producciones que no están al alcance y es bastante confortable, como el ir a una sala de cine bien equipada con cómodos asientos, el respirar un poco de aire fresco el simple echo de salir al cine es bastante gratificante. Que si Netflix empeora el actual panorama del cine? Pues sí, tanto a los productores de filme como a exibidores, gracias a la la taquilla y el visitar las salas de cine es el medio por excelencia para salvar la producción de una película y sus productores recauden todo el dinero posible para seguir creando cine, como lo es el VOD antes conocido como vídeo club, donde también intentan recuperar la inversión de películas que han triunfado y fracasado. El Vod en streaming o en descarga digital y las nuevas plataformas, lo único que hacen es llegar los primeros a una forma alternativa de ver películas y competir como un canal más. Le hacen daño al cine cuando se crean series a día de hoy de más calidad que la mayoría de películas que se hacen últimamente, las salas de cine como las plataformas de streaming pierden las dos una más que la otra, aunque estas nuevas alternativas tengan parte del público por suscripción nunca llegan a conquistar a masas de gente como en el cine, creo que aún no hay un servidor tan potente para conectar a Netflix a un gran número de personas a la vez en un estreno como Transformers o Piratas del Caribe.
Lo que seria interesante es el estreno simultáneo, donde los que aprecian el cine de verdad irían a ver los blockbusters veraniegos de cabeza a Imax, el cine hoy en día es un riesgo como la bolsa , donde ganas o pierdes, y que debido a internet por desgracia, tanto las salas de cine como las televisiones siguen en peligro al mismo tiempo que dependen de la red.
morricone
Creo que la discusion mas que nada pasa sobre los gustos de los espectadores y no sobre la muerte o no del cine.El cine es una pelicula y no una sala o donde la veamos cada uno.Seguramente muchos directores prefieran que su obra sea vista en grandes salas,al igual que muchos musicos prefieran que escuchemos su musica en vinilo o cd.Pero eso dependera de cada consumidor y no de una sala o de netflix.Yo tengo 40 y no voy mas al cine porque no soporto a la gente,sus telefonos y sus ruidos (de todo tipo y gustos),compro musica en cd,descargo y tengo spotify;en cambio mi hijo de 12 va al cine,ve series en el telefono,escucha spotify y disfruta igual que yo salvo que de distinta manera.Son gustos.
vicied
Entiendo que el señor Almodóvar no publícara sus filmes en BlueRay, DVD, etc. No se va a rebajar a ser visto en una TV doméstica.
El Señor Lechero
Yo soy consumidor de plataforma de pago en casa y procuro ir al cine con mi pareja siempre que podemos. Hemos llegado a ver dos pelis semanales en gran sala pero ¿seguro que la culpa la tienen Netflix o Momistar +? La cartelera del multicine al que he de ir -no hay salas en mi pueblo- da muy poca variedad; solo hay precuelas, secuelas o remakes y para colmo, el estado de deterioro es mayor. Las entradas son más caras y la posibilidad de llevar roscas y bebida ya lo hace prohibitivo. La fiesta del cine demuestra que con buenas estrategias se llenan las salas. Y el señor Almodóvar tiene una historia a sus espaldas que hace que sea ya parte de la Historia del cine, pero dejando aparte que sus últimos títulos van de lo olvidable a lo malo, creo que le haría falta más autocrítica.
funkse
Y ahora es cuando Netflix le financia una Película a Almodóvar y el dice que no......¿No?
cristian.alvarezpino
Es que a mí me sorprende cada vez que navego por internet una capacidad de argumentación tan pobre y prepotente como la que demuestra el escritor de este texto, acomodando de manera desvergonzadamente falaz los hechos a su sola conveniencia y casi pareciendo voceros oficiales de Netflix en vez de personas que debaten sobre nuevos tipos de mercados y modelos de exhibición.
Habrá que empezar por lo más sencillo:
Ir al videoclub de barrio no matará al cine y no es la queja que hacen las salas de cine o los productores. Como forma de videoclub, Netflix funciona bien y no hay problemas al respecto (aunque su catálogo sea débil y pobre, y es que más allá del mainstream poco se esfuerzan en traer autores realmente interesantes... así que me pregunto qué descubrirán los hijos de Will Smith) (además, esto es otro tema, lo sé, hay que apoyar los pequeños negocios, los que de verdad buscan la calidad de servicio y la honesta relación con el cliente). Y tal como dijo Will Smith (y tal como seguramente piensa el mismo Almodóvar), la actividad doméstica es perfectamente compatible con la de las salas de cine, digo, en los cines no estarán dando "Lola Montés" y por eso uno recurre al videoclub (¿tendrá Netflix la citada película de Ophüls?). El meollo del asunto, el cual Wil Smith deliberadamente evitó tocar (en detrimiento de decir, una y otra vez, Netflix Netflix Netflix... ¿le pagan por cada vez que recita el nombre de la compañía?), es el estreno. Y, en efecto, Netflix está suprimiendo el uso de salas de cine y pasando por arriba de un modelo de negocio/exhibición que, por lo demás, debe sortear vallas más complejas que Netflix, que usando sólo Internet pueden llegar a cualquier lado del mundo sin preocuparse en lo absoluto de políticas de exhibición en otros países, temas de impuestos etc. (lo cual supone una ganancia para ellos). En cuanto a mercado, Netflix juega sucio, se pasa la competencia por el forro y busca monopolizar un modelo de negocio que sólo les favorece a ellos y cuyo fin no es la calidad de sus productos sino que las potenciales ganancias y anuncios mediáticos (algo para lo que ustedes los medios de comunicación han sido la mar de obedientes y domesticados). ¿Qué problema habría con que Netflix siguiera el conducto regular, es decir, que estrene sus películas en salas de cine y luego de un tiempo prudente se lancen al mercado doméstico/streaming? Es lo que hace Amazon...
Y, en efecto, es perfectamente comprensible que todas las películas en competencia se aboquen a las mismas reglas.
En cuanto a qué hace que el cine sea cine, esto es complicado y la verdad es que bastante poco dado a la afirmación taxativa del escriba. Netflix ya ha tenido problemas por pasarse por el forro el formato de imagen de ciertas películas, lo cual no deja de ser sintomático: a ellos no les importa la calidad ni las características artísticas de lo que exhiben, sólo que sean un pedazo de información que añadir a su fría maquinaria. Los directores filman sus películas en determinados formatos y en determinados soportes por una razón: para que sean vistos y disfrutados de esa manera. No siempre se puede, claro, si no fuiste al cine te perderás esa experiencia. Y el cine comenzó en una sala oscura ante una pantalla grande, así que eso es el cine. Hacer largometrajes que se estrenarán en internet... llámenlo como quieran, pero eso no es cine. Es como si quisieras leer cómics de Junji Ito, Enki Bilal o Jacques Tardi en una tablet: la imagen se ajusta al tamaño del dispositivo en vez de mostrar las verdaderas características de la obra: las de Ito son páginas pequeñas, las de Bilal son grandes (se aprecian más los paisajes)... ¿O creen que se puede ver una pintura, un mural digamos, en la pantalla del celular? La materialidad y el soporte determinan que el cine sea cine, el cómic sea cómic, y así. Que luego, por distintos temas se vea en otro formato, es una discusión diferente. Qué remedio, yo también tengo una tele grande en una habitación que me he encargado que parezca lo más "cinematográfica" posible, pero no es un cine... claramente no es un cine... comparar un plasma con una pantalla de cine...
Y por último, dejando que mi vena paranoica lata con fuerza: me parece peligroso que estén consagrando (no me extraña de los medios, históricamente siempre de lado de los gigantes multinacionales) a Netflix como una especie de único creador y exhibidor de contenidos, a este paso lo único que lograrán es que Netflix tenga el suficiente poder para dictar qué se puede ver y cómo, no al estilo de 1984 sino al de Un mundo feliz, o una mezcla. Ya es suficientemente alarmante que Netflix tenga tamaño control sobre los hábitos de sus borregos, digo clientes, y que a partir de entonces cree contenido no con el fin de crear algo de calidad sino algo que sea consumido voraz y masivamente.
Almodóvar defiende el cine (y no tendría nada de malo si firma con Amazon en tanto ésta le permita estrenar sus películas en salas de cine de verdad), por más que al escriba del texto no sea fanático de él. Espero no llegar a vivir el día en el que Netflix controle lo que vemos y cómo lo vemos. Lo barato cuesta caro, dicen.
auerbach
Hemos llegado a tal nivel que decís que se ve igual en una table que en una pantalla de cine y no perdonad pero no.
Netflix tiene derecho a emitirla como sea y Cannes a emitir lo que le apetezca.
¿Va a acabar el VoD con la sala de cine? A medio plazo lo dudo, la razón es simple, se gana muchísimo más vía cine que vía VoD. El día que se igualen ya se lo plantearán. Hasta entonces no.
Es normal que Netflix sé llene de enemigos porque quiere emitir de otra forma, es como pretender ir al premio planeta con un libro electrónico que no sé vende en tiendas.
agentedelatia
¿Pero cual es el problema de Almodóvar? Si él la verá en una pantalla grande...
federicomartinez2
Vine a reírme del doble rasero de éste artículo JAJAJAJA XD
rafamaquina
Por un lado tenernos a Netflix que cierra la producción de una película con el precio que van a cobrar los directores actores y demás personal dando vía libre a como debe de hacer una película el director en cuestión y sabiendo de antemano cuál va a ser el costo de esta después se proyecta en un canal de pago dónde todos los suscriptores van a poder verla y y volver a verla.
Y por otro lado tenemos Almodóvar o cualquier otro director qué juega con el presupuesto sin saber si vas a tener éxito en las salas comerciales y que la productora no sabe si va a recuperar el dinero invertido pero eso sí Almodóvar se llevará aparte de su sueldo el tanto por ciento de taquilla.
Es decir que teóricamente Sí ya no se proyecta sus películas en salas de cine no cobra lo que está acostumbrado a cobrar lo siento pero se te ve mucho el plumero.
macguffinboy
No sé la intención que tiene el autor con este post, lo que sí sé es que siente una profunda animadversión por el presidente del jurado Pedro Almodóvar. El post más que una defensa a la plataforma de streaming Netflix, es una retahíla de frases sacadas de contexto con una dosis extra de sensacionalismo. En lugar de elogiar o sentir admiración por un autor español que ha conseguido presidir el jurado de uno de los festivales de cine más importantes del mundo, opta por devaluar su imagen. En fin, This is Spain.
daniel.chamorro1
Almodovar no dice que Netflix no ponga películas en sus plataformas sino que lo haga a posteriori, cuando se haya cumplido la ley, en este caso de ventanas de distribución, que tienen su lógica ya que ayudan a que el cine sea lo que ha sido siempre. Si eliminas la sala, un lugar donde te garantizan (casi siempre) unos mínimos de calidad y volumen de sonido y tamaño de pantalla, no hay interrupciones y la sala está oscura, lo que te proporciona una inmersión que te hace disfrutar de la película muchisimo más, se perdería muchísimo. Y esa experiencia cinematográfica debería ser la mínima para la primera vez que se ve una película. Almodovar tiene razón por mucho que nos guste o no su cine, que no se deben mezclar cosas. Creo que no se valora tanto un producto o servicio si no cuesta esfuerzo, tiempo, o dinero, por lo que una buena película con sus esperas para estreno, primero en cine, luego en alquiler y luego en venta en bluray, nos permite disfrutar en varias ocasiones de la llegada de la misma a sus distintas posibilidades de disfrute de maneras diferentes. Es un sistema que funciona y que tiene su porqué. Es mi opinión.