Leía hoy unas declaraciones de Nacho Vigalondo, cuyo primer trabajo de cine, el corto 7:35 de la mañana, es candidato este año a los Oscar, para sorpresa de todos. Vigalondo sale el sábado para Los Ángeles, pero antes imagino que llevará tiempo saturado de periodistas.
Entre otras cosas contaba que el cine español tiene "una crisis creativa y comercial porque ambos conceptos se suelen separar, cuando deberían estar unidos, como en el caso de Amenábar. El término medio entre lo creativo y lo comercial no es una concesión, es un reto". Es de esperar que la savia nueva se haga notar cuanto antes. Imagino que no habremos de esperar mucho para ver el primer largo de Vigalondo y una cosa segura es que nos va a sorprender.
Su corto ha sido premiado ya en múltiples certámenes y festivales, lo que sin duda ha sido la razón de esta nominación que nadie en España esperaba. Sin embargo, en los Goya ni siquiera fue nominado. Vigalondo pasa con astucia de polémicas y dice que "es cuestión de gustos". La verdad es que la academia española no se rige por unos criterios parecidos a los del resto; de hecho Daniel Guzmán tiene un Goya por un corto.
Desde aquí deseamos que la suerte acabe de cebarse en este joven director, guionista y actor vasco cántabro formado en el País Vasco. Que sea el punto de inflexión, que irrumpa la creatividad en el cine español, y a ver si de paso se pega algo por allí en Hollywood.
Vía | Agencia EFE
