En televisión, los Globos de Oro han sido, tradicionalmente, los más propensos a subirse al carro de los estrenos del otoño. Como se entregan en enero, pueden indicar a veces qué series nuevas pueden llamar la atención de los Emmy en septiembre, como ocurrió hace un par de años con 'Homeland', pero no hay que olvidar que estos premios también tienen sus particularidades. Les encantan las estrellas de cine que hacen tele todavía más que a los Emmy, y son muy de nominar a cualquier actriz joven y guapa que destaque un poco. Esto, que dicho así suena muy mal, tiene su lado positivo, y es que son los únicos que se han atrevido a nominar, y premiar, a interpretaciones femeninas tan características como la de Jennifer Garner en 'Alias' o Sarah Michelle Gellar en 'Buffy, cazacampiros' (aunque ella no llegó a ganar).
Con estos antecedentes, había bastantes esperanzas de que, con la estupenda cosecha de estrenos que ha habido este año en Estados Unidos, hicieran hueco en sus nominaciones a unas cuantas de estas novedades, y lo cierto es que no han decepcionado. Donde se ha notado más la 'limpia' de títulos ha sido en drama, categoría en la que 'Mad Men' y 'Homeland' son dos de las grandes olvidadas de estos premios, y donde ver a 'The Good Wife' candidata al lado de clásicos en los Globos como 'Breaking Bad' y 'Downton Abbey' es bastante gratificante. La sorpresa, a medias, la ha dado Netflix, que ha conseguido que 'House of Cards' sea la serie más nominada gracias a sus candidaturas a drama, actor y actriz principales y secundario para Corey Stoll. Independientemente de su calidad (que la tiene), el poder de atracción de los nombres tras ella es difícil de resistir.
Las nuevas nominadas
Una candidatura con la que se contaba era la de Tatiana Maslany a mejor actriz de drama por 'Orphan Black', y la asociación de prensa extranjera de Hollywood no ha decepcionado. De hecho, su inclusión y la muy merecida de Taylor Schilling ('Orange is the new black') han sido dos de las sorpresas agradables de la tarde, y que reconocen a dos actrices jóvenes en series nuevas, es decir, son dos opciones justas y, al mismo tiempo, muy de los Globos de Oro. Y algo similar ocurre con 'Masters of Sex', que en otros premios tiene siempre la larga sombra de 'Homeland' oscureciendo sus posibilidades de éxito y que aquí ha conseguido una candidatura en drama y otra para Michael Sheen.
El tirón de Sheen, de todos modos, puede venir más por su trayectoria en el cine, que también puede tener parte de la culpa en las nominaciones de James Spader por 'The Blacklist', Jon Voight por 'Ray Donovan' y Michael J. Fox por 'The Michael J. Fox Show'. Y tampoco hay que despreciar el de Andy Samberg por su etapa en 'Saturday Night Live', consiguiendo no sólo reconocimiento para él, sino también para su serie, 'Brooklyn Nine-Nine', que es de las pocas comedias nuevas en las que se han fijado los Globos de Oro. Mientras en drama se ha visto una renovación bastante amplia (no está ni 'Juego de tronos'), en comedia las cosas siguen básicamente como están. Aunque, siendo justos, los Globos se atreven a algo que los Emmy no hacen; nominar a 'Parks and recreation' como mejor comedia.
Y los olvidos
Sin embargo, a pesar de que los votantes han prestado atención a los estrenos (y hasta han incluido opciones muy interesantes en las miniseries, como 'Dancing on the edge'), es inevitable que se hayan olvidado de otras opciones que también habrían merecido una oportunidad. 'The Americans', por ejemplo, cae víctima de que los premios sólo tienen ojos para una serie de FX, y ésa es 'American Horror Story' (la serie y Jessica Lange son candidatos de nuevo), y aunque la nominación de Michael Sheen es merecida, no lo habría sido menos la de su co-protagonista, Lizzy Caplan. Podemos estar sugiriendo todos los olvidos que se os ocurran (sobre todo en las categorías de secundarios, donde la mezcla de drama, comedia y miniseries da para unos jaleos importantes), pero lo más destacable en este aspecto es la caída de antiguas ganadoras.
HBO, por ejemplo, ha sido destronada por Showtime, que tiene cuatro series nominadas, y hasta por Netflix, y tiene que consolarse con los reconocimientos para 'Veep' y con su dominio habitual de las categorías de miniseries y tv movies (aunque ahí reina también BBC). Y aparte de 'Juego de tronos', las dos series que han sido totalmente ignoradas por los Globos este año son campeonas pasadas como 'Mad Men' y 'Homeland'. La primera ya es agua pasada para los premios desde hace un par de años, y la segunda se ha visto arrollada por las novedades de 2013, que han suscitado mucho más interés y emoción entre crítica y público. Después de las muy conservadoras y aburridas nominaciones de los premios SAG, las de los Globos de Oro son más variadas y divertidas, aunque sean unos galardones que van siempre muy a lo suyo y que no pueden tomarse del todo en serio. Eso sí, esta temporada de premios está dejando clara una cosa; que la única constante es la presencia de Kerry Washington en todos ellos.
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