Por suerte, hay vida más allá de los realities de Telecinco y no todo son galas interminables, anuncios a tutiplén y gente en plató debatiendo durante horas sobre algo hasta la extenuación. 'Fboy Island' es el perfecto ejemplo de reality mamarracho que sabe a lo que va y aprovecha para explotar su premisa de la forma más divertida y, a veces, ni siquiera se toma en serio a sí mismo.
Tres chicas, 24 pretendientes, la mitad son chicos buenos y la otra mitad, chicos malos. ¿Quién dice la verdad y quién miente? Vamos a repasar algunos de los momentos más divertidos de este reality que engancha más que La isla de las tentaciones y cuya primera temporada tenéis en HBO Max.
Mentiroso compulsivo
Pese a que, en un principio, no sabemos quiénes son los chicos malos y quiénes los buenos, ya hay ciertos personajes sobre los que tenemos ciertas sospechas. Comenzando por Garrett, un tío que en las entrevistas hace gala de "hacer sentir seguras a las chicas para que se abran a él". Y, claro, cuando luego le cuenta a Sarah que le adoptaron en Rusia y tiene una hermana sorda pues muy fiable no es que suene.
Las Red Flags
Uno de los momentos más divertidos es cuando las chicas identifican indicios de que un concursante puede ser un chico malo. La cosa va desde ser promotor de discotecas, miedo al compromiso, fetiche con la comida o ser inversor de Bitcoins. Sin olvidar la palabra de emergencia para cuando un tío se pone muy pesado: ¡Pterodáctilo!
CJ a caer de un burro
La pobre CJ es la concursante que más insultos se ha comido a lo largo de la temporada. Entre Devij cuando se pone a rajar de ella, diciendo que es una mimada que no ha leído un libro en su vida, y Casey en plena rabieta, acusándola de "no merecer a ninguno de los chicos" y llamándola de todo menos guapa... la pobre tiene que aguantar lo suyo.
Chicos malos en terapia
Otro de los momentos estrella es en Limbro (o Purgatorio), el lugar a donde van a parar los chicos malos eliminados (mientras que los chicos buenos disfrutan de una relajante sesión de belleza). Nikki les somete a una divertida terapia: "¿Es la primera vez que hablas con una tía a la que no quieras tirarte?" les pregunta. También les acompaña en su grupo de apoyo de chicos malos, donde esperan rehabilitarse: "La falta de sexo me está afectando" se lamenta alguno.
Esta casa era una ruina
Casey es uno de los pretendientes preferidos de CJ, pero ella no se termina de decidir porque todas las señales le dicen que es un chico malo (nunca te fíes de alguien que se tatúa su propio nombre). Así se lo resume: "Eres como una casa en ruinas. La miras y piensas: Vaya mierda de casa. Pero cuando la tiras y le pones muebles de Ikea, pues está mucho mejor. Me preocupa que seas un chico malo y tenga que reformarte".
"Ryan In Peace"
En los primeros episodios, se produce la primera y única baja del programa: Ryan ha tenido que abandonar el concurso debido a un accidente. ¿Ryan? ¿Qué Ryan? Ni los propios concursantes se acuerdan de él hasta que ven un montaje de varios planos en los que aparece de fondo. "Ah, sí... ese".
Amor de colegas
Si las relaciones que surgieron en el programa llegaron a buen puerto después de todo, eso ya no lo sabemos, pero sí que hay una auténtica historia amor en esta edición: la de Casey y Garrett. Los dos se llevaron a las mil maravillas, hasta el punto de que Casey arriesgó su relación con CJ dándole la turra sobre lo colegas que eran. Incluso Garrett le propuso a Casey vivir juntos después del programa. Luego la cosa salió regular...
Baño de humildad
Otro momento surrealista es la prueba en la que los chicos se sientan debajo de un cubo de agua, las chicas les hacen una pregunta y, si no les gusta la respuesta, pueden tirar de la cuerda y darles un remojón. Entre los que más se calaron estuvieron Greg, por hacer trampas en el juego de 'Fuck, Marry, Kill', OG Jared, por dar la "respuesta más simple" y Fernando, por no saber responder a qué son unos buenos preliminares.
Asamblea de "Mansplaining"
No podemos terminar sin la mítica asamblea en la que todos los chicos eliminados opinan sobre los que quedan, momento en el que los trapos sucios vuelan de un lado para otro. Que si Garrett dice que Sarah quería "pegar un braguetazo" y tendría que ponerse unas tetas falsas, que si Casey llamó a CJ "escort de lujo", que si Jared tiene a nosecuantas tías haciendo cola para cuando salga del concurso... al menos, se lo toman con humor.
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