Impagable este vídeo que ha saltado hoy a la palestra. En el Call-TV de laSexta, "teletimo" para más señas, un participante no sólo acierta el nombre propuesto en la sopa de letras, también adivina las letras del alfabeto que están contenidas en una tarjeta en un sobre cerrado y que le dan derecho a sesenta mil euros. La presentadora, con la cara hecha un poema, mira a un lado y a otro, como recibiendo instrucciones de alguien en plató, y finalmente afirma que, como no las ha dicho en orden, no hay bote que valga. La llamada ya no está en el aire y ella afirma que están cogiendo los datos del acertante en control.
Podríamos pensar que este vídeo es un montaje del programa para dar difusión al espacio pero qué sentido tiene, si así fuera, no poner el típico sonido del concursante pegando gritos de alegría. Por otro lado, el tipo no parece emocionarse demasiado con todo lo que le está pasando, al menos durante el tiempo que la llamada permanece en el aire. Quizá es que esta mala publicidad sea mejor que la ausencia de publicidad y puede que poner en la palestra a alguien acertando, que es toda una novedad, sea lo único que importa. Yo personalmente me inclino a pensar que se han colado, pero habrá que ver si el acertante pone los medios necesarios para cobrar el premio que le corresponde en justicia.
En cualquier caso vuelve de esta manera el debate sobre lo rentable de estos concursos, sobre dónde van a parar los premios que no se dan y sobre la rentabilidad para las cadenas de estos espacios, una estafa en toda regla que se alimenta de vaya usted a saber qué motivación de los espectadores, que siguen llamando. Si nadie llamase, no habría negocio. Se suma a esto, y nada más lejos de mi intención que parecer feminista, el aspecto de las presentadoras, muy cercano al de las actrices porno muchas veces, y la emisión de algunos de estos contenidos en horario para todos los públicos.
¿Qué más tiene que pasar para que se ponga freno a este tipo de programas? Desde multitud de fuentes se advierte sobre el peligro de llamar a estos concursos, las pifias ocupan páginas y páginas de información (tanto en Internet como en la prensa escrita y en los informativos), pero pese a eso estos concursos, por llamarlos de alguna manera, aguantan. Sea como sea nunca hay premio y las cadenas prefieren emitir estos contenidos, muchas veces con los presentadores haciendo el ridículo, antes que otro tipo de cosas. Por algo será, pero qué pena me da la cantidad de tiempo televisivo desperdiciado para los espectadores.
Actualización: Como nos avisa Vermet en los comentarios, laSexta ha reclamado a la productora del Call TV el pago del premio y desde la productora han achacado el "fallo" a un error humano de la presentadora. Que yo recuerde, no es ella la que dice eso de "cierra la línea" y que se escucha de fondo, pero alguien tenía que pagar el pato. Estaría bien que laSexta se planteara no seguir encargando este programa ni ninguno parecido. A ver si escarmientan.
Vía | Ten cuidado En ¡Vaya Tele! | El incomprensible éxito de los programas 'Call TV'
Ver 29 comentarios