Lo leí ayer en la prensa publicado. Y está relacionado con el estreno madrileño de La guerra de los mundos, de Steven Spielberg, haciendo referencia a que el mismo va a ser sonado. ¿A qué se va a deber? Pues tan simple como que los invitados al estreno han recibido un par de folios explicando las condiciones que deberán cumplir para acceder a la sala: les serán retiradas las cámaras de fotos, grabadoras y hasta los móviles, de cuya conservación nadie se responsabiliza; se les obligará a pasar bajo un detector de metales; deberán llevar consigo el carné de identidad; podrán ser grabados por cámaras ocultas durante la proyección...
Todo ello para que alguien piratee la película y luego sea distribuida en el top manta. Hacen gracia tantas medidas de seguridad para lo que finalmente será inevitable: que los piratas de verdad, no invitados al estreno, descubran otras formas de obtener la película. ¿Alguien cree que no tengan ya una copia en su poder? Pensarán que es más inteligente montar todo ese espectáculo para lograr que no pirateen la película. De risa.
En Blogdecine | Nuevo trailer de 'La guerra de los mundos'