Entrevista a David Victori, director del corto 'La culpa'

Hace poco un servidor os hablaba de ‘La culpa’, cortometraje dirigido por David Victori, quien ahora aspira a quedar finalista para ir a la próxima edición del festival de Venecia en el que diez cortometrajes competiran por el premio: 500.000 dólares de presupuesto para un corto producido por Ridley Scott y protagonizado por Michael Fassbender.

En Blogdecine hemos querido aprovechar la ocasión para entrevistar a Victori, quien tras años al lado de Bigas Luna, ha decidido dedicarse en solitario a la ardua tarea de dirigir. Consciente de lo problemas que hay en nuestro país de producir un largo, Victori me ha parecido alguien con las ideas bastante claras. Aquí os dejamos la entrevista que le hice ayer mismo, esperando que disfrutéis de la misma. Desde estas páginas le deseamos a Victori lo mejor, o sea, que quede finalista.

• Empezamos con una pregunta muy lógica ¿Consideras la posibilidad de hacer ‘La culpa’ en largometraje, como así ha ocurrido con otros trabajos de cineastas españoles o piensas dejarlo así?

‘La Culpa’ nació con la idea de ser breve y no creo que tenga ningún sentido extenderla más. Creo que los proyectos deben construirse con mucho cuidado y desde mi punto de vista, las razones por las que una historia se cuenta en doces minutos o en dos horas son razones muy concretas que no deben confundirse. Entiendo que si a una productora le gusta un corto le resulte más fácil imaginar un largo alrededor de esa misma idea que ya ha visto que funciona, pero es muy importante no confundir cuando hay material para un largo y cuando no. En este caso, ‘La Culpa’ es como una fábula, una metáfora, una historia que intenta arrastrarte emocionalmente sin que tengas tiempo de plantearte demasiadas cosas. Convertirla en un largo necesitaría de tantos cambios que no tendría sentido. Mejor partir de cero. Además, si trato de imaginar esta opción que planteas, adelanto situaciones muy desesperantes: me veo en reuniones eternas discutiendo con productores desconcertados preguntándome constantemente si todo lo que ha pasado es real, fruto de su imaginación o algún salto a una realidad paralela. :) No, gracias.

• Ridley Scott y Michael Fassbender, nada menos. Eso es un premio para cualquier cineasta y lo demás son tonterías. ¿Qué te hace más ilusión, que ese corto lo produzca Scott o tener la posibilidad de dirigir a alguien como Fassbender?

Si tuviera que elegir, sin duda, escogería tener a Ridley Scott como productor. Trabajar con Fassbender debe ser un lujo, pero comprar de segunda mano parte de la experiencia que Ridley Scott ha acumulado durante tantos años y tantas buenas películas; no tiene precio. El arte de explicar historias es un arte terriblemente complejo, todo el mundo opina, todo el mundo cree ver problemas en un guión, pero nadie sabe cómo resolverlos. Hay muy poca gente que sepa como contar historias de forma efectiva. Ridley es un maestro, alguien indiscutible que ya ha demostrado sobradamente su oficio, talento y capacidad de trabajo. Estar a su lado sería un auténtico lujo.

• ¿Qué largomentraje te gustaría ver producido en España? ¿Y en Hollywood?

En España me gustaría ver más películas que tratasen de conectar con el público desde el convencimiento, la seguridad, y no desde el miedo. Parece que algunos productores y directores traten a la gente como si fueran extraterrestres, un ente que no sabes como reaccionará. Se olvidan de que ellos también son, o deberían ser, el primer espectador de su propia película. En realidad, ellos son, sin lugar a dudas, quien más veces verán su propia película, deberían amarla. Yo creo que el público sólo quiere (queremos) historias bien contadas, que consigan lo que se proponen. Si quieren hacerme reír, que me hagan reír, si quieren hacerme llorar, que me hagan llorar. Al final, la materia prima, las historias se repiten, se parecen unas a las otras; la diferencia está en la forma en la que se explican. La mirada del director y el diálogo con el espectador. Me gustaría por ejemplo que en España alguien se atreviese a rodar una película como ‘Chronicle’ (Josh Trank) o en Hollywood los estudios no tuvieran ningún miedo en darle carta blanca a un director como Alberto Rodríguez, que ha demostrado sobradamente su garra como narrador.

• ¿Cuáles han sido tus influencias a la hora de realizar el corto ‘La culpa’?

Si es que eso es posible, cuando empiezo a pensar en una historia trato de acercarme a ella de forma muy sincera y sin intermediarios. Quiero descubrir por mi mismo el tema del que necesito hablar en ese momento exacto de mi vida. Para eso intento localizar la emoción o el momento que me despierta la necesidad de contar esa historia y a partir de allí empiezo a construir. En ese momento del proceso, lo que tengo más presente es como el entramado de eventos que estoy hilvanando van a afectar la mente y a la emoción de un futuro espectador imaginado. Esa es mi primera obsesión. Posteriormente, cuando empiezo a preparar el rodaje aparecen referencias que muy probablemente ya estaban en mi subconsciente durante el proceso de escritura, pero que no tenía previamente localizadas. En este caso, con ‘La Culpa’, una vez escrito el guión apareció un corto que había visto hacía mucho tiempo y con el que vi varias similitudes con mi material: ‘Epilog’ de Tom Tykwer. Un trabajo muy interesante. Por otro lado, está el trabajo visual de la película con el que es muy cómodo trabajar sobre referentes. Durante este proceso de búsqueda que hicimos con Sergi Vilanova (el director de fotografía) para todo el aspecto visual del corto, y partiendo siempre de la película que surgía del propio guión, empezamos a visionar juntos varias películas. Repasamos algunas de David Fincher, de James Gray y escenas sueltas de películas de Michael Mann. También estuvo muy presente ‘Munich’ de Steven Spielberg y varias pelis recientes de Clint Eastwood (al que Sergi le tiene una especial devoción).

• Y ya que estamos, gustos, prejuicios, fobias, pasiones, amores desmesurados y demás en esto del cine.

Partiendo de que no soy muy mitómano, y no me caso con nadie, sí que es verdad que tengo una especial admiración por la carrera de varios cineastas. Me gusta mucho, por ejemplo, como Christopher Nolan está llevando su carrera. Creo que está consiguiendo hacer un tipo de cine con un cierto riesgo, sin dejar de ser rentable y haciendo películas que generan mucha expectación. Imagino a Nolan tratando de vender el guión de Memento o Inception a un productor y me entra la risa. Necesitas generar mucha confianza y tener muy buen ojo con tus socios para levantar este tipo de historias, es un lujo para todos los guionistas y directores que alguien de su nivel lo esté consiguiendo. Otro director al que respeto mucho es Darren Aronofsky, que aunque quizás sea más irregular, es también un narrador valiente y emocionalmente muy contundente. Me encanta lo que trató de hacer con ‘The Fountain’ aunque no le saliera del todo bien. Por suerte ‘Black Swan’ le ha vuelto a colocar donde yo creo que debe estar, es un director que merece cierta libertad, es ambicioso y no tiene ningún pudor a la hora de elegir las historias a las que decide enfrentarse. Luego están otros muchos directores como Sidney Lumet, Roman Polanski, Danny Boyle, Fincher, J.J. Abrams, Spielberg, Hitchcock y Mann, que son todos ellos, directores que se mueven en terrenos en los que yo disfruto mucho como espectador y en los que también me identifico como director y guionista. Obras concretas, por decir algunas, tengo especial cariño a ‘Eternal Sunshine and the Spotless Mind’, ‘Children of Man’, ‘Animal Kingdom’, ‘Abre los ojos’, ‘Dancer in the Dark’, ‘21 gramos’ o ‘Oldboy’. Y ya que de momento lo único que soy es un director de cortos hay tres que no me cansaría de ver nunca: ‘Spider’ (Nash Edgerton), ‘Soft’ (Simon Ellis) y ‘La Guerra’ (Luiso Berdejo y Jorge Dorado) y añado otro que descubrí hace muy poco ‘She’s lost Control’ de Haritz Zubillaga, brillante.

• Vamos un poco con lo nuestro. Hay mucho talento entre realizadores de tu generación y dedicados a los cortos, pero pocos terminan por dar el salto al largo ¿Crees que nadie quiere arriesgar en una ópera prima en nuestro país o que sólo quieren ayudar a los de siempre por aquello del éxito seguro?

Los de siempre, si lo hacen bien, que sigan haciéndolo. Por otro lado, es verdad que hay una buena cantera. Yo creo que el gran problema es que muchos de estos directores hablan un idioma diferente al de los agentes que, de momento, tienen la capacidad de producir en este país. Para que estos directores se desarrollen necesitan confianza, una cierta libertad y un compañero de viaje que entienda el cine de la misma forma que ellos. Si lo comparamos por ejemplo con el fútbol, muchos de los jugadores jóvenes que están surgiendo en los últimos años deben su éxito, sobretodo, a como el entrenador ha gestionado su paso al primer equipo.

• Una vez Rodrigo Cortés me dijo que nos faltaba autocrítica y que teníamos que dejar de mirarnos el ombligo ¿estás de acuerdo?

Totalmente. Llevamos muchos años haciendo películas en este país que estaban financiadas de tal forma que no importaba como funcionaran en taquilla. Esto que en la teoría podría favorecer que los productores tomasen riesgos y fueran más valientes, a la hora de la verdad y por muchos años, se ha convertido en descuido, desinterés por el resultado y finalmente falta de respeto hacia el público. Tantos productores y directores han ignorado al público que ahora es él quien nos está ignorando a nosotros. Pero es que en muchos aspectos, este oficio es democrático. Al público nadie le obliga a ver una película, van (vamos) porque quieren. Que alguien decida dedicar su tiempo a tu película, por encima de la brutal oferta de entretenimiento que existe hoy en día, sólo lo consigues como quien seduce a alguien, debes despertarle el interés, gustarle, y que el tiempo contigo sea diferente e inolvidable. Y lo debes hacer de buenas maneras y no a base de una especie de chantaje emocional.

• ¿Cómo ves Internet en los nuevos modelos de negocio del séptimo arte?

Yo me paso la mayoría del día delante de un ordenador. He cambiado mucho de piso últimamente y en varias casas en las que he estado no tenía ni siquiera televisor, o sea que la mayoría de las películas que veo (cuando no voy al cine) son en mi ordenador y aunque me gustaría tener un proyector para verlas en grande, aún así las estaría reproduciendo desde mi portátil. Esta es mi realidad. Para mí el debate que hay con esto del negocio del cine e internet es el mismo debate que hace unos años había entre el celuloide y el digital. Es de lógica entender que el cine se reproducirá desde Internet, (como era lógico pensar que el cine acabaría siendo todo digital) sólo que los que deben cerrar acuerdos y aceptar esta situación de cambio son las grandes empresas implicadas que se resisten por razones obvias. Los cambios siempre son traumáticos y el ser humano se resiste por naturaleza a cambiar. Los cambios generan miedos, dudas y gente que antes ganaba mucho dinero, dejará de ganarlo y empezaran a beneficiarse otros. Lo que está consiguiendo Netflix es, a mi entender, el futuro y presente (aunque no en España) del Cine. También entiendo que lo natural será que un día la nueva peli de Nolan la estrenen en Netflix, Filmin o donde sea y los que quieran paguen un poco más y la vean en unas condiciones más confortables y espectaculares que en su propia casa: lo que deberían ser las salas de cine.

• ¿Sueles hacer caso de los críticos o te interesa más la aceptación popular?

Desde mi poca experiencia, aún no he sufrido (o disfrutado) lo que es estrenar un largo, o sea que no puedo darte una respuesta clara a esta pregunta. Entiendo que hagas lo que hagas, siempre habrá gente a la que le guste y gente a la que no le guste tu trabajo, pero entiendo que si tu eres sincero contigo mismo y consigues hacer películas que a ti como espectador te gustaría ver, siempre habrá un público (y un crítico) que disfrute con ellas. No puedes pretender gustar a todo el mundo, por lo tanto, el reto debería ser que las razones por las que eliges las historias que explicas sean sinceras y honestas contigo mismo.

• Volviendo a la primera pregunta. Imagina ‘La culpa’ largometraje hollywoodiense, antes de que te lo copien. ¿Quiénes serían tus actores? Una recomendación: a Mar Ulldemolins no deberías cambiarla :)

Pues la verdad por cambiar, no cambiaría a ninguno. Creo que están todos muy bien, pero si nos ponemos a imaginar, hay muchos que podrían encajar. A ver, una propuesta, aunque se aceptan ideas: ¿Qué os parecería a Michael Fassbender de prota (como no), Philip Seymour Hoffman en el papel del padre y Mélanie Laurent en el papel de la chica?

• Muchas gracias por tu tiempo, David, y crucemos los dedos ;)

Muchas gracias a vosotros por vuestro apoyo, y el estar en esta semifinal ya ha sido un premio.

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