Ha sido hoy mismo, a la edad de 85 años en una residencia de ancianos de Beverly Hills. Shelley Winters ganó dos Oscars como actriz secundaria, uno en 1959 por su señora Van Dann en El diario de Ana Frank de George Stevens y otro en 1965 por Un retazo azul, donde interpretaba a una madre que trataba de separar a su hija ciega de los brazos de un atractivo joven negro, Sidney Poitier. Demostró con el tiempo su capacidad de evolucionar y dejar el rol de sex symbol con que inició su carrera. También apareció en La aventura del Poseidón haciendo gala de sus dotes natatorias.
De mayor Winters fue una abonada a las noticas del corazón; matrimonios tormentosos e incursiones políticas en favor de la causa feminista mantenían su foto en las portadas. De hecho fue una de esas estrellas que encajaron su ocaso publicando libros con multitud de confesiones, revelaciones sobre famosos y detalles escabrosos sobre sus múltiples romances. Así que quizás se la recuerde sobretodo por sus dos escandalosas autobiografías. Burt Lancaster, William Holden, Marlon Brando, Errol Flynn, Clark Gable, Vittorio Gassman (con quien estuvo casada un par de años) o Sean Connery son sólo unas cuantas de sus conquistas.
Vía | El País | Cinematical | Yahoo! News