Lo del equipo hispalense y las televisiones es una historia que viene de largo, y el Sevilla F.C. (vigente campeón de la Copa de la UEFA y de la Supercopa de Europa) se ha plantado y, mediante un comunicado en su web oficial, ha anunciado que no permitirá la emisión de ninguno de sus partidos de esta temporada correspondientes a la Liga o a la Copa del Rey, "en ninguna modalidad, ni en directo, ni en diferido, ni en abierto, ni en emisión codificada, ni en sistema de pago por visión."
Las razones aducidas son que el tratamiento recibido por Mediapro y Sogecable, socios en Audiovisual Sport, "no se corresponde con el papel relevante del SEVILLA FC dentro del panorama futbolístico nacional e internacional, ni con el valor económico del fútbol televisado, en su proyección nacional e internacional".
Personalmente, me suena a pataleta (y, aviso, que todo lo que viene detrás está dicho desde el máximo de los respetos a la afición sevillista y a la institución: son datos, nada más). El Sevilla es un equipo muy querido por su afición (como creo que todos los equipos) pero deportivamente (ciñéndonos a los resultados) no se puede decir que sea un "grande". Ganó una única liga hace más de 60 años, tres Copas por la misma época y sólo la pasada temporada, la de su centenario, ganó su único título europeo (la Copa de la UEFA) redondeado con la Supercopa del pasado viernes. Si bien es cierto que últimamente atraviesa un momento dulce, no es menos cierto que a finales de la década pasada pasó unas temporadas en la segunda división.
Por supuesto, cada club es muy libre de decidir cómo y cuándo permitir las retransmisiones (salvo que haya acuerdo global entre los clubes). Pero jugar a "damisela deshonrada" no creo que sea el papel que más le convenga al Sevilla. El fútbol televisado tiene dos "prima donnas", que son el Real Madrid y el F.C. Barcelona. Son los que generan audiencia y rentabilidad, y los que justifican grandes desembolsos para las televisiones. Los demás, me temo, son comparsas necesarias aunque las mieles del éxito le hagan a uno hablar de su "papel relevante" dentro del "panorama futbolístico nacional e internacional". Personalmente, si yo fuese una de las operadoras a las que el Sevilla intenta presionar, dormiría la mar de tranquilo ante el órdago de la entidad sevillista; no sé por qué me da que el país no se va a echar a la calle para pedir las retransmisiones del Sevilla.
Y me apuesto una caña a que al final veremos al Sevilla por televisión.
Vía | Marca