Me gustaría pensar de otra manera, pero lo cierto es que los seres humanos tendemos a ser unas criaturas despreciables que hacemos todo lo posible por actuar en nuestro beneficio propio sin pararnos a pensar en cómo podría afectar eso a otras personas. Eso da pie a que las leyes que deberían organizar nuestra existencia son vistas como escollos a sortear siempre que sea posible y en una desconfianza natural hacia prácticamente cualquier persona que no conozcamos ya de antemano. Me consta que hay no pocas excepciones, pero si hubiese que elegir un color para calificar a la humanidad como ente, ése sería un gris muy oscuro, apenas distinguible del negro de toda la vida.
El cine ha aprovechado en infinidad de ocasiones para incidir en esa especie de odio ancestral entre nosotros, pero en la mayoría de ellas se ha hecho para, dentro de la barbarie que se nos expone, transmitir un mensaje de esperanza. Y es que la vida sería muy deprimente si no existiese ese rayo de luz que nos hiciera tener fe en un mañana mejor. Sin embargo, la realidad muchas veces supera a la ficción y no tarda en recordarnos lo complicadas que pueden llegar a ser las cosas. ‘The Purge: La noche de las bestias’ ('The Purge', James DeMonaco, 2013) nos sitúa en una sociedad aparentemente perfecta, pero el precio que tienen que pagar para ello es demasiado alto.
Asesinatos con mensaje

Me resulta difícil concebir la posibilidad de que haya algún amante del cine al que la premisa de ‘The Purge: La noche de las bestias’ no le llame la atención, aunque eso no implica que sea necesariamente para bien. ¿Quién va a reaccionar con indiferencia ante el hecho de que durante doce horas al año se puede cometer cualquier crimen impunemente? Las posibilidades de crítica de antojaban infinitas, pero también el hecho de que en realidad no estamos ante más que una hábil película de terror de bajo presupuesto que ante todo ansía impactar al público para poder convertirse en un gran éxito económico. Por fortuna para nosotros, la alegoría sociológica no es sepultada por otro relato home invasión —eso sí, los paralelismos con cintas como ‘Los extraños’ ('The Strangers', Bryan Bertino, 2008) son más que evidentes—, muy de moda en los últimos años, aunque también se queda lejos de poder dar lo mejor de sí misma en ese apartado.
‘The Purge: La noche de las bestias’ es una película intimista, pero no entendiendo esto como personajes charlando sin que pase realmente gran cosa —aunque sí en su querencia por el uso de planos cerrados—, sino como una forma de crear un relato tenso con una cantidad muy reducida de localizaciones —en algo se tendría que notar sus apenas tres millones de presupuesto—. Tras unos primeros diez minutos para ponernos en contexto, tanto en las peculiaridades del universo que se nos presenta como en la problemática relación entre la familia protagonista, la acción pasa a concentrarse en una casa y las inmediaciones de la misma. Es entonces cuando ‘The Purge’ pone las cartas sobre la mesa y gana la partida pese a haber lanzado un órdago jugando con la idea de que tenía una mano mucho mejor de la acaba mostrándonos.
La realidad de ‘The Purge: La noche de las bestias’

A James DeMonaco, director y guionista, lo que le interesa es desnudar la doble moral de toda persona y cómo ésta se traduce en reacciones que puedan incomodar al espectador. Es por ello que su principal aportación a través de la puesta en escena es la búsqueda ocasional de un mayor verismo visual que nos lleve a hacer nuestro el sufrimiento de los protagonistas, y lo cierto es que durante, más o menos, la primera hora de metraje triunfa en su objetivo. Esencial para ello resulta que incida en las dudas morales sobre la posibilidad de librarse si ‘únicamente’ entregan un vagabundo a la horda de psicópatas que espera en el patio de su casa. Una decisión tan aparentemente sencilla como difícil con la que vivir si uno conserva alguna humanidad.
DeMonaco sabe jugar bastante bien con la idea de que en el interior de todos nosotros habita un asesino esperando a encontrar un motivo para actuar, algo que puede pasar desde la defensa propia o de un ser querido hasta la mera diversión por saber que no va a tener consecuencia alguna. Dicha dualidad está presentada por la familia protagonista y la especie de ángeles de la muerte que llaman al timbre de su puerta para que únicamente les dejen hacer lo que creen no ya justo, sino necesario. Este contraste es lo que añade riqueza a ‘The Purge: La noche de las bestias’, pero también su principal limitación cuando todo se reconduce hacia un mata-mata más o menos ingeniosos con algunos giros de guión tan convenientes para lo que se quiere transmitir como discutibles en su verosimilitud.

La presencia de Ethan Hawke es vital para sostener la credibilidad de la película, ya que los desconocidos intérpretes que dan sus hijos están a punto de cargársela en varios momentos, mientras que, por desgracia, Lena Headey queda en un segundo plano durante demasiado tiempo, apenas teniendo unos minutos de lucimiento durante el último acto. Por lo demás, sólo la siniestra expresividad facial del también poco conocido Rhys Wakefield consigue transmitirnos algo, siendo esto parte esencial de una película que en todo momento apela a nuestra implicación con lo que sucede, la cual sufre varios golpes cuando nos damos cuenta de que estamos viendo a un actor con escaso talento y no a una extensión nuestra o de una amenaza que pueda cernirse también sobre nosotros.
La sensación que queda tras la finalización de ‘The Purge: La noche de las bestias’ es que es una película que podría haber sido muchísimo mejor sólo mejorando su casting y puliendo ciertos detalles problemáticos de su tramo final. Eso sí, es una bofetada en toda regla al espectador que no quiera ver nada más que una home invasión cumplidora, ya que su aparentemente alocada premisa no está tan alejada de la realidad. Sólo hace falta que estalle algún conflicto bélico de importancia para que la tiranía de los millonarios vaya acercándose más a lo que aquí se propone. Total, no somos más que un mal necesario y empezamos a ser demasiados.
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Lindsay Lohan
Sí, la gente es mala por naturaleza, la prueba de ello es que a la pregunta de qué harías si fueses invisible todo el mundo contesta hacer innumerables putadas.
F.Sobotka
Yo la he visto porque el punto de partida me molaba mucho y siento decir que me pareció muy floja. Lo más interesante de la película son los primeros minutos donde se te cuenta de qué va el asunto(que viene a ser lo qe ya sabemos por el trailer). Lo demás es un intento de Funny Games, con muchas escenas totalmente ridículas, ratos aburridos, y la verdad es que el agobio no se siente para nada (al contrario que en la peli de Haneke).
Ojalá otro guionista escriba una historia entretenida con esta premisa.. porque la hora y veinte minutos de The Purge dista mucho de despertar el más mínimo interés.
publiocarisio
¿La que sale en la segunda foto no es Ana Botella?
mikilink
Doy Fé porque la vi hace un mes: Holly Shit
eluyeni
No he leído la crítica más que las negritas y alguna cosa suelta, pero ésta la veo fijo. Lo mismo es una mierda como la otra a la que alude el título del post. Pero me da lo mismo: me parece una peli "camiseta" de verano perfecta para este finde.
Salu2 ;)
loula2
No se, a mí el argumento me sigue pareciendo una memez. Pero bueno, a lo mejor les sale una de terror pistonuda y lo de menos es buscarle el lado racional al tema...
mika.villalba.94
Pues a mi la premisa me interesaba a priori. La acabo de ver y mientras la veía no paraba de preguntarme: sentirías la necesidad de matar por matar si te lo permitieran esta noche? Y la verdad...tampoco somos tan básicos no?
Es decir....SPOILEEEEEEEEER!!!!!!!!!!!!!!!
El clan de niñatos tenía un motivo relativamente comprensible: ser niñatos pijos con un fanatismo al que agarrarse para hacer niñatadas
Pero que motivo tenian los vecinos? Que los protas fueran enseñando su solvencia economica? A alguien le pareció una actitud lógica???
nin1987
Estoy bastante en desacuerdo con la crítica, no tanto porque la película me haya parecido buena (no es el caso) sino porqué no comparto la interpretación que se ha hecho de ella.
Partamos de la base de que a mi estas películas de miedín con gente sobreactuada que mata no se sabe porque, niñas diabólicas, protagonistas estúpidos e irreales y estética vintage manchada de sangre me atraen nada y menos, y me parece que no tienen ningún tipo de sentido argumental. Fui a ver esta película porque en el trabajo me regalaron un par de entradas y reconozco que la premisa me parecía muy atractiva, y muy alejada del tipo de películas que comento, aunque intuía que estaba enfocada al tipo de público que ve ese cine de terror, por lo que sabía que me estaba metiendo en territorio comanche.
A eso súmale que esa idea de que los humanos somos todos muy mala gente me parece una escusa barata para justificar la irresponsabilidad y pillería, hacer de algo cultural algo natural. Que la violencia nos es intrínseca... vale, que esta sirva para asesinar, violar y hacer matanzas como psicópatas sedientes de sangre, pues no.
Hechas estas aclaraciones decir que me sorprendió muy gratamente que se incidiera tanto en el factor económico y de clase, pensaba que se tocaría muy de refilón y de hecho es uno de los ejes de la película. Lo más interesante de la película es precisamente, y en oposición directa con lo que se dice en la crítica, que la purga no es un evento que sirve para que todos nosotros nos libremos de nuestro "mal karma", que eso es una mentira del gobierno, que el motivo real de todo esto es el exterminio sistemático de las clases bajas perpetrada por un sector activo de la clase alta.
Y muy interesante también que se incida en el sector pasivo de la sociedad, gente como la familia protagonista, ejemplo vivo de que la purga es una farsa, y que la gente que se lo puede permitir se dedica a encerrarse en sus casas con sofisticados sistemas de seguridad. El personaje del hijo intenta visibilizar eso cuando les pregunta a sus padres porqué no participan. Para mi este punto envía el mensaje que la pasividad te hace cómplice.
La película en general, sin embargo, fracasa precisamente en todos los puntos en los que se aleja de lo que podría ser una interesantisima película de politica-ficción y se pretende acercar a la peli de terror adolescente:
Los malos estan tremendamente sobreactuados y son rematadamente imbéciles. El jefecillo, el rubito repelente, no impone ningún tipo de autoridad. Es incomprensible que algunos personajes solamente lleven machetes o hachas (armas muy de peli de miedín) y puedan permitirse el lujo de andar por los pasillos entre risas. ¿Porque iba tan siquiera el protagonista a esconderse de estos patanes? ¿Porque no les abre un socabón en el pecho con su tremenda escopeta propia de Swartzeneger?
Pero realmente la peli se va al garete desde el momento en el que la familia decide luchar a muerte contra la banda. No se da tiempo a que estos maduren la decisión, la hija desaparece de escena de manera absurda solamente para permitir un giro de guión demasiado previsible. ¿Porque no cuentan el número de gente? ¿Porque no se fijan en que armas llevan? ¿Porque no se aprovechan de la tremenda ventaja que supone estar en su propia casa? ¿Porque toda la familia se dispersa en lugar de atrincherarse y permanecer unidos? ¿Cuantas veces se repite la escena de protagonista a punto de morir que es salvado milagrosamente por alguien?
En resumen, ¿porque todo parece dispuesto para facilitar un montón de sustos y giros de guión sin pies ni cabeza?
Una pena, porque realmente el primer tramo de la película esta muy bien hilado.
liengel
Por-el-amor-de-DIOS!! si no fuera por mi inevitable impulso de ver las películas hasta el final, la hubiera dejado de ver a los 10 minutos. En mi opinión (y no creo que la mía solamente) esta película es totalmente predecible de principio a fin, hasta el punto de lograr que sobrepase mi límite de desesperación, y por eso agradezco que no haya durado mas de hora y media.
--->>Spoiler alert!
Comenzando por la *#¿&% que se manda el hijo al abrirle la puerta al extraño. Digo yo, años pasando por lo mismo y no aprendió? En que demonios estaba pensando?. Luego, la hija, por que se escapa y merodea por la casa sabiendo que hay un extraño al que no conoce? por que la madre no la obliga a quedarse y le da sus buenos golpes para que reaccione? (golpes que tuvo que haber recibido el niño por hacer esa idiotez por el amor de!!). Siguiendo con el sistema de seguridad de la casa, pero que CHINGADOS era eso, el del auto no alcanzo a arrancar y la puerta ya estaba abajo!!! digo yo, no penso en un bunker (o como se escriba) subterraneo impenetrable o algo como eso. Bueno fuera de mis ideas locas, otra de las cosas con las que casi muero de risa fué el niño, con su linterna de un lado para el otro diciendo MIREN! AQUI ESTOY!!, y la ya tan obvia aparición repentina de alguien. Esa y tantas otras cosas hicieron que nunca mas espere una película con altas espectativas, asi no me pueden decepcionar como lo acaban de hacer. Fuera de todo esto, me acabo de crear la cuenta para descargar mis pensamientos y hacer de cuenta que nada paso, y que mañana veré tremendo film, como ¿siempre?
mary_anne
Ciertamente la película me decepciono muchísimo, un idea bastante original totalmente desperdiciada.