“Humor” y “Alemania” son dos palabras que rara vez suelen ir de la mano. El autor de cómics Ralf König es uno de los pocos que ha logrado unir los dos conceptos. Su obra, de temática homosexual, ha cosechado un importante éxito internacional, dentro del que se incluyen adaptaciones al cine. ‘Ralf König: rey de los cómics’ ( ‘König des Comics’, 2012) es un documental sobre este inusual fenómeno.
En España, dicho fenómeno comenzó hace más de veinte años con la aparición de la novela gráfica ‘El condón asesino’. Para gran parte del público underground lector del tipo de cómics que publicaba Ediciones la Cúpula la temática homosexual era totalmente novedosa y chocante. Pero, frente a las reticencias, se impuso una realidad incuestionable: Ralf König era realmente divertido.
El talento del alemán se fue afirmando en obras posteriores, especialmente en ‘El hombre deseado’. En aquel álbum apostó por tener un protagonista heterosexual que se introducía en los ambientes, para él desconocidos, al igual que para muchos lectores. Y fue una apuesta de éxito, como demostró la posterior adaptación homónima al cine protagonizada por Til Schweiger (‘Der bewegte Mann’, Sönke Wortmann, 1994).
Muchos años y álbumes después, llega a nuestras pantallas un documental sobre la figura de este autor único dirigido por el veterano Rosa Von Praunheim. Y vale la pena verlo. Tiene interés tanto para los que hemos seguido a König durante estas dos últimas décadas como para los que quieran descubrir y adentrarse en la obra de un autor sobrado de talento.
Prácticamente desconocido en España, Von Praunheim es un autor de culto en Alemania: formado en el cine experimental, su documental ‘No es perverso ser homosexual: lo perverso es el contexto’ , se considera el inicio del movimiento de liberación gay en Alemania.
Este bagaje experimental de Von Praunheim es lo que hace que ‘Ralf König: rey de los comics’ no sea un anodino documental expositivo al uso. Hay momentos muy afortunados como, por ejemplo, el del médico suizo que viaja a Colonia para conocer a Ralf y agradecerle que, gracias a sus cómics, logró aceptar su sexualidad y tener una vida mejor. El encuentro se va narrando con los preparativos (“no me puedo creer que mañana vaya a conocerle”) y, cuando llega el momento de verse las caras, Rosa Von Praunheim entiende, como todos, que hay cierta falsedad a la hora de captar la “verdad documental” del momento cuando hay tantas cámaras alrededor. ¿La solución? Dejar montado el momento en el que Ralf intenta saludar con naturalidad para, al segundo, romper a reír diciendo “¡No puedo hacer esto!”. Acto seguido, se repite la toma.
Otros detalles destacables serían ver el reencuentro de Ralf con una amiga que fue su primera novia. Tiene fuerza emotiva verles rememorar su historia, o cómo cuentan el momento en el que el autor, llorando, le confesó que le gustaban los hombres. Para cerrar el bloque, los dos escenifican una foto de juventud en la que están a punto de darse un beso. El director sostiene ese plano en toda su artificial duración hasta el “¡Corten!” en el que cada uno vuelve a su posición.
Son, como he dicho, detalles que no distraen del aspecto fundamentalmente informativo del documental. Quienes conozcan la obra de König – incluso un álbum “de entrevistas” como ‘Con la mano izquierda’ – descubrirán muchas facetas biográficas detrás de sus álbumes favoritos (por ejemplo, la tormentosa relación de dos años con un brasileño que le inspiró su particular relectura de Shakespeare en ‘Yago’). Quienes descubran a Ralf con este documental, por su parte, tendrán una buena visión de conjunto de su obra y de los temas en ella tratados: la ironía, el costumbrismo, la crítica a la religión… y, por supuesto mucho humor.
El tráiler del documental (bastante malo, por cierto) no oculta que estamos ante una obra modesta. El vídeo en hd tiene un aspecto bastante casero y, en ocasiones, evoca un espíritu televisivo. Sin embargo, creo que es de aplaudir la iniciativa de estrenar esta obra en los cines. El verla en la gran pantalla hermana a ‘Ralf König: el rey de los cómics’ con el hecho de comprar un nuevo álbum del gran autor alemán. El recogimiento de la sala produce una mayor inmersión en momentos como el de la elaboración de la mejor obra de König: ‘Superparadise’. En ese cómic, lo que empieza como un divertidísimo desparrame en Mikonos, de pronto, se tuerce cuando aparece una sencilla y terrorífica palabra: “Positivo”. El documental nos muestra la historia real tras esa agridulce obra.
Otros momentos también están pidiendo la gran pantalla, como las intervenciones de König en el carnaval de Colonia. Y, sobre todo, las dotes de Ralf para el playback: su cumpleaños, en el que canta el ‘Aleluya’ disfrazado de la Virgen María es uno de esos momentos que, como dicen los ingleses, “vale el precio de la entrada”.
Sea como fuere, con su modestia y bajo presupuesto, es toda una suerte el poder disfrutar en la sala de cine de este documental. Para quienes compramos y disfrutamos todos su cómics, éste es otro más. Y de los buenos. Para quienes no se hayan acercado nunca a su obra, me extrañaría que, una vez visto ‘Ralf König, rey de los cómics’ (título español que pierde el juego de palabras original, pues könig significa rey en alemán), no se lancen a comprar títulos como ‘Lisístrata’ o ‘El hombre deseado’. Se repite, una vez más, la frase que casi todos hemos dicho “Qué suerte. Vas a disfrutar de esto por primera vez”.
Estreno en España: 31 de octubre.
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