“Pues aquí estoy, anónimo. Con chicos que a nadie importan un carajo. Vienen de ninguna parte, muchos de ellos. Ciudades pequeñas de las que nunca has oído hablar. Pulaski, Tennessee; Brandon, Mississippi; Pork Van, Utah; Wampum, Pennsylvania. Dos años en el instituto, como mucho. Con suerte, a la vuelta les espera algún trabajo en fábricas, pero la mayoría de ellos no tienen nada. Son los pobres, los marginados, sin embargo luchan por nuestra sociedad y nuestra libertad. Extraño, ¿no es cierto? Son chusma, y lo saben. Tal vez por eso se llaman a sí mismos ‘Grunts’, porque pueden soportarlo todo. Son los mejores que he visto, abuela. Son el corazón y el alma de América.”
- Chris Taylor (Charlie Sheen)
Durante los primeros años en los que Stone intentó levantar este proyecto, la Guerra del Vietnam todavía coleaba (recordemos que duró nada menos que 19 años y 180 días…de 1955 a 1975). Por otro lado, Stone no detentaba el suficiente poder en la industria para hacer realidad una película que el sentía como muy suya, pues había regresado de aquella contienda en 1968, horrorizado y fascinado al mismo tiempo, por la sangre y el fuego, pero también por el color y la luz de uno de los países más bucólicos y agrestes del sureste de Asia. Stone susbsistía en aquel tiempo como guionista asalariado (y no muy bien pagado), y como director debutante. Para acabar de complicar su ansiado proyecto, en los años setenta se filmaron dos películas que, para crítica y público, habían dejado el listón demasiado alto: ‘El cazador’ (‘The Deer Hunter’, Michael Cimino, 1977) y ‘Apocalypse Now’ (id, Francis Ford Coppola, 1979). Es mérito de Stone haber reunido el coraje suficiente como para hacer esta película, después de esperar muchos años y gracias a muchos sacrificios.
Es, además, ‘Platoon’ (id, 1986), una película vigorosa y notable, que aunque posiblemente esté por debajo de las dos mencionadas en belleza y vuelo estético (sobre todo de la segunda, a la que tanto debe), confirmó un gran talento en eclosión. Un talento que tardó algunos años en ganarse la confianza de inversores y estudios, pero que cuando la ganó no defraudó, demostrando que la estupenda película que fue ‘Salvador’ (id, 1984) no había sido un espejismo en su rigor narrativo y en su valentía temática, pues Stone era un cineasta de raza, con muchas cosas que contar, que posteriormente ha desarrollado una carrera desigual pero apasionante, cuyos fallos o lagunas están ampliamente compensados por sus contundentes aciertos, y cuyo extremo coraje valdría para directores de menor talento que el suyo. Sin duda, pocas veces ha hecho películas tan redondas como ‘Platoon’, y en los últimos años su cine ha sufrido un terrible adocenamiento. Pero puede regresar de nuevo el creador de imágenes tan potentes como las del muchacho, casi un chaval, que abandona sus estudios para servir a su patria en un país muy lejano, y que encontrará una realidad que, desde luego, esperaba muy diferente.
Con ‘Platoon’ sucede lo que con muchas buenas películas: en los minutos iniciales ya sabes que vas a ver algo que merece la pena, o por lo menos que el director sabe lo que hace. Seguimos a un novato con buenas intenciones, por nombre Chris Taylor, interpretado con gran solvencia por el ínclito Charlie Sheen (a la sazón, hijo de Martin Sheen, que protagonizara ‘Apocalypse Now’...), el cual va a ser el narrador involuntario del relato. Recién llegado, bajando por la rampa del avión que le trae a ese país remoto, lo primero que se encuentra es una ristra de cadáveres de compatriotas suyos. Enseguida, comienza su voz en off. Una voz en off que, en cierta forma, recuerda también a la película de Coppola, pero que establece un tono, moral y narrativo, muy diferente, pues mientras en aquella seguíamos los pensamientos cada vez más angustiosos, del ya de por sí atormentado protagonista, para dibujarnos una pesadilla casi abstracta, en esta oímos las palabras que Chris le escribe a su abuela (la figura paterna, o la ausencia de ella, es tema crucial en la película), con un tono entre ingenuo y alucinado, para plantearnos una aventura muy física y el viaje desde la inocencia hacia la madurez, imprescindible para sobrevivir en un mundo despiadado en el que el hombre mata al hombre sin saber siquiera para qué.

Entre la luz y la oscuridad
Sirviéndose de la excelente fotografía de Robert Richardson (en un generoso aspect ratio de 1.85:1, filmando en salvajes localizaciones de Filipinas), Stone pronto nos hace empatizar con el pardillo Taylor, cuyos primeros días en el pelotón le harán descubrir la dureza de la guerra, la humedad de Vietnam, el racismo y el clasismo entre hombres blancos y negros, la presencia de oficiales capacitados y de otros incompetentes. Con gran habilidad, sencillez y convicción, Stone se dedica a narrar lo que él vivió: la vida en un pelotón. El barro, las caminatas, los mosquitos, los tacos, el machismo, la amargura, la soledad…pero también la fraternidad, la valentía, la dignidad. Ciertamente, la voz en off contiene pasajes muy bellos (uno de los cuales he reproducido arriba del todo) que dan cuenta del punto de vista de Taylor, convencido de que están haciendo una gran labor, y admirado de sus compañeros de penurias, por muy infantiles, arrogantes o violentos que se nos muestren. Y muy pronto llega la acción, muy bien filmada por Stone, ausentes aquí sus delirios videocliperos de posteriores idas de olla, con una planificación y montaje austeros, descarnados. Y tras estos primeros compases llega el verdadero tema de la película: la lucha entre el bien y el mal, la luz y la oscuridad, representada por esos dos preciosos personajes, el sargento Barnes y el sargento Elías, que metafóricamente lucharán por el alma de Chris.
Están interpretados magníficamente por Tom Berenger y Willem Dafoe. El primero encarna a Barnes, un cínico y violentísimo sargento, que ha perdido la perspectiva y quizá hasta la cabeza, y que no tiene reparos en torturar y matar a campesinos para llevar a cabo su misión. El segundo encarna a Elías, un suboficial también desencantado de la guerra que, sin embargo, conserva los suficientes escrúpulos y que será una buena influencia para Chris. Ambos padres “adoptivos” son completamente opuestos, pero Stone no se priva de darle una oportunidad incluso a Barnes, a quien Chris admira en cierta forma, y que en verdad es un soldado y un guerrero formidable. Algunos vieron en esta historia una parábola de la pérdida de inocencia de América, y puede que no estuvieran desencaminados. Combate tras combate, masacre tras masacre, Chris irá cambiando, aceptando que no es más que otra pieza en el engranaje de la máquina de hacer picadillo llamada capitalismo, luchando por redimirse y salvar un alma agonizante. Las pocas jornadas en las que transcurre esta película son la rápida iniciación a un mundo cruel de un chaval que aún creía en los héroes.
Oliver Stone filma de manera admirable y ejemplar todas las secuencias de acción, llegando al paroxismo absoluto en la larga y cruenta batalla final, que es algo así como el fin del mundo. No es de extrañar su Oscar al mejor sonido (como sus otros tres, a película, director y montaje), pues secuencias como esa han ayudado mucho a desarrollar una técnica que a finales del siglo XX y principios del XXI ha alcanzado cotas de perfección casi absoluta. Para ir concluyendo, decir que en su reparto brillan, aunque sea de manera esporádica, futuras estrellas del mainstream norteamericano, como Johnny Depp o Forest Whitaker, así como otros actores importantes y solventes, como Keith David (gran e infravalorado actor negro, sobre el que hemos hablado en el especial de John Carpenter), Kevin Dillon, John C. McGinley, y otros, en un reparto muy bien cohesionado y dirigido, que da la total sensación de constituir un verdadero pelotón, y es que no hay nada mejor que escribir y filmar de lo que se conoce.
Conclusión e imagen favorita
Una película bélica prácticamente redonda, de obligado visionado para todos los amantes del género. Mi imagen predilecta es la de los vietcong surgiendo, casi, de la jungla, a la manera en que los nativos surgían de la tierra en la sublime ‘Centauros del desierto’ (‘The Searchers’, John Ford, 1956), como si realmente pertenecieran o fueran parte de esa tierra, y el soldado norteamericano invasor fuera incapaz, como de hecho fue, de vencerle. Hay más imágenes muy poderosas en esta película, de uno de los directores más complejos y polémicos de la actualidad.

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manolo
¿19 años la Guerra de Vietnam? se te ha ido la olla. Si cuentas el conflicto de Indochina con Francia (y EEUU en un papel secundario), cuenta del 45 al 54, si cuentas la intervención americana (que es el tema de la película), cuenta del 64 al 75. Si sumas esos dos periodos (que no son la misma guerra) sí te salen 18 años, pero entre 55 al 64 no hay estado de guerra entre EEUU y Vietnam.
marat
Peliculón,del vietnam quiza sea de las que más me atrae. Desde entonces le tengo cariño a William Dafoe y un pelín de resentimiento a Berenguer.XD
A mi me gusta más que "Apocalipsis Now",me dejó mejor sabor de boca. Las comidas de olla que tiene Martin Sheen en la barcaza llegan a cansarme.Es cuestión de gustos.
Un saludo
mr.nada
Es icónico los brazos al cielo y el cuerpo ensangrentado de ELIAS al morir con el ejército vietnamita de fondo. Si hicieran una encuesta sobre las mejores y más impactantes escenas de guerra de todos los tiempos creo que por lo menos queda entre las primeras 5. Y sobre Stone, pues cabe decir que le ha bajado a la palanca de velocidades, en principio metió toda la carne al asador, pero después fue reclinandosé en un sofá.
mclane10
Hoy que la han pasado por la tele me la he vuelto a ver y me gusta tanto como el primer día. La mejor interpretación de Charlie Sheen hasta el momento y excepcionales Dafoe y Tom Berenger.
Pd: No me acordaba que salía Kevin Dillon, el gran " Drama" de esa pasada de serie que es Entourage
luissss
Partamos de la base de que el cine de Oliver Stone no me entusiasma demasiado, así que esta película no iba a ser menos. No es un mal film, ni mucho menos, pero tampoco la gran película bélica que me habían vendido. La vi hace un año y no me acuerdo de casi nada, así que imaginad lo que me impactó. Recuerdo unas buenas interpretaciones de Defoe (como siempre vamos) y Berenguer, además de la banda sonora, poco más. De Stone mi favorita y puede que la única que me entusiasma es 'Wall Street', del resto de films que he visto de este director no puede decir demasiadas cosas buenas, sobretodo de 'Nacido el 4 de Julio'.
Voy a intentar explicar con datos porqué la figura de Stone me parece algo sobredimensionada. A principios de 1990 Stone contaba con dos oscar a mejor director y directores como Scorsese o Spielberg tenían cero. Poco más que añadir. Saludos.
Pippen
Entretenida película de Stone,un director que para mi gusto siempre propone mas de lo que al final da.Lo mejor? el duelo entre los sargentos y la banda sonora. Stone las tiene mejores.
Darius Palas
Como mejor viene resumido en la frase de la película "The first casualties of the war is the innoncence"
drvenkman
Oliver Stone no es santo de mi devoción,pero Platoon es una de las mejores películas sobre la guerra de Vietnam rodadas hasta la fecha,la muerte de Elías es sencillamente brutal.En esta película los actores parecen soldados de verdad,la guerra parece una guerra de verdad.
Además si a todo esto le añadimos las interpretaciones de Dafoe y de un Berenguer que está espectacular que nos sale?,pues seguramente una de entre las tres mejores películas de Vietnam que se hayan hecho(y he visto unas pocas).
Harry Powell
La imagen de la muerte del Sargento Elias siempre estará en mi mente, es estremecedora.
Yo no soy muy de Oliver Stone pero "Platoon" es un películón, de eso no tengo ninguna duda. Y si hay algo no se puede negar del cine de Stone es que nunca te deja indiferente (antes más que ahora), te puede gustar o repelerte pero dejarte indiferente, éso nunca. A mí este film me encantó porque me dejo hecho polvo.
Saludos.
nick_nolte
Charlie Sheen protagonizó esta película porque su padre, Martin, íntimo amigo de Stone, se lo pidió.
Lo mismo haría unos años después con Eastwood en El principiante, ya que intuía que la carrera de su hijo se estaba despeñando. Me cae muy bien Martin Sheen, pero le habría hecho un favor al cine si le hubiera dado un pico y una pala al bandarra de su hijo.
La única vez que pensé que el tipo éste valía para algo es en su corto papel de macarra en esa maravilla que es Todo en un dia.
ÁlexDarko
Mi favorita de Stone junto a 'JFK', aunque a ésta le tengo más cariño, cosas de la adolescencia. Un pequeño canto a la vida además de una denuncia a la guerra y sus horrores. Una pena que Charlie Sheen sea bastante limitado, aunque esa cara de no-sé-dónde-estoy-ni-por-qué que tiene siempre le viene que ni pintada en la película mientras se va adentrando en la jungla. Aquí lo verdaderamente grande son los secundarios, Berenger y Dafoe, estupendamente caracterizados como la antítesis que son, que por cierto, estuvieron nominados al mismo Oscar, pero finalmente se lo llevó Michael Caine por la maravillosa 'Hannah y sus hermanas'.
Ah sí, se me olvidaba -gracias Harry Powell-, mi escena favorita es, como no, la muerte de Elías mientras suena "Adagio for Strings" de Samuel Barber. Dolorosa e impecable escena.
arcalimo
Pues a mi, en general, si que me gusta, y mucho, el cine de Oliver Stone, aceptando que es bastante irregular y que ya hace unos cuantos años que no acierta otra vez a dar con la tecla buena. Y esta claro que de todas sus películas, si no la mejor, de las mejores es Platoon, que debería estar, sin duda, en un hipotético podio de películas sobre la guerra de Vietnam junto con Apocalipse Now, tengo dudas sobre cual podría ser la tercera. Coincido con Harry Powell, la muerte del Sargento Elias es para mi la mejor escena de la película y así lo dije en la reciente encuesta que sobre este tema se hizo hace poco en el blog. En cuanto a Charlie Sheen es una pena, pero parece que cuando acabó ese rodaje se fue de fiesta y aun no ha vuelto.
nacho_lebowski
En mi opinión, la mejor película de Stone. SPOILER La muerte de Dafoe es un momento icónico del cine, al igual que su banda sonora.
El Fabuloso Dr. Manga
Pues de la trilogía del Vietnam de Stone me quedo con "El cielo y la tierra".
Platoon la vi en el año 2002 y no sentí ese impacto que tuvo en su día.
Semi off-topic: genial el Sketch de Hot Shot 2 en el que se cruzan la embarcación de Martin Sheen de "Apocalypse Now" y la de Charlie Sheen (haciendo de émulo de sí mismo en "Platoon") y soltar los dos al unísono: "Me gustaste en Wall Street"
ALBERTO
Creo que junto a otra película de Oliver Stone, la de "Nacido el 4 de Julio", es la mejor producción bélica de los ochenta, muy por encima de la saga de Rambo con Sylvester Stallone. Y, por supuesto, la imagen de Elias levantando los brazos al cielo es inolvidable.
187947
Massanet, con el debido respeto, aburres a las piedras.
Muy grande esta película, pero decir esto es ir a lo fácil, como con JFK que es otra maravilla. La obra maestra de Stone es Wall Street, la verdadera película de guerra que siempre quiso rodar tras trabajar de broker allí.
No entiendo cómo la preferida de Stone es Alejandro Magno, ni lo entenderé por mucho que la vea.
Moutache
Un apunte, ni de coña la guerra de vietnam duró 20 años, no nos flipemos. Duró 10 años, del 65 al 75, o 64, ya no recuerdo pero joder... en los 50 no hubo conflictos de ningún tipo.
En cuanto a la película, me parece una buena película pero para nada redonda ni mucho menos, de hecho a menudo creo que se la ha encumbrado demasiado y eso que soy un amante desquiciado del cine bélico.