El filme francés Mustang, ópera prima de la realizadora turca Deniz Gamze Ergüven, ha sido una de las propuestas más sorprendentes, bonitas e inesperadas de 2015. No es raro que haya recibido múltiples reconocimientos y nominaciones como por ejemplo la nominación al Goya por Mejor Película Europea o la de los Globos de Oro y la de los Oscar como Mejor Película Extranjera, entre otras. Estamos ni más ni menos que ante todo un canto a la libertad de las mujeres.
Esta cinta es una brillante historia protagonizada por cinco chicas cuyo comportamiento está en sintonía con el dinamismo de la adolescencia. Sus edades, comprendidas entre los 12 y los 16 años, parecen el momento adecuado para que su sexualidad comience a aflorar y sus deseos inocentes de experimentar y disfrutar crezcan cada día. Sin embargo, la juventud, la curiosidad y, en definitiva, la libertad de estas chicas se verá arrebatada de golpe por su abuela y, sobre todo, por su tío.
La inocente mirada de una niña
Conocemos la historia a través de la mirada cándida e inofensiva de la hermana menor, Lale, (interpretada por Güneş Nezihe Şensoy) que a sus doce años tendrá que ver cómo cada una de sus hermanas va desapareciendo de su vida al tener que aceptar los ridículos matrimonios impuestos por las familias.
Lale aún es muy joven para entender por qué no pueden ser ellas mismas quienes decidan cuando y con quién casarse. La búsqueda de respuestas despertará en ella un auténtico espíritu de lucha y las ganas de rebelarse contra ese sistema opresor que está alejando de ella a sus seres más queridos.
Para conseguirlo, convencerá a sus hermanas y se escapará con dos de ellas a ver un partido de fútbol, sabiendo que su tío no se lo permitiría nunca porque según él, es un deporte demasiado violento para una mujer. Se evoca aquí algo parecido a lo que ya proponía el argumento de Offside (2005) en el que el director iraní Jafar Panahi tomaba como pretexto la pasión femenina por el fútbol para reivindicar los derechos de las mujeres iraníes, a las que el Gobierno prohíbe ir a ver el fútbol a los estadios.
Reminiscencias de 'Offside' y 'Las vírgenes suicidas'
De esta escapada se dará cuenta su abuela, que aunque no dirá nada a su tío por temor de lo que pueda pasarle a las chicas, se pondrá manos a la obra para reforzar la seguridad de la casa y para mantener semi encarceladas a sus nietas mientras les enseña a vestirse y cocinar como mandan los cánones sociales.
Este hecho a su vez hará que las chicas comiencen a desmotivarse y sientan más ganas por escaparse, especialmente la hermana mayor, que tendrá que seguir viendo a su novio a escondidas para mantener con él relaciones sexuales ‘por detrás’: es triste pero es lo que hay si quieren cumplir la ley de castidad que les obligar a mantenerse vírgenes hasta el casamiento.
La película también posee un cierto paralelismo con Las vírgenes suicidas (1999) de la realizadora estadounidense Sofía Coppola. No solo porque el personaje de la hermana mayor Ece (interpretado por Elit İşcan) recuerde de forma descarada al que interpretó Kirsten Dunst en la película de Coppola, sino porque en el filme de Deniz Gamze Ergüven también se recrea el encierro de un grupo de chicas en el domicilio, con la mejor de las intenciones por parte de la familia, que quieren que sus niñas cumplan lo que la sociedad espera de ellas.
Sin embargo nadie parece tener en cuenta qué es lo que estas chicas quieren y esto va a repercutir de diferentes maneras en cada una de las hermanas: si la primera tuvo la suerte de casarse con un hombre al que realmente quería, la segunda no será tan afortunada y pasará a convertirse en una especie de muñeca de trapo sin voz ni voto en ningún asunto, ni tan siquiera en el que respecta a su propia virginidad, pues a pesar de que ella asegurar ser virgen, todos se empeñan en decir que no.
Aunque, definitivamente, será peor la suerte que correrá la tercera de las hermanas. La última parte del filme dejará el humor y la calidez que le caracterizaba hasta el momento para convertirse en una especie de thriller lleno de tensión, en el que las dos más pequeñas harán lo imposible por escapar de sus destinos.
Mustang, algo más que denuncia social
En definitiva, Mustang es una cinta que muestra y critica profundamente la sociedad patriarcal turca moderna en la que las mujeres todavía tienen que luchar contra absurdas leyes para ser consideradas iguales a los hombres. Pero no es una denuncia cualquiera: es una denuncia hecha con honestidad, con inocencia y mucho coraje.
Su directora podría haber cometido el error de dramatizar demasiado, de caer en el llanto fácil o en el victimismo, pero para nada es así: su cinta constituye una mirada directa y desafiante, dispuesta a luchar lo que sea necesario para cambiar la la situación femenina en Turquía. Pero esta película es algo más que una denuncia, se trata de una reflexión sobre otros elementos más conciliadores como la amistad, el amor fraternal, la lucha por los sueños, la esperanza, el humor o el optimismo reivindicativo infinito.
Todos estos aspectos se contraponen a la miseria, la angustia, el miedo e incluso la muerte, que también tienen cabida en este filme. Con un elenco de actores no profesionales (que están de sobra a la altura) encabezado por una maravillosa Güneş Nezihe Şensoy, Mustang es una historia aparentemente simple pero que lleva un mensaje profundo y acuciante.
Su puesta en escena es sencilla pero muy eficaz, sobre todo a la hora de combinar: el talento de la directora no solo se hace patente a la hora de dirigir a los actores, sino también a la hora de crear con frescura escenas que combinan, por un lado, un momento muy dramático, seguido de otro cargado de humor e incluso ironía, todo ello en una misma secuencia.
En otra película, o con otro director, esto no habría tenido el mismo resultado y, en mi opinión, no es más que el resultado de la maestría que demuestra la cineasta, muy poco común para ser primeriza.
- Otra crítica en Blogdecine | Mustang y las niñas valientes
—¡Buenas lector@s! Me llamo Chus y este es mi primer artículo en BlogdeCine. Estoy encantada de poder formar parte del equipo y espero que sea el comienzo de una bonita amistad, con ellos y con vosotros.—
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