Los amores de verano tienen algo tremendamente especial que nos tiran hacia ellos aunque sabemos que tengan fecha de caducidad. Esa frescura cálida, propia de una canción pop, de las burbujas que salen al abrir un refresco, de las ganas de estar pegado y bailar aunque no te despegues el sofoco del calor. En la edad adecuada, te marcan de por vida.
Es algo a lo que aspira capturar (y consigue a lo grande) Luca Guadagnino en la película que llegó en el momento perfecto en todo. En sacar definitivamente el talento de Timothée Chalamet a relucir, en aprovechar al máximo a Armie Hammer antes de devorarse a sí mismo, en culminar sus bucólicas miradas a las soleadas villas italianas. 'Call Me By Your Name' fue todo un triunfo.
Love my way
Ya disponible en streaming en Amazon Prime Video además de en HBO Max, la película italiana nos muestra a un joven de 17 años disfrutando del verano ochentero en el norte de Italia. Un día llega a la zona un apuesto hombre americano que acude a asistir a su padre arqueólogo mientras desarrolla su tesis. Su arrogancia estadounidense provoca cierto rechazo por parte del joven, pero poco a poco van desarrollando una emoción mutua que no podrán contener.
El cine de Guadagnino es bastante sensorial, acentuando emociones desde las imágenes y los sonidos de una manera especial. Por eso sus amagos hacia el terror se experimentan de manera muy visceral, a pesar de la apariencia fría y gris que se percibe al principio. Es también un cine embaucado por la belleza, en ocasiones inaccesible por su cualidad pero también por su tendencia a explorar personajes desprovistos de contextos sociales y bañados en bonanza económica.
No obstante, 'Call Me By Your Name' no se siente distante e inaccesible, todo lo contrario. Los personajes están contados magníficamente, al igual que la evolución de su relación, rodándolos con cercanía, dejándonos escuchar lo que subyace entre silencios. Las interacciones son especiales y cautivadoras, con dos actores espléndidamente dirigidos para que nunca se pierda un momento lleno de vida e interés.
'Call Me By Your Name': amor a través de todos los sentidos
Una película tan capaz de generar momentos como de encontrárselos. Esos cruces de miradas, esos roces en la fiesta del pueblo mientras suenan los sintetizadores ochenteros. Y también momentos como un crucial monólogo de Michael Stuhlbarg que sobrecoge al corazón por la honestidad que reluce y no se siente manipulador en el peor sentido.
Es, ciertamente, una película irrepetible por muchos motivos, incluyendo el transcurso que han tenido las carreras de los principales atractivos (los actores principales y el director). Por eso es una gran película que recuperar y saborear mientras se encuentra en streaming. La efervescencia veraniega que transmite funciona incluso en un momento de ola de frío.
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