Viernes, casi cuatro de la tarde. Como buena aficionada al fútbol, tengo ganas de que comience el Mundial y, por tanto, sería capaz de ver hasta un Sudáfrica – México. No tengo ninguna tele a mano, así que, tras recordar que Telecinco va a ofrecer el partido por streaming, decido entrar a la web de la cadena para seguirlo. Al fin y al cabo he seguido los amistosos vía streaming en TVE y lo mismo con la Fórmula 1 de La Sexta. No tendría nada de qué preocuparme, ¿verdad?
Error. Cuál fue mi sorpresa al ver que no podría estar más equivocada. Nada más cargar el streaming pronto vi que algo no iba bien. Los jugadores parecían pixeles con patas y localizar el balón era toda una odisea. En los planos de cerca aún se distinguía algo, pero en los planos generales desde el medio del campo ya costaba distinguir hasta al árbitro. Mucha posibilidad “social” de comentar con el resto de usuarios, muchos comentarios minuto a minuto del partido a un lado de la pantalla (lo cual es una buena idea, la verdad), pero a la hora de la verdad era imposible seguir el partido.
Podría pensarse que, con la afluencia de visitantes, balancearían la carga de alguna manera y ajustarían la calidad, pero nada más lejos de la realidad. Pronto llegó a ir incluso peor, provocando que la zona en teoría para comentar el partido de la parte derecha de la pantalla se utilizara por los usuarios para quejarse sobre la calidad del streaming, en lugar de comentar el propio partido. ¿Exageraciones? Juzgad vosotros mismos en esta captura a tamaño real de su reproductor:
Podría ser un partido del Mundial, o perfectamente un equipo de blanco jugando contra otro de negro en el estado de mi barrio. Y digo yo, si tan mal se ve para un partido entre Sudáfrica y México, ¿qué va a pasar el miércoles que viene cuando juegue España con la cantidad de posibles espectadores vía web? ¿Cargará siquiera la página? Por no hablar del retraso de la emisión vía web. Es comprensible que el streaming vaya unos segundos más atrasado que la emisión normal, pero, ¿casi medio minuto? Eso ya me parece demasiado.
La verdad es que en Telecinco deberían haber aprendido de TVE, que lleva ya tiempo emitiendo partidos, el Tour y otros acontecimientos importantes, o incluso LaSexta con la Fórmula1. La calidad de imagen que Telecinco ha ofrecido hoy en su emisión a través de internet es, simplemente, inaceptable para una cadena que precisamente nos anunciaba la retransmisión interactiva como una de sus principales apuestas y novedades. Mucho tienen que trabajar de cara al próximo miércoles, cuando se estrene España en la competición, si no quieren decepcionar a un montón de usuarios.
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