Contar un cuento se puede hacer de mil y una maneras, todo depende de la persona y el momento de contarlo. Y hacerlo una semana tarde puede ser también un bueno momento, una tardanza por la que tenemos que pediros disculpas y prometeros que no va a ocurrir en lo que dura la primera temporada de 'Cuéntame un cuento'.
En esta última entrega de la serie de Atresmedia pudimos disfrutar de la reinterpretación de Caperucita Roja, un clásico de germanofrancés que ha llegado hasta nuestros días mediante la tradición oral. Pero mientras en el cuento tradicional, al menos la versión que ha llegado a nuestros días, tenemos a una niña que va por el bosque, los guionistas decidieron llevar el cuento a la adolescencia, un detalle importante que ha causado bastante impacto en el episodio.
La adaptación adolescente
¿Cómo adaptas un cuento de una niña a una serie que tiene que atraer a todos los públicos? Pues convirtiendo al personaje protagonista en adolescente. Aunque el rechazo a esta idea sea nuestro primer pensamiento, lo cierto es que es fue una decisión acertada ya que si pensamos en el argumento original, iba a ser complicado adaptar un argumento si la protagonista seguía siendo una niña que iba a llevar comida a casa de su abuela.
Dejando a un lado la adolescencia de la protagonista, el resto de las adaptaciones fueron también muy acertadas. Por un lado cambiar el bosque por un grafiti en un túnel oscuro es una pequeña genialidad y jugar con la dualidad de los culpables consigue ese gancho necesario para que el espectador se quede pendiente de lo que va a ocurrir hasta el final del episodio.
Un final que se veía venir
Aunque en general la adaptación del cuento de este tercer episodio ha sido más que correcta, el ser el tercer episodio de la saga y saber las estrategias de los guionistas con los personajes ambiguos y las líneas argumentales abstractas consiguieron que, al menos yo, sospechara hasta el final que lo que nos estaban contando no iba a ser el final real, sino que acabarían dando un giro argumental que nos dejara con la boca abierta.
Pese a este final previsible para el "ojo experto" esta nueva entrega de la serie ha tenido muchas cosas buenas. Desde la forma de enseñar los diálogos del móvil en pantalla al más puro estilo 'Sherlock' hasta la forma de hilar el argumento, el cual no tuvo demasiados altibajos manteniendo la atención del espectador en todo momento. Pese a esto, hay algo que me sigue chirriando en esta ficción y es la aparición constante de escenas violentas. Todos sabemos que el mundo es un lugar violento, pero no es siempre necesario enseñar peleas, pistolas o sangre por todos los lados para convertir una historia en actual.
Hoy tendremos una nueva entrega de 'Cuéntame un cuento' y yo no puedo estar más interesado. El experimento de Atresmedia está siendo todo un acierto con todas sus entregas semanales. Veremos si este episodio sigue la línea que se ha trazado hasta hora, ya que entonces se demostrará que desde Atresmedia se ha hecho lo correcto en apostar por una ficción original y diferente.
En ¡Vaya Tele! | 'Cuéntame un cuento' Blancanieves la amnesia y los ladrones
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