La competencia entre las cadenas nacionales se ha recrudecido en este nuevo curso, con guerras de contraprogramación entre las ficciones. Un nuevo capítulo de esta lucha por la audiencia se vive también, por supuesto, en el mundo reality, en el que los canales tratan de ofrecer los programas más entretenidos, una alternativa televisiva más divertida y relajada.
Y si en algo se concreta todo este asunto es en ofertar programas de telerrealidad en los que participen famosos. Los realities han evolucionado mucho y ya no es suficiente con ver a unas personas encerradas en una casa durante x días; en algún momento, un creativo descubrió que si esas personas tenían un plus, como, por ejemplo, ser populares por su profesión o parentela, el reality podía ganar en interés y, por tanto, en audiencia.

Pero, para que eso funcione, necesitamos que el famoso "dé juego", es decir, sea descacharrante, polémico, divertido, enamoradizo, talentoso o, mejor que mejor, todo a la vez. En los últimos días, estamos viviendo un batallón de informaciones referidas a quienes serán los próximos participantes de los programas que se estrenarán en breve. Los famosos están ahí, para que les amemos / odiemos, pero, para merecer nuestra atención, necesitan demostrar que saben "hacer cosas" y no todos son capaces de pasar el corte.
No basta con ser popular
Desde que comenzó, 'Tu cara me suena' se ha convertido en un buen escaparate para muchos rostros populares. Se trata de un programa blanco en el que los que imitan bien generan la máxima simpatía; y los que imitan mal, también. En un universo en el que todo parece estar guionizado y cronometrado, la naturalidad y la simpatía sin artificios es más importante que nunca. Ahora, Antena 3 se está esmerando en promocionar su nuevo programa '¡A bailar!', que seguirá en la estela bienintencionada de su talent musical y que nos traerá a parejas de cantantes, actores, toreros e incluso ex-futbolistas como danzarines amateurs, y que no lo va a tener fácil precisamente, pues batirse el cobre con una serie de moda como es 'El príncipe' parece pasarle factura aún antes de haber nacido.

La maestra de las maestras en este asunto sigue siendo, sin embargo, Mediaset, que consigue colocar a su plantel de famosos en las situaciones más variopintas (y no precisamente cómodas) sin que éstos tengan más remedio que pasar por el aro si quieren seguir en esa palestra. A falta de un 'Gran Hermano' que parece que vendrá en otoño, Telecinco nos pone los dientes largos a los amantes de los realities con los castings de 'Supervivientes' y la segunda edición de '¡Mira quien salta!' (que, por cierto, se va a grabar en la piscina del difunto programa de Antena 3 también sobre saltos del trampolín).
Y se está esmerando mucho en traernos lo mejor de la casa porque Telecinco ha sabido crearse una plantilla de personajes populares a los que reutilizar según sus intereses. No sólo es que convoque a antiguos participantes de sus realities de Cuatro y Telecinco (a los que incluso ya es capaz de exportar a TVE, como en el caso de Corina y '¡Mira quien baila!'), con lo que el público ya está familiarizado con esos personajes, sino que ha llegado a un punto en el los propios periodistas y colaboradores de sus programas son material muy deseable para participar en estos espacios, siendo juez y parte y retroalimentando ese universo en el que Telecinco es capaz de tener un programa con audiencia en el que, simplemente, hable de las cosas de Telecinco, lo cual, tiene un mérito increíble.
¿Qué otra conclusión podemos sacar de este fenómeno? Pues que la vida no es fácil y la de un famoso menos aún. Porque tú puedes ser un cantante o un actor con cierto tirón pero, si necesitas publicitarte alguien te dirá: ¿qué más sabes hacer? o, incluso, ¿qué estás dispuesto a hacer? Imitar, cantar, bailar, sobrevivir en una isla desierta, lanzarte desde un trampolín... y, desde luego, tener una personalidad atrayente. Mantenerse en la palestra no es sencillo.
En ¡Vaya Tele! | Antena 3, dispuesta 'A bailar' a partir del próximo martes
Ver 3 comentarios
3 comentarios
je.re.94064
Personalmente me molesta mucho el termino "juguete roto" porque pareciera que no saben donde se meten. ¿Cuantos Grandes Hermanos han salido diciendo que el concurso les arruinó la vida, que no encuentran trabajo? Pero esta visto que cuando pasas por un reallity ganas un buen montón de pasta. Lo pasa es que son todos unos inconscientes, porque igual que dicen eso, te sueltan que pensaban que les iba a durar para siempre.
A ver, ¿cuantas ediciones de reallities llevamos? ¿que clase de persona se cree que es un trabajo para siempre, una condicion sin fin? Si piensas eso es que eres estupido, con lo cual, no es el problema de la cadena ni del programa.
Cuanto entras en un reallitie firmas un contrato. Los contratos se acaban, y, repito, se gana un buen dinero facil. Tan simple como no derrocharlo e invertirlo bien, con cabeza.
Para ser famoso y mantenerte en la tele esta claro que vas a tener que pasar por muchas etapas. Me sorprende enormemente cuando los familiares o los propios concursantes dicen que "lo han pasado muy mal" (otra de sus frases hechas-comodin). Mal, ¿por qué? ¿por que te critican en las redes sociales? Pues ya sabes, apaga el movil y no entres en foros.
No creo que se pueda hablar en terminos de "usar a un famoso", es gente que, repito, gana mucho dinero, y cuyo mayor problema es que se rian de ellos. Tampoco digo que deben tener piel de elefante (como los que "trabajan" en salvame), me bastaria con que tuvieran un poco de cabeza y perspectiva: en unos cuantos años, nadie se acordará de ellos. Los reallities, la presencia televisiva es temporal, que procuren saber aprovecharla, y que no les echen las culpas a los demas.
unffaced
"Mantenerse en la palestra no es sencillo" cierto, pero lo que no m da pena son los famosos que en su dia tenian pasta gansa, la han malgastado y ahora van dando pena.
blacklynx
No me gusta la programación de T5, pero hay que reconocerle el mérito de haberse creado un mundo propio con el que retroalimentarse. Aun así, yo me quedo con el humor irónico de LaSexta.