A veces, las reacciones del público —ya no digamos de ese ente místico llamado "la crítica"— frente a un largometraje suponen un misterio aún mayor que el mismísimo sentido de la vida, y el último ejemplo de esto lo encontramos en la defenestrada 'Argylle'; la cinta con la que Matthew Vaughn volvió a convertirse en el rey del exceso en un cóctel cargado de acción y comedia tras su paso por la saga 'Kingsman'.
Una merecida segunda oportunidad
Desde que se estrenó la película he estado intentando comprender cómo este cóctel de espionaje y setpieces delirantes en clave meta ha tenido una recepción tan pobre como injusta. Y es que, a priori, lo tiene todo para cautivar: un reparto de lujo encabezado por Sam Rockwell, Bryce Dallas Howard y Bryan Cranston —entre otros—, un sentido del humor tan enorme como su autoconsciencia, un ritmo impoluto... ¡Hasta tiene un gatete adorable!
El único motivo que puedo encontrar para justificar el batacazo en cines de 'Argylle', que no ha logrado alcanzar la barrera de los 100 millones de dólares en la taquilla internacional, quedándose en los 95 —con un presupuesto estimado en 200— está en una inteligente campaña promocional que pretendió ocultar los grandes giros narrativos y los secretos de su historia para que el respetable llegase virgen a las muchas sorpresas que encierran sus más de dos horas de metraje.
Por desgracia, parece que vivimos en una época en la que buena parte del público no ve con buenos ojos que el metraje que se proyecta en su sala de cine de cabecera no se ciña estrictamente a lo que han mostrado unos tráilers cada vez más reveladores, y el caso que nos ocupa parece demostrarlo a la perfección.
De nada ha servido que Vaughn haya vuelto a demostrar su poderío a la hora de dar forma a las escenas de acción más pasadas de vueltas que podamos imaginar, envueltas por un halo de CGI kitsch que nos ha regalado momentazos que deberían haber tenido un mayor impacto en redes —la escena de las bombas de humo es fantástica—, ni el enorme mimo que se ha puesto en dar forma a la improbable protagonista de la historia. La idea preconcebida sobre lo que iba a ser 'Argylle' se terminó imponiendo a lo que acabó ofreciendo.
Afortunadamente, y tal y como ha ocurrido con otros títulos recientes como 'The Marvels', esta divertidísima locura puede experimentar una segunda vida, con suerte más exitosa, en el mercado doméstico, empezando este 19 de marzo de 2024; fecha en la que 'Argylle' pasa a estar disponible en vídeo on demand premium y venta electrónica antes de su estreno global en Apple TV+.
Eso sí, hay que avisar que quien siga esperando una suerte de buddy movie protagonizada por Henry Cavill y John Cena, quedará profundamente decepcionado. La verdad siempre por delante.
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