'Noches en vela' es una encantadora y divertida comedia romántica de Apple TV que falla en lo más importante

'Noches en vela' es una encantadora y divertida comedia romántica de Apple TV que falla en lo más importante

Una notable serie protagonizada por Antonia Thomas y Craig Roberts donde la química no acaba de funcionar

Sin comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
Still Up Photo 010102 Jpg Photo Modal Show Home Large

Aunque episodio a episodio va habiendo variantes, cada entrega de 'Noches en vela' (Still Up), la nueva comedia romántica de Apple TV+, se vertebra en torno a una conversación telefónica entre dos insomnes. Estos, Lisa (Antonia Thomas) y Danny (Craig Roberts), tienen cada uno su propia vida, sus propias neuras y sus propias aventuras nocturnas en lo que intentan que el sueño les llegue de una vez.

Es fácil que al entrar a ver la serie, cuyos tres primeros episodios están disponibles desde este viernes, uno piense en películas como 'Cuando Harry encontró a Sally' (que, de hecho, tiene sus momentos de conversaciones nocturnas tan triviales como vitales para ellos) o incluso  quizás más por el título original y por el hecho de que los protagonistas no están físicamente juntos, puede que también venga a la mente 'Algo para recordar' (Sleepless in Seattle).

Con sus diferencias evidentes, Steve Burge y Natalie Walter, los cocreadores de la serie, parecen recoger la tradición de Nora Ephron para cargarla del buen pulso cómico británico. El resultado es que nos encontramos con una serie tremendamente encantadora e incluso divertida. La lástima es que falle bastante en algo bastante importante: la química entre los protagonistas.

Sleepless in London

No me malinterpretéis, no es que las conversaciones entre Lisa y Danny no funcionen. Es muy ameno verles hablar ya sea en videollamada o simplemente sin vídeo y el ritmo de diálogo rápido mezclado con lo que sea que estén haciendo (el primer episodio ella está yendo a la farmacia mientras él intenta esquivar al vecino) es, bajo mi punto de vista, tan preciso como certero.

Puede ser que esta sea algo percibido por culpa de la premisa: la separación dificulta las cosas para que transpire la química. Sin embargo, el hecho de plasmar con cierta ambigüedad la naturaleza real de la relación entre los protagonistas lastra más la serie que la ayuda. Tan pronto juegan con lo "platónico" como con el colegueo y viceversa... con cierta sensación de mareo de la perdiz en un arco de evolución de una relación que, habitualmente, hemos visto cientos de veces

Esto hace que, a veces, resulte difícil comprar la inevitable relación que 'Noches en vela' nos quiere vender. No digo que necesite de un enfoque más, digamos, clásico, sino de momentos que convenzan de que Lisa y Danny están hechos el uno para el otro. Es casi la antítesis de otra comedia de la casa como es 'Platónico', que se empeñaba en mostrar por qué los personajes de Rose Byrne y Seth Rogen no eran parejas.

Pero por lo demás, todo lo que rodea a Lisa y Danny —sus personalidades, sus manías, sus problemas, sus conversaciones— es absolutamente encantador. Es muy fácil enamorarse de estos personajes y, si bien no compras del todo su relación, tampoco te importaría que acabasen juntos.

Y es que, desde luego que la falta de química no impide que podamos disfrutar simplemente de una comedia notable. Y 'Noches en vela' lo es, por supuesto. Es divertida, con algunos golpes inesperados (hay uno tan literal como cómico en el tercer episodio), agradecidamente episódica y ligera.

En Espinof | Las mejores comedias de 2023

Comentarios cerrados
Inicio