“Dios no escribe noveluchas de terror”
- John Trent
Con el fracaso (anunciado, lógico) de la muy floja, por decir algo suave, ‘Memorias de un hombre invisible’ (‘Memoirs of an Invisible Man’, 1992), que hasta la fecha es la última producción de un gran estudio, y con un gran presupuesto, que ha filmado este cinesta, Carpenter, en lugar de dejarse vencer por las circunstancias, se refugió en su trabajo, y llegó a filmar cinco trabajos en seis años. Ninguno de ellos un gran éxito, pero en todos ellos una gran dosis del más puro espíritu carpenteriano. El primero, ‘Bolsa de cadáveres’ (‘Body Bags’, 1993), fue un proyecto cuyo carácter marcadamente televisivo (pese a su interés indudable) nos obliga a centrarnos en el segundo, que significó el regreso a las esencias del Carpenter más gótico y tenebroso, después de aquella comedia grotesca que marcara el punto más bajo de su carrera, pese a estar precedida por su punto quizá más alto. Carpenter respondía a los imperativos del mercado y a su propia y problemática situación con sus inversores, haciendo lo que mejor sabe hacer: cine elaborado, libre e inteligente.
‘En la boca del miedo’ (‘In the Mouth of Madness’, 1994), cuya traducción literal sería ‘En la boca de la locura’ (mucho más cerca este título de la historia que nos cuenta Carpenter, y sobre todo del modo en que nos la cuenta), es una película que para algunos significa un esfuerzo menor dentro de la filmografía de Carpenter, pero que para otros, entre los que me encuentro, es una prueba más de su gran talento narrativo, de su estimulante sentido del humor y de su (muchas veces negadas, de manera incomprensible, para mí) gran inteligencia, astucia y sutilidad. Un cine más basado en el terror, que en el horror o en el susto fácil (es decir, en la atmósfera, en la trama y en los personajes), que nunca oculta su condición de cine de género, pero que le sirve como excusa a Carpenter para hablar de muchas de sus obsesiones e inquietudes, las mismas que ya llevaba cerca de veinte años deslizando furtivamente por debajo de las trepidantes o espeluznantes historias que nos contaba.
El guión de Michael De Luca, un hombre que como guionista no ha destacado especialmente, pero que se ha ganado un nombre como productor ejecutivo, contiene muchos elementos afines a Carpenter, y que amplían y enriquecen aquella irregular (aunque para nada desdeñable) propuesta de ‘El príncipe de las tinieblas’ (‘Prince of Darkness’, 1987), segunda de la autodenominada Trilogía del Apocalipsis de Carpenter, cuya primera parte fue la formidable ‘La cosa’ (‘The Thing’, 1982), y la tercera esta ‘En la boca del miedo’. Todas las endebleces de aquella segunda parte están aquí subsanadas, y la idea del Mal Absoluto buscando una entrada en este mundo está mucho más elaborada, gracias a una premisa en verdad muy ingeniosa, y que Carpenter sabe exprimir al máximo: un investigador que busca a un escritor de best-sellers (una mezcla entre Stephen King y H. P. Lovecraft) desaparecido sin dejar rastro junto con los últimos capítulos de su novela, y que se introducirá, sin saberlo, en el mundo ficticio creado por ese escritor.
El crescendo de una magnífica puesta en escena
En la secuencia de ‘En la boca del miedo’ late una indisimulada (pero no por ello menos sutil) crítica al cristianismo (que Carpenter llevará al paroxismo dentro de pocas películas…), una divertida reflexión acerca de lo que es real y lo que no (¿por qué va a ser menos cierto una creación literaria que este mundo, muchas veces ficticio y tramposo?), un estimulante debate sobre la primacía entre literatura (palabra) y cine (imágenes y sonido), y una aventura espeluznante en la que un hombre vulgar y pragmático tendrá que oponer su raciocinio al torrente de experiencias irracionales que van a acosarle aún después de concluida la película. Y, aún más al fondo, una película sobre el cine y sobre la creación artística, sobre la responsabilidad del arte en el devenir del hombre, y sobre la fe. Todo eso gracias a la energía de una puesta en escena muy precisa, sencilla pero tremendamente refinada, que se enfrenta con su espíritu artesanal y basado en sensaciones anímicas, al cine de género vistoso y epidérmico de los últimos años. Carpenter confiando más que nunca en la imaginación del espectador.
Nada sobra y nada falta, la cámara siempre está donde debe y el plano dura lo justo (refinamiento obtenido gracias a experiencias austeras e inolvidables como ‘Asalto en la comisaría del distrito 13’ (‘Assault on Precinct 13’, 1976) y ‘Están vivos’ (‘They Live’, 1988), un cine barato en presupuesto pero riquísimo en imaginación y fuerza de voluntad), los actores están dirigidos con mano férrea y Carpenter jamás pierde el control de la historia. Una historia que, en algunas ocasiones, roza el desequilibrio o el surrealismo puro. Es magnífica la destreza de Carpenter, ayudado en labores de dirección artística por Jeff Ginn y Peter Grundy, a la hora de crear un pueblo tan de Stephen King (todos los que hayan leído sus novelas saben bien de lo que hablo), y una atmósfera tan nítidamente lovecraftiana, en los que el detective Trent se internará sin posibilidad de regresar, cumpliendo los designios de un escritor/demiurgo que va escribiendo su destino y el del mundo entero.
El irlandés Sam Neill está soberbio como John Trent. Realmente soporta el peso dramático de la película como el que respira, y contribuye (gracias, también, a sus afilados diálogos) con un punto de ironía, hasta de socarronería, muy de agradecer, que aporta verosimilitud a un relato tan descabellado como este. Su personaje es uno más de los solitarios de Carpenter, individuos valientes pero incapaces de cambiar un mundo inhóspito, que saben algo que los demás desconocen y que poseen, quizá, un concepto demasiado elevado de sí mismos. Es decir, que son inconscientes de sus limitaciones pero que son valientes, y quizá por ello sufren más. Así le ocurría a George Nada, a Jack Burton, a R.J. MacReady, a Snake Plissken. Y desde luego a John Trent, quien, acompañado por Linda Styles (una sólida Julie Carmen), se adentrará en un mundo que, en principio, sólo debería existir sobre el papel, pero que se hará una realidad tangible a sus sentidos, hasta un clímax esperado pero no por ello menos desolador, al que hemos llegado gracias a un crescendo imparable.
Conclusiones e imagen favorita
Gran cine de género, que emplea elementos arquetípicos del cine de terror, pero con gran astucia e inteligencia, de modo que parecen nuevos y cumplen sobradamente su objetivo: angustiar al espectador. Fotografiada de manera impecable por Gary B. Kibbe (quien desde hacía algunos años había sustituido al gran Dean Cundey en labores de iluminación para Carpenter) en un esplendoroso scope, la película apenas cubrió gastos y pasó completamente desapercibida por medio mundo, lo cual me parece bastante injusto. Mi imagen favorita es la de Trent luchando por escapar del pueblo y descubriendo la terrorífica transformación de su acompañante. Carpenter en estado puro.
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rauwlyng
Al Cesar lo que es del Cesar, me ha encantado la critica, me han entrado ganas de volver a verla, hace años que la vi por ultima vez, has despertado el gusanillo lovecraftniano que tenia dormido en mi interior.
Harry Powell
Gran película, no es de mis favoritas de Carpenter pero sin duda alguna es una obra muy a tener en cuenta. Es directa y está narrada de una forma excelente,quizá su mayor virtud es que consigue mantenerte tenso en todo momento y con una sencillez fuera de lo común, algo al alcance de muy pocos directores.
Tienes momentos realmente magistrales y aterradores que juegan con los miedos más recurrentes del ser humano;la imagen nocturna de ese extraño hombre montado en bicicleta por la carretera es realmente perturvadora, y ya ves tú que puede tener de aterrador un tío feo en bicicleta, o la escena frente a la iglesia gótica que produce una extraña y aterradora sensación de falsa calma, realmente espeluznante.
Carpenter es todo un maestro de la narración pero además de éso en este film consigue que te sientas incomodo de principio a fin, algo muy meritorio si tenemos en cuenta que la historia no es nada del otro mundo.
En fin; peliculón de terror.
Pippen
A mi no me gusto nada,empieza bien hasta que Sam Neill llega al pueblo,hay todo me parece una sucesión de sustos previsibles y atropellados.Creo que se le fue de las manos.
nick_nolte
Mi favorita de Carpenter, por encima incluso de Snake y Asalto al distrito 13. Es la película, que yo haya visto, que mejor refleja el espíritu de Lovecraft, recomendadísima a los que les guste leerlo.
Sam Neill se sale. Es un actor que quizás se ha encasillado en papeles de tio serio con un interior inquietante, pero aquí lo borda y se suelta más la melena, sobre todo en la parte final.
P.D: Y cameo de Charlton Heston xD
prosyth
Esta peli me acuerdo como si fuera hoy, la vi en el cine, no había visto ningún trailer, no vi ni quien era el director. Mientras la veía pensaba dios esto es Lovecraft. Para mi es una película que tiene que estar en todas las videotecas. :)
pilar62
Gran película. Creo que se le descontrola un poco al final, pero sin duda es una película extraordinaria.
Aunque no es mi película favorita de Carpenter - quizás porque no me convence mucho el guión - si que creo que es una de las películas más atmosféricas del director. Normalmente se considera a Carpenter un excelente narrador. Pero creo que no se valora del todo la capacidad de Carpenter de construir atmósferas inquietantes. Quizás porque lo logra con muy pocos elementos, de manera casi minimalista, sin usar recursos demagógicos y haciendo fácil algo que es realmente complejo. Esta es, quizás, la más atmosférica de sus películas tras "La cosa", y una de las más terroríficas.
Esta vez he sido breve, :) XXDDD
Besos.
marat
Todavía no he visto esta.
Ayer vi "La niebla" y me gustó bastante. Esta es mejor/peor,con cual os quedariais?
Un saludo
igres86
Un film muy interesante. Tiene una gran ambientación y transmite terror o pánico en muchas de sus escenas. Me sorprendió gratamente más que nada porqué está muy defenestrada por la crítica en general y es difícil de conseguir esta obra. Sam Neill está en uno de sus mejores papeles. También me gusta un secundario de los 80-90's llamado Jurgen Prochnow (el que hace de escritor). Me ha gustado tu crítica. El final de este film cuanto menos inquietante a la par que te replantea todo el visionado. Se aceptan teorías explicativas del final?
P.D. Ya queda menos para la genial "Vampiros".
pablo.solar.r
Todavía la vi ayer. Y es mi quinta vez. A mis padres, sin embargo, no les gustó. Qué se le va a hacer... xD Peliculón
kabe
Tú lo has dicho: Angustiar al espectador. Esa sensación tuve yo y aún la recuerdo después de muchos años. Gran película.
japico
despues de ver esta pelicula me planteé si shutter king estaba inspirado en Stephen King o en Lovecraft, por que los libros descritos eran lo mas parecido a leer una novela de Lovecraft,pero el guiño del apellido hace referencia a Stephen king, que a su vez, es un gran seguidor de lovecraft, es como un circulo, igual que esta maravillosa pelicula
lo mejor de la pelicula, es que al visualizarla estas formando parte de la historia de la misma y a su vez te transmite un terror mas cercano
por cierto ¿ te he dicho que mi color favorito es el azul?
Moutache
Sam Neill debería haber trabajado más. Es un actor tan jodidamente desaprovechado, esta película da buena fe de ello. Una de mis tres favoritas de Carpenter.
barsut
esta peli es un classico.
solo carpenter te pone a la abuela de happy gilmore... y te cagas encima.
barsut
lovecraft es el cine, pero en tu cabeza
mann
Masterpiece. Me quedo con ese momento en el coche, mientras la mujer duerme, John Trent coge una bocina y la hace sonar en su cara xd
daffodil
Que peliculón, la mejor película de base lovecraftiana q he visto, Carpenter es un maestro y un cachondo
hector.cobachogarcia
El tiempo no pasa en balde por esta pelicula, pero la primera vez que la vi fue enfermo y con fiebre e hizo que la esperiencia fuese aterradora.
daniellopez7
Bodrio intragable a la primera vez de verla. Va a haber que darle otra oportunidad.
cco
una de las mejores películas de Carpenter, si no la mejor. Muy bien escogido el fotograma; el que mejor refleja el espíritu de la película
Ramón Morales
Una de mis favoritas de Carpenter,si no la mejor.Una ambientación sublime y una actuación de Sam Neill prodigiosa. Enhorabuena por el monográfico,hay que recuperar a directores como Carpenter que todavía recuerdan para qué se inventó el cine
mchartnigan
Es Shutter Kane no King.
patmos
Extraña pelicula. A veces parece un esfuerzo menor, y otras se asemeja al mejor Carpenter. Lo interesante es que juega a ser una pelicula de terror (seres mutantes horribles) y tambien le agrega un valor moral o filosofico al incorporar elementos que te permiten refelxionar sobre el valor del arte, la influencia de los discursos (ficcionales, politicos, el que sea) las realidades paralelas, etc.
Un amigo me dijo algo que siempre me resuena al recordar "In the mouth of madness": "John Carpenter hizo "Matrix" 5 años antes que "Matrix". No deja de tener cierta verdad.
pollusfritae
Acabo de leer la crítica después de dos años xDD; ciertamente es una gran película muy desconocida, pero muy recomendable dentro del género de terror. Por cierto, Jurgen Prochnow aparecía en otra película de terror muy desconocida también, llamada "The Keep" y dirigida por Michael Mann en 1983. Creo que iba de nazis y temas paranormales.
mike_moore
De las más flojas de Carpenter: haciendo un símil futbolístico, como marca el signo de los tiempos, la película tiene mucha atmósfera, mucho control del balón, pero muy poca pegada. Ni una sola escena para el recuerdo (si acaso, la del crío fantasmal en bicicleta). Guión flojo, flojísimo.