El festival TerrorMolins ha estrenado en España ‘Terrifier 2’ y todo lo que se dice de ella es cierto. Es una de las películas de terror más divertidas del año, un paseo por lo salvaje en el que ni el argumento ni el presupuesto tienen tanta importancia como la explosión de escenas gore, la forma en la que están ejecutadas y el crescendo de sangre y vísceras hasta el paroxismo de comedia splatstick.
Su personaje principal, Art the Clown, ha ido ganando notoriedad en redes con los años, desde su primera aparición en la película antológica ‘All Hallows Eve’ (2014) a la película de muy bajo presupuesto ‘Terrifier’ (2016), pero es con esta secuela tardía cuando ha alcanzado su máxima popularidad, que derrama más sangre que cualquier slasher estrenado en la gran pantalla en la memoria reciente. No se sabe bien la gran razón del éxito de boca a boca pero se achaca a la personalidad del payaso o sencillamente a un exceso de películas de terror solemnes.
El logro de alcanzar una recaudación de 10 millones de dólares es impresionante para una película con un presupuesto de solo 250.000. Hay una vuelta al espíritu Grindhouse que va más allá del uso de la violencia, y se añade el tono casi surrealista y la actuación maníaca de David Howard Thornton. Algo de eso había en la original, pero aquí el director Damien Leone ha tratado de cruzar otra línea roja con una secuela que expande el mundo del payaso duplicando su humor macabro para asimilarlo en un plantel en donde se podían ver nombres como Michael Myers, Jason Voorhees y Freddy Krueger.

La película tiene lugar un año después de la masacre original y seguimos a una familia formada por una mujer viuda, Bárbara (Sarah Voigt), su hija adolescente Sienna (Lauren LaVera) y el hijo de doce años Jonathan (Elliott Fullam). Mientras, Art tiene una nueva compañera inesperada, el espíritu de una niña asesinada. La forma en la que el payaso se cruza en sus vidas no es muy importante, pero es una excusa para plantear dos horas y media de carnicería en medio de una noche de todos los santos con la que ‘Halloween Ends’ no podría ni soñar.
¿Un revulsivo contra el terror de Sundance?
La primera diferencia con la entrega anterior es que, pese a tener un aspecto convenientemente roñoso y baratuelo, no hay un look digital tan evidente, y además de filtros y texturas de cine de explotación hay un buen uso del color y la fotografía llena de grano, que convierte el aspecto amateur en una especie de continuadora de piezas de culto de vídeo que siempre han tenido su hueco en las estanterías de los fans. Esto ya es algo que marca la diferencia con las elegantes y matizadas direcciones de películas de horror actuales cargadas de drama como ‘Relic’ o ‘Nanny’.
En ese contraste podemos buscar parte de las raíces del fenómeno a modo de cierta reacción de los aficionados que pueden agradecer ese mimo estético aumentado en las nuevas propuestas de género, pero que echan en falta alguna película menos asimilada a códigos reconocibles y formalismos destinados a diluir el poder subversivo que siempre ha tenido el cine de terror. Por tanto, a cambio de valores de producción limitados, ‘Terrifier 2’ ofrece ese pellizco de desvergüenza que da la libertad de no tener a ejecutivos de estudio pidiendo rebajar el tono.

Y es que aquí el gore es obviamente el protagonista. Leone asume su vocación de director de orquesta de efectos especiales ideando muertes retorcidas con diferentes formas de masacrar los cuerpos realmente enfermizas. Estamos ante lo que sucede cuando se tiene plena libertad para plantear body horror, crueldad y tortura. Los rostros y los cuerpos son acuchillados, mutilados, profanados de diversas formas y reducidos a pulpa sanguinolenta. Los personajes son asesinados a tiros y las partes del cuerpo son arrancadas o cortadas con diversas armas. Hay una secuencia de pesadilla ultra sangrienta y bastante inquietante, y mucho, mucho más.
El gore como lenguaje
Hay cierta herencia aquí de la etapa torture porn de los años 2000, pero se ha asimilado hacia algo más grumoso, con más en común con el cine hecho para vídeo de los 90 y títulos como ‘El vendedor de helados’ (1995) o las odiseas dentales de Brian Yuzna que con ‘Saw’. Hay un cierto elemento de arte Grand Guignol, de ver cómo hace el efecto y se traspasan barreras que hace la experiencia casi una performance inagotable con el espíritu naif de Herschell Gordon Lewis.
La película de Leone es, según la definió Mike Flanagan, un “megaslasher” de 140 minutos, que en su mayor mantienen un buen ritmo, que, aunque podrían haberse ajustado recortando unos 15-20, también hay algo de masoquismo consciente, de rito de paso al someterse a esa cascada de barbaridades durante más de dos horas, desde su primer asesinato a la inclasificable escena postcréditos. También ayuda a la experiencia que Lauren LaVera es una excelente final girl y la partitura de Paul Wiley aporta con sintetizadores al estilo de los 80.

‘Terrifier 2’ es un festival de látex y tripas que abraza la idea del gore como expresión, entretenimiento nocivo para la salud que convierte a Art the Clown en un nuevo héroe del terror underground, un juguete irreverente que tratar de romper con dinámicas éticas y estéticas mojigatas y estiradas impuestas por el concepto de cine de terror hecho exclusivamente para intelectuales, la gamberrada punk en forma de bomba fétida que nadie esperaba en un año en el que el cine de género ha dejado más huella en la taquilla que nunca.
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24 comentarios
oderus_urungus
Mi problema esencialemente, es que no asocio este tipo de cine al cine de terror. El cine gore no da miedo, da asco. Es como ver un concierto de Bad Bunny.
Lo mismo pasa con las de "terror elevadísimo" de A24. Tampoco son terror. Son dramones sobrenaturales que en muchos casos, se convierten en comedias involuntarias por las ansias de incordiar al espectador de sus directores. Mención especial a la del corderito (Lamb) y los machos (Men). Son un descojone.
Vista esta película, tampoco es para tanto. Es un poquito mejor que la primera. Por ponerle un pero, no sale un triste desnudo que en este tipo de subproductos era tan común. Aunque pongan a la final girl con un traje de Valquiria indestructible, por lo que se vio.
black_ikarus
Como gran amante del cine de terror, he visto las dos seguidas a raíz de el hype creado con la segunda parte, y... pfff... vaya mierda.
Como película de cine gore, quizás tenga sus seguidores, pero hablamos de películas malas, muy malas, absurdas, vacías de guión. Es tan idiota lo que se ve, que el espectáculo gore ni te afecta.
Bueno. si la ve alguien que nunca se ha acercado a este tipo de cine, sí que le va a producir un cierto impacto la casquería, pero el resto no vale nada. De hecho, me da cierta pena, porque ese payaso tiene una estética carismática, y utilizado en una película un poco más madura y menos de cachondeo barato hubiera funcionado muy bien.
Por supuesto, opino lo mismo que otros: terror igual a cero, argumento nulo.
Si sólo te interesan los chorros de sangre al peso, entonces sí has venido al lugar adecuado. Y para quien me vaya a decir que el gore es precisamente eso, le diré que los momentos gore pueden ir envueltos en una película de mucha calidad, pero, desde luego, no es el caso.
paulcrosnier
Aun no he visto esta entrega, la primera realmente me encanto, ese payaso Art tiene un carisma a la hora de cometer sus fechorías como ningún otro payaso en el cine, lo que es cierto es que Art the clow llego al cine para quedarse, no se por cuanto tiempo, pero si por un buen rato.
Usuario desactivado
Vi la 1 el otro día y es una gran basura y enorme porquería.Es básicamente una película de aficionados venida a más, de factura técnica supercutre, sin nada interesante que ofrecer más que sadismo y mutilaciones carente del menor talento en ningún aspecto.Torture porn, que además (lo peor) empatiza con el asesino.Que la 2 dure 2 horas y veinte me parece una enorme fumada e ida de olla de su psicópata director.
dpr87
Mala de coj....
lulud
Me ha gustado más que la primera, aunque no sabría decir si es más fuerte cierto asesinato en esta Segunda , o la que que se realiza en la primera de la amiga colgada boca abajo.
Desde luego más divertida me ha parecido
cAGE23
Fíjate que a mi me gustó menos que la primera, que me parecía que iba mucho más al grano y no tenía ninguna pretensión con sus personajes.
En esta sin embargo se va por los cerros de úbeda y creo que pierde bastante interés cuando el payaso no sale en pantalla, que es bastante tiempo, por lo que se me hizo larga.
Salvo la mamarrachada fantástica del final, que sí que me hizo bastante gracia
hechssssss
Yo no soy para nada seguidor de estas películas (que nada de terror tienen), pero de casualidad también estuve en TerrorMolins y vi ésta.
Es cierto que hay varias escenas asquerosas y macabras, pero de ahí a los vómitos y desmayos que decían que provocaba... En el cine en el que estábamos estas escenas sólo derivaron en aplausos y risas.
Luego, durante el festival hubo alguna película con gore y sangre mucho más persistente (como Project Wolf Hunting) y otras que te dejan mucho más tocado aunque con menos vísceras (como Megalomaniac). Al final, Terrifier 2 era una larga película de Halloween estadounidense con muy breves escenas de asesinatos de por medio.
haribo100
Y nadie se acuerda de Hellraiser ? En su tiempo tela con los desmantelamientos de las partes o con las cadenas.
wltr
Después de ver atrocidades en liveLeak, blog del narco etc uno se desensibiliza. Estuvo buena esta peli