El jueves cerró su primera temporada 'Sin identidad', la serie que Diagonal TV ha producido para Antena 3. La ficción ha contado con una dura competencia, algo que le hizo incluso cambiar de jornada de emisión en sus últimos capítulos, de martes a jueves, en una estrategia que le valió esquivar las buenas cifras del Mundial de Brasil que ofrece Telecinco.
Así, 'Sin identidad' se despide con una media de 20,1%, una cifra alejada del gran 25,7% que consiguió en su estreno, pero un buen dato que le ha permitido ser líder de audiencia en la mayoría de sus emisiones. Eso sí, su capítulo final fue el menos visto de la temporada, en cuanto a número de espectadores se refiere. Algo que, sin duda, habrá hecho saltar las alarmas tanto en Antena 3 como en Diagonal TV.
La nueva ficción española
Desde hace un tiempo, estamos siendo testigos de un resurgir dentro de la ficción nacional. Las clásicas fórmulas de dramedias de tono blanco y temática costumbrista parecían un tanto agotadas, y las cadenas se han puesto las pilas para ofrecer a su público series que contaran con un punto más. El género del thriller es siempre una buena elección en estos casos. La audiencia está deseosa de que le cuenten historias trepidantes y llenas de acción y 'Sin identidad' ha tratado de contar con estos ingredientes.

A ello, también se ha sumado una trama llena de secretos familiares y turbios pasados, cuya evolución nos ha permitido contar con escenas intensas y de mucha carga dramática, en la que las relaciones personales han jugado un gran peso y han determinado la evolución de la historia hasta el clímax final que se vivió en el último capítulo.
Calado social
'Sin identidad' ha contado una historia de gran calado en nuestra sociedad: el drama de los niños robados. Su protagonista, María Fuentes, es una chica que parece tenerlo todo en la vida, una gran afortunada con una familia estupenda. Un día, descubre que fue adoptada. Tirando del hilo, tratando de averiguar la verdad sobre su pasado, descubre una trama en la que su familia, ese perfecto y brillante grupo, es una pieza clave para entender cómo se llevaron a cabo esos pagos por bebés, una sórdida mafia alimentada por la impunidad que una buena posición social puede ofrecer.
Además, la serie ha sabido jugar con dos tiempos diferentes. Al comienzo de la temporada, descubríamos a María escapando de una cárcel china, adquiriendo una nueva identidad y regresando a Madrid. Poco a poco, a través de flashbacks que situaban la acción en el año 2001, cuando María empieza a descubrir la verdad de su origen, hemos sido testigos de cómo la joven llegaba a encontrarse en la posición tan complicada en la que la veíamos arrancar.

La serie ha sido calificada por muchos como la 'Revenge' española, pero no hace falta ser el lector más hábil del mundo para descubrir a quién se está haciendo referencia con el nombre que toma María con su nueva identidad: Mercedes Dantés. La historia, que ha mantenido un ritmo progresivo y equilibrado vivió (para mí) un extraño giro en su último capítulo, cuando María es vendida al traficante de armas que la encadena para convertirla en su esclava sexual (pero que él no quiere obligarla, ojo).
Reconozco que, aunque la serie me ha gustado, esta trama final me resultó un poco rara por momentos y no acabó de convencerme esa resolución en la que todos aceptan la presunta muerte de la protagonista sólo porque a Juan le ha parecido verla. Fue todo como un poco "qué bien me viene ahora que haya una explosión y todos éstos mueran". Creo que hubiera sido mucho más potente que fuese uno de los personajes principales el que hubiera planificado el asesinato de la chica. La voz en off final que explicaba toda la transición del personaje hasta llegar a la cárcel tampoco me acabó de convencer. Me pareció un tanto precipitado.
Personajes con matices
Una de las cosas que más me ha gustado de la serie, eso sí, ha sido la construcción de los personajes, la mayoría de ellos con dobleces y matices, algo que siempre enriquece a cualquier ficción. Megan Montaner, cuya presencia en escena tiene mucha fuerza y rotundidad, me parece una actriz con muchas cualidades para interpretar a alguien determinado y activo como María.

Los miembros de esa "idílica" familia han resultado bastante interesantes. Creo que ha sido un acierto construir una historia en la que no todos tienen la misma información y comparten diferentes grados del secreto. Así, Francisco José, el padre, se presenta como un hombre piadoso y amante de su familia, que no sabía hasta qué punto podían ser dañinas sus acciones. Me ha gustado también ver a Lydia Bosch en un registro diferente, como señorona acomodada y egoísta. Tito Valverde como malo malísimo, con sus implicaciones políticas y sus ínfulas de ascender socialmente, ha debido también gustar a más de uno.

Y tener a Victoria Abril haciendo de Fernanda ha sido todo un punto a favor de esta serie. La actriz ha demostrado la calidad que es capaz de dar a sus papeles. Cada secuencia en la que aparecía Fernanda transmitía verismo. Y, por último, haré referencia a una actriz que, debo confesar, nunca ha sido mi preferida. No me gustó Verónica Sánchez ni en 'Los Serrano' ni en 'La República'. Tal vez es porque no la acabo de ver en los papeles de niña buena, porque aquí, con Amparo, me ha parecido que lo ha bordado, ofreciendo uno de los personajes más interesantes y con mayor profundidad de la serie.
En ¡Vaya Tele! | 'Sin identidad' y sin ofrecer lo prometido
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Usuario desactivado
En mi opinión, una buena serie que se ha visto empañada por la elección de alternar con los flashbacks (o más bien flashforwards).
Decepciona porque ese inicio tan trepidante hacía esperar muchas cosas, mientras que el 95% de la serie ha tenido un ritmo y desarrollo completamente diferente. Quizás, si hubieran empezado de forma lineal desde 2001, la trama hubiese ido ganando en intensidad lentamente, y el cliffhanger del final de temporada hubiese sido inmejorable. Sin embargo, nos hemos pasado toda la temporada esperando que las cosas se pusieran verdaderamente chungas, mientras que la serie iba a lo suyo.
Que no ha sido mala, pero hubiese sido mucho mejor sin generar expectativas que quizás (eso espero) cumplan en la segunda temporada.
Por cierto, ¿soy yo, o a Miguel Ángel Muñoz le sienta muy bien el hijoputismo? Qué poco me gustaba y al final me acabó convenciendo.
fringe
Suscribo todas y cada una de tus palabras. La forma se ha comido a la forma. Aun así, entretenida. Hacía años que no me enganchaba a una ficción nacional. Mostrar el futuro de la protagonista en 2013 ha sido un total fiasco. ¿Por qué no se ha indagado más en el interesantísimo viaje de Amparo (Verónica Sánchez)? Siento decirlo pero me ha parecido un conflicto mucho más jugoso que el de la propia protagonista. El personaje de Bruno (Miguel Ángel Silvestre) ha dado demasiados bandazos en el juego de alianzas pero siempre hay un personaje así en este tipo de historias de traiciones y venganzas. Luisa (Lidia Bosch) podría haber dado más juego con su religiosidad y supuesta pulcritud y Eugenia (Cristina de Inza) como personaje/mujer florero "podría" haberse revelado, ¿no? Creo que personajes y conflictos han sido una mina de oro pero se ha dado mayor prioridad al "cuanto más, mejor", olvidándose por momentos de esa humanidad que se les ha ido otorgando a todos los personajes (con excepción del villano de la función: Tito Valverde). Hubiera apostado por un Juan Prados más ambicioso en lo profesional sin involucrarse tanto emocionalmente con María. La revelación del embarazo de Amparo ha sido una chapuza... así como vender a María al narcotraficante por parte de Curro. El problema ha sido no saber manejar bien el misterio.
Demasiados "peros" y aún así veré la segunda temporada por su potencial. Ojalá cumpla con creces.
anaaa
Nos vendieron una serie sobre venganza de la prota, pero el 95% de la duración de cada capítulo era un flashback, para contarnos la historia… tenían que haberlo hecho de otra manera, lo mismo gastar algunos capítulos en 2001 y luego volver a la actualidad, porque así lo que daba era la impresión de ser otra serie de niños robados, pero anunciada como otra cosa
jasev
Pues yo voy a llevar la contraria. Me he tragado religiosamente la temporada, pero la segunda la va a ver otro.
A priori presentan una historia de niños robados mezclada con una historia de venganzas al estilo Conde de Montecristo (de forma explícita)... pero lo que presentan es un culebrón, y de los malos. Personajes estereotipados, tramas cansinas, giros de guión absurdos y del reparto hablo ahora. Lo mejor, una producción cuidada, buen vestuario y decorados (aunque con algún error tonto que se puede disculpar).
Dentro de los actores, Megan Montaner me ha sorprendido gratamente. No es que sea ninguna maravilla, pero cumple. Lo mejor, curiosamente, ha estado todo en torno a la familia biológica: maravillosa Victoria Abril y muy convincentes Verónica Sánchez y Antonio Hortelano. ¿El resto? La nada. Mediocres Azorín y Grao, malos Valverde y Rebellón (este último alcanza cotas de verdadera vergüenza ajena). El día en el que alguien dijo a Miguel Ángel Muñoz que podía ser actor debí sentir una perturbación en la fuerza, como si de pronto millones de verdaderos actores gritasen de terror y luego se produjera el silencio. Y respecto a Lydia Bosch... hubo un tiempo en el que pareció que podría llegar a ser una actriz, especialmente cuando trabajó para Garci. Pero ese tiempo pasó.
abril.reyes
A mi también me ha encantado Verónica Sánchez ojalá le den premios porque está Sembrada!! Y Muñoz también lo clava tienen una química ambos brutal!!!
En cuanto a la trama es que yo creo que ese final es un final a medias porque al faltar la 2aT imagino que explicarán como se gesta esa explosión y quien es en realidad la chica que muere y toman por María...
Tengo muchas ganas de ver qué hace Azorín en el 2013 con todo el tema informático eso puede darles mucho juego ...
Los 10 minutos iniciales de la fuga de la cárcel son la CAÑA! Espero que la 2aT haya más de este tipo de secuencias y que veamos un gran Thriller!!
A mí por momentos me ha recordado a Alias y a Motivos Personajes!