"Para tener éxito con el sexo contrario diles que eres impotente; ellas no podrán evitar el refutarlo."
Un 18 de enero nacía Cary Grant —nombre verdadero: Archibald Alexander Leach—, uno de los mejores actores jamás aparecidos frente a una cámara. Era tan bueno que hasta solía interpretar de espaldas mejor que nadie, tal y como lo muestran algunas de las secuencias más memorables de su filmografía, llena de títulos imprescindibles. Grant podía presumir de formar parte de la inspiración para James Bond, cuyo autor, Ian Fleming, le consideraba el mejor para interpretar a 007. Que Grant nunca haya ganado un Oscar —sólo le nominaron dos veces— es una de las grandes insjuticias en el mundo del cine. En su vida personal, fue un defensor acérrimo del uso del LSD; se le consideraba bisexual y se le atribuye una relación con Randolph Scott, con quien vivió durante doce años. Era la elegancia personificada; en dicho aspecto nadie ha sido jamás capaz de igualarle.
Películas imprescindibles para un buen homenaje: 'Arsénico por compasión' ('Arsenic and Old Lace', Frank Capra, 1944), él decía que era la peor película que había hecho, pero se trata de una de las cumbres de la comedia; 'Un corazón en peligro' ('None But the Lonely Heart', Clifford Odets, 1944), su segunda nominación al Oscar a mejor actor principal, probablemente el personaje más arrriesgado de toda su filmografía; 'Tú y yo' ('An Affair to Remenber, Leo McCarey, 1957), por tener una cita en lo alto del Empire State con Deborah Kerr; 'Con la muerte en los talones' ('North By Northwest, Alfred Hitchcock, 1959), por ser el falso culpabe perfecto en una de las más emocionantes aventuras de su autor; 'Charada' ('Charade' Stanley Donen, 1963), por amar a Audrey Hepburn en una trama de suspense muy retorcida.
Ver 6 comentarios