Que conste que soy aficionada al fútbol y que estoy siguiendo todos los partidos del Mundial, no sólo los de la Selección Española. También conocía al pulpo Paul, que hasta ahora ha acertado todos sus “pronósticos” respecto a las victorias de la Selección Alemana. Pero de ahí a que un hecho así se convierta en noticia de cabecera de un informativo creo que hay un paso. Sé que la edición del medio día de ‘Noticias Cuatro’ abrió ayer con este asunto y no sé si alguna más le dio protagonismo al vaticinio. Sea como fuere, me parece una soberana tontería.
Ayer había actualidad como para parar un carro y no había que irse hasta alemania para buscar un protagonista. La Ley del Aborto, la redada anticorrupción en la Diputación de Alicante, la violencia de género…,. Había para elegir pero algunos informativos no dudaron en inclinarse por la anécdota. En el caso de Cuatro la decisión se explica, aunque no se justifica, en que son parte interesada en los resultados del Mundial. Así y todo, creo que con decisiones así se alcanza un límite vergonzoso que ningún informativo debería superar: la no información gana peso a la información. Los de laSexta hace ya tiempo que van por la maroma en este sentido.
Es obvio que los partidos de fútbol del Mundial están suponiendo un aluvión de ingresos y que calentar el partido de esta noche es imprescindible pero cuando se usa un informativo para hacerlo se consiguen dos cosas: que los no aficionados al fútbol abominen, y con razón, de la calidad de los informativos; y que la sociedad en general se tome la actualidad informativa a guasa. El pan y circo de toda la vida: entre el fútbol y las vacaciones de verano se abre un paréntesis en la realidad que no hace sino aborregar al personal.
Cada medio es libre de enfocar sus informativos como quieran, eso es obvio, pero que luego no se extrañen si los ciudadanos preferimos informarnos en Internet donde, ahí sí, elegimos nuestro menú informativo, contrastamos noticias, las comentamos y conseguimos construirnos una opinión crítica de las cosas. En televisión esto se hace cada vez menos y si a eso le sumamos las líneas ideológicas de las cadenas o los intereses económicos, que el pulpo Paul abra un informativo nos tiene que hacer temblar. ¿Por qué no cuentan las noticias de verdad? Cuanto más veo la tele, más quiero a Internet.
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