Pero la sentencia va más allá. Afirma que la agencia Korpa fue "responsable del accidente de trabajo al no adoptar las medidas preventivas contra la producción del mismo". Es decir, que fueron las lamentables condiciones de trabajo de Belén y su compañera las que provocaron el accidente de tráfico en el que murió. No lo digo yo, lo dice el juez del juzgado de lo Social número 4 de Sevilla. Seguramente esta noticia no saldrá en ¿Dónde estás corazón?, A tu lado y especialmente en Salsa Rosa, donde una de las dueñas de Korpa, Ángela Portero, da lecciones morales todos los sábados sobre si el comportamiento de la Pantoja, la Zaldívar o la Duquesa de Alba es el correcto. No espero que alguien le dé en su cara en un plató la valoración moral de su comportamiento personal, el de su marido y el de su cuñada Paloma García Pelayo, también directivos de la agencia Korpa.
Tampoco nadie le preguntará por qué se negaron a reconocer la relación laboral con Ana Belén García ni sobre la pobre indemnización que le ofrecieron a sus padres para mantener la boca cerrada. Y es que si alguien quiere pontificar sobre las miserias de la prensa del corazón, no hace falta que consulte manuales sobre deontología. Sólo es necesario algo tan sencillo como revisar contratos y nóminas.
Vía | El Mundo