Ayer acabó la edición número 16 de 'Gran Hermano', que adelantó su final un día para que no coincidiera con la fiesta de la Nochebuena, en la que la parrilla se ve alterada, como todos sabéis. Y lo hizo con un 24,6% del share y ante más de tres millones de espectadores que refrendan la confianza de Telecinco en este formato.
Y es que la cadena de Mediaset puede estar más que satisfecha con su reality estrella, que le ha permitido ocupar hasta tres prime times semanales con buenos datos, amén de los resúmenes de Divinity, las conexiones en directo de madrugada y los análisis varios que se han ofrecido siempre desde el resto de programas.
La clave está en el cásting
Y ahora, con un poco de suerte, podrá seguir rentabilizando la vida mediática de algunos concursantes durante un poco más de tiempo. Aparaciones en 'Salvame', en 'Cazamariposas', en 'Mujeres y Hombres y Viceversa', en futuros realities... No es de extrañar que Telecinco alimente este formato con posibles candidatos a estrellas del canal.
Este año, el cásting ha mejorado notablemente respecto al de 2014 (en el que hubo que adelantar la final ante la perspectiva de quedarnos sin contenido que ver) pero, aún así, han fallado algunos perfiles que, desde un primer momento, ya se veía que no iban a dar demasiado juego. La temática de los secretos, que se desarrolló durante la primera fase del concurso, tampoco tuvo un recorrido excesivamente largo.
Una vez más, hemos de destacar la presencia de las redes sociales y su importancia a la hora de hablar del programa. Los tuiteros, fieles al 24 horas de la casa, son los mejores aliados del programa, pero también su gran peligro; pues no dudan en señalar cuando un vídeo no está tratando con realismo lo que sucedió en la casa. 'Gran Hermano' deberá tener las voces de estos expertos en cuenta, so pena de que algún día, puedan volverse en su contra.
En ¡Vaya Tele! | La gran telenovela de Telecinco vive su máxima expresión con 'Gran Hermano VIP'
Ver 15 comentarios