'Fast & Furious 5': la loquísima saga de Vin Diesel y Paul Walker pisa el acelerador con la vigorosa llegada de Dwayne Johnson

El mal sabor de boca dejado por 'A todo gas 2' y el discreto funcionamiento en taquilla de 'A todo gas: Tokyo Race' podría haber finiquitado fácilmente la franquicia 'Fast & Furious', pero Universal confió en la misma al poder reunir de nuevo a Vin Diesel y Paul Walker en 'Fast & Furious: Aún más rápido', un notable éxito en taquilla que llevó a que se pusieran manos a la obra con una quinta entrega.

La jugada le salió genial a Universal, ya que 'Fast & Furious 5' fue la película que ayudó a llevar la franquicia a otro nivel de reconocimiento popular. Fue también la entrada definitivamente de la escalada de fantasmadas en la saga, tal y como podréis (volver a) comprobar esta noche en Telecinco a partir de las 22:15 dentro de su espacio Cine 5 Estrellas.

Adrenalina a saco

Salvo por la obligada ausencia de Michelle Rodriguez que bien se apresuraron a resolver para 'Fast & Furious 6', una de las principales claves de 'Fast & Furious 5' es que probablemente sea el punto de máximo apogeo de esa familia en la que la franquicia ha acabado apoyándose hasta límites insospechados.

Y es que en 'Fast & Furious 5' básicamente se recupera a todos los personajes importantes de anteriores entregas que encajaban en ese concepto para contarnos sus aventuras en Brasil, donde deciden enfrentarse al criminal más poderoso del país. En el papel encontramos a un solvente Joaquim de Almeida que funciona muy bien como amenaza fuera de la ley para nuestros protagonistas, pero la realmente temible será la que representa Dwayne Johnson.

Puede que ahora sea un aliado de Toretto, pero su Hobbs representa aquí el brazo más duro de la ley, un agente incansable con un único objetivo en su cabeza. La vigorosa aportación de Johnson aquí ayudó a que durante una época fuese considerado un gran revulsivo para dar nuevas energías a otras franquicias, pero en ninguna de ellas brilló tanto como aquí.

Por su parte, Diesel y Walker ya se habían hecho aquí por completo a sus personajes, mientras que sus aliados mantenían una frescura en lo que aportaban que ayudaba a que todo funcionase muy bien para pasar un buen rato y suspender nuestra incredulidad hasta límites insospechados entonces, pero a día de hoy "casi" parece poca en comparación con lo que llegaría en sucesivas entregas de la saga.

Eso sí, dentro de su innegable aparatosidad, un peaje de entrada que algunos espectadores no están dispuestos a pagar, lo que tenemos en 'Fast & Furious 5' es un espectáculo pasado de vueltas en el que se nota que hay alguien manejándolo todo detrás como Justin Lin, el cineasta responsable de resucitar una franquicia casi muerta y convertirla en una de las más populares de nuestro tiempo.

Los 626 millones de dólares de recaudación mundial cosechada por la película hicieron buena la apuesta de Universal de elevar el presupuesto hasta los 125 millones cuando las dos anteriores habían costado 85 millones cada una. Con esos ingresos, 'Fast & Furious 5' se convirtió en una de las 10 películas más taquilleras de 2011, aunque justo sea decir que se quedó algo lejos de los 1.341 millones amasados por 'Harry Potter y las reliquias de la muerte - Parte 2'.