'Enemigos íntimos' ya ha desaparecido de la parrilla de Telecinco y no se sabe cuándo volverá, si es que vuelve. En su lugar se han sacado de la manga una película por ahora, veremos qué inventan la semana que viene. En cualquier caso, la noticia es que la casquería ha vuelto a pinchar en hueso y eso que el programa de marras tenía, en principio, todos los números para triunfar, pero desde mi punto de vista se han equivocado en lo básico.
Llegó Santi Acosta a Telecinco como el hijo pródigo pero con un buen número de proyectos fallidos a sus espaldas y le dieron un espacio en prime time para que repitiera sus éxitos de antaño. 'Enemigos íntimos' no era más que un "reloaded" de 'Salsa Rosa' o 'Dolce Vita' pero, eso sí, con famosos abonados de alguna manera a la cadena. Más barato imposible. Si triunfó aquello, ¿por qué no iba a triunfar esto? Pues muy fácil, porque no. Porque la gente ya se sabe las historias al dedillo y anda algo saturada del teatro del corazón, que con las citas fijas que tienen en Telecinco tienen más que suficiente.
No lo voy a negar, me alegro del batacazo de este programa. Lo siento por la gente que trabajaba en él, que no tiene ninguna culpa, pero me alegra que estas ideas facilonas, recurrentes y más básicas que el mecanismo de un botijo se vayan por la puerta de atrás. Cada vez que alguna cadena da síntomas de pensar que su público es idiota, se lleva un papirotazo. Vamos, que los programas del corazón tienen su público, como todos, pero esos espectadores no van a comulgar con ruedas de molino y 'Enemigos íntimos' era una rueda de las gordas.
Vi un trozo del programa en el que salían Charo Reina y su hermana. El moderador, Acosta, brillaba por su ausencia; los colaboradores intentaban tener mala leche con gracia pero se quedaban en ridículos; las invitadas discutían cosas de su pasado como si estuvieran en una sobremesa pasada de rosca. Fue como asistir al intento de resucitar un cadáver que llevaba muerto años. Todo olía a lo peor de 'Tómbola'. Me pregunté si es que no habían aprendido nada en este tiempo. Al final, la hermana de Charo Reina cantó con una sonrisa, que era para lo que había ido, y se disiparon mis dudas. Cualquiera hace ya cualquier cosa por una promoción y el resultado fue lastimoso así que no me extraña el naufragio. Mientras vayan quemando naves de esta manera, vamos bien.
En ¡Vaya Tele! | Santi Acosta vuelve a Telecinco