El programa era (es, por ahora) malo. Dejando a un lado que era una burda copia de otros programas similares su mala calidad se debía en parte a los experimentos que hacían, más para niños pequeños que para alguien que le pudiera interesar la ciencia (que es como lo vendían), también tenemos que añadir la poca ciencia que había entre los dos presentadores, Emma García y Mario Picazo, que eran más sosos que yo que sé. Y si mezclamos todo eso con un horario un poco extraño para ese tipo de programa (domingos por la tarde), tenemos el dato de conseguir la irrisoria cifra, para Telecinco, de 13 puntos de share de media.
¿Cuándo sacará Telecinco algún programa contenido original? Ya basta de refritos, copias o actualizaciones de formatos señores directivos, hagan algo de caso a los creativos y saquen algo innovador, que seguro que les funciona.