Docurrealities que nos atrapan (XIV): 'El Rey de las Tartas'

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Cocina y comidas. Eso son los temas más recurrentes que nos podemos encontrar en los diferentes docurrealities que hay en nuestra querida, y también odiada, Televisión Digital Terrestre. En este nuevo episodio de nuestro especial llamado Docurrealities que nos atrapan vamos a hablar de un programa culinario muy particular: 'El Rey de las Tartas'.

'El Rey de las Tartas' ¿de qué va?

Este docurreality gira en torno a la vida de Buddy Valastro, un pastelero italoamericano que tiene su local en New Jersey y es famoso por hacer las tartas más espléndidas y exageradas del mundo. Y cuando decimos exageradas el calificativo se queda corto, porque los encargos que suelen realizar suelen superar el metro de altura, tener formas imposibles e incluso complicados sistemas casi de ingeniería que convierten a las tartas en algo totalmente diferente.

El programa no enseña todo el proceso de la tarta, desde que el cliente la pide, pasando por el diseño y preparación hasta el momento de entrega, que es cuando solemos ver las situaciones más rocambolescas y divertidas del programa. A las preparaciones de los postres se le acompaña, como en todo docurrealitie que se precie, un poco de historia familiar. Y es que al ser el de Buddy un negocio en familia, las historias y problemas entre ellos no tardan nunca en aparecer en cada episodio, aunque en la mayoría de las ocasiones no suele llegar la sangre al río.

¿Por qué nos atrapa?

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No vamos a decir que 'El Rey de las Tartas' nos atrae porque somos amantes de lo dulce (que también). Eso seria demasiado sencillo. Las historias de Buddy y compañía nos atrapan por varias razones bien diferenciadas. La primera, sin duda, es por la personalidad de Buddy. El repostero es un personaje muy especial, con un tono de petulancia importante pero que en vez de resultar molesto, atrae de una manera inexplicable. Pese a esto, Buddy es también un personaje entrañable y que se nota que disfruta mucho con lo que hace, transmitiendo al espectador esa misma pasión y contagiándosela de cierta manera.

Otra de las principales razones para que nos atraiga este programa son, sin duda, sus historias. Uno puede pensar que los encargos de tartas se van a limitar a fiestas de cumpleaños o bodas pero nada más lejos de realidad. Los encargos especiales (que son en los que se basan los episodios) cogen encargos tan dispares, y divertidos, como la conversión de una chica a vampiro, un aniversario de una asociación de fontaneros (con la tarta water a juego) o una con forma de Chupacabras (animal mitológico muy conocido en América) a tamaño natural. Estos encargos son sin duda la esencia del programa y hace que sea tan especial y tan entretenido de ver.

¿Versión española?

Nuestro país es rico en buenos postres y buenos pasteleros así que ¿por qué no?. Sólo habría que buscar una pastelería con mucha fama y que hiciera postres de este tipo, siendo expertos en el manejo de la fondue. Quizás lo complicado sería encontrar encargos tan extraños y locos como los del programa original pero oye, nada que una buena producción (y algo de guión) no pueda solucionar en dos días.