‘The Unusuals’ no era una mala serie. La ABC estrenó allá por midseason este año y no en un mal horario, es más, sustituía a la fallida ‘Life on Mars’ y se daba por hecho que cualquier cosa mejoraría a la prescindible adaptación, pero no fue así. La audiencia americana le dio la espalda y, poco tiempo después de su estreno, fue retirada de la emisión. Precisamente la semana pasada se emitió el décimo y último capítulo de la serie, que podría haber servido perfectamente como un capítulo cualquiera más y que hace que la serie se despida tal y como empezó: de forma muy discreta.
Entonces, ¿por qué no triunfó? Era relativamente entretenida, tenía algunos diálogos graciosos y sus personajes eran bastante característicos. En definitiva, una serie pasable que se dejaba ver. Ése es precisamente el problema ya que, si bien no era mala, no destacaba en nada. Era un simple drama procedimental ubicado en una comisaría de policía que realmente no aportaba mucho más que el resto de series similares pertenecientes al mismo género. Sí, los personajes tenían su encanto, pero en el fondo no era razón suficiente para que la audiencia se quedara a ver la serie semana tras semana.
Si nos centramos en el episodio final, da la impresión de ser cualquier cosa menos el cierre de la serie. Dos casos del montón (una chica traumatizada que fue asaltada tiempo atrás y otro en el que un grupo de gente rodaba vídeos subidos de tono en casa ajenas), ocupan la mayor parte del capítulo. No es que ‘The Unusuals’ tuviera demasiados elementos serializados, pero uno de los fundamentales, como es lo que iba a pasar con el cáncer que sufría Delahoy, queda completamente en el aire. Tampoco sabemos si Banks sobrevive a su cumpleaños y, de hecho, el detective Alvarez ni siquiera aparece en el episodio. En resumen, fue un capítulo que no estaba pensado como final, pero que debido a las malas audiencias no tuvo más remedio que serlo.
En general, ¿qué habría hecho yo de forma diferente? Para empezar eliminar toda la historia relacionada con Beaumont y Cole. El arco argumental en el que Cole, ahora poli bueno, era atormentado por su pasado en forma de su amigo sobraba por completo. Beaumont directamente no tenía arco argumental, así que nadie la iba a echar de menos. Los protagonistas están correctos, pero es una realidad que la pareja de secundarios formada por Delahoy y Banks se los comían en cada episodio, y cuando eso ocurre significa que realmente hay un problema de planteamiento.
Y así como ‘The Unusual’s vino, ‘The Unusuals’ se fue. El responsable de la serie, Noah Hawley, ha confirmado en su twitter que estaba hablando con varios canales de cable sobre la posibilidad de revivirla pero, no nos engañemos, la mayoría de charlas de este tipo al final quedan en nada (‘Arrested Development’ es el vivo ejemplo). Han tenido diez capítulos en los que la serie no ha sabido aprovechar todo su potencial, y que ha hecho lo peor que puede hacer una serie hoy en día: dejarnos indiferentes. Ésa es, en definitiva, la razón de su cancelación.
En ¡Vaya Tele! | ‘The Unusuals’, una buena serie de personajes antes que un serial policíaco