La gente me suele mirar raro cuando digo que 'The Good Wife' me parece el mejor drama en emisión actual, sobre todo con gigantes como 'Mad Men' y 'Breaking Bad' ya consolidadas, pero así lo pienso. La perfecta combinación del procedimental con la trama a largo plazo que encontramos en 'The Good Wife' unido al excelentísimo reparto que compone la serie la convierten en mi joya particular que disfruto más que ninguna otra.
Las intervenciones de Alicia (Julianna Margulies) en los juicios son el punto álgido de cada capítulo, alcanzando en ocasiones niveles de drama insospechados que, en mi caso, me producen total fascinación (al enfrentamiento con el juez en el primer capítulo de la temporada me remito). El año pasado dejábamos a Alicia a punto de hacer una importantísima elección, y en ese mismo punto comienza esta segunda temporada. Ha tomado una decisión, sí, pero sin contar con todas las variables.
Will le declaró todo su amor por teléfono, pero lo hizo demasiado tarde. Alicia ya había salido a la palestra con su marido y Eli se encargó de borrar el mensaje para no entorpecer la campaña de Peter Florrick. A partir de aquí tan sólo hemos tenido pequeños momentos de tensión entre ambos, con él muy serio y distante y ella ajena a todo y sin saber la causa de su actitud. Esta es la mayor baza de la serie, y tiene toda la pinta de que aún deben pasar muchas cosas para que los veamos a ambos juntos.
En otro orden de cosas, Peter intenta relanzar de nuevo su carrera política, pero no lo va a tener fácil. Los ecos del pasado vuelven a resonar tras darse a conocer un caso muy parecido al suyo, que también implicaba prostitución y dejaba en evidencia a su mujer. Parece que la pesadilla de la familia Florrick está muy lejos de acabarse, con vídeos manipulados, intentos de sacar información a los hijos y aliados que sólo quieren hundir la carrera de Peter. No sé por qué, pero me da que el pequeño Zach va a ser decisivo a la hora de aclarar todo este tema.
En la agencia, Will y Diane están inmersos de lleno en la fusión de la empresa, que ahora pasa a llamarse Lockhart/Gardner & Bond, pero no todo va a ser un camino de rosas con el nuevo socio como ellos se esperaban. La nueva membresía incluye también otra forma de actuar y de aceptar casos, algo que sobre todo Diane no lleva bastante bien y le cuesta alguna que otra discusión con Will. Además, en el segundo capítulo hemos sabido que Will y Bond se conocían de "algo" antes de la fusión, lo que puede sembrar aún más discordia entre ambos.
Y por supuesto, no me olvido de Kalinda, que para algo fue Archie Panjabi la que se llevó el Emmy este año. Kalinda está viendo amenazada su posición tras la llegada del nuevo detective a la firma de abogados, llegando incluso a sentir celos cuando Alicia empieza a trabajar con él. Este rollito de la tensión entre ambos detectives se antoja super divertido e interesante, y ojalá que por fin podamos profundizar más en la personalidad de Kalinda, en su pasado y, por supuesto, su orientación sexual.
Con todo esto, parece que 'The Good Wife', lejos de acusar un desgaste en su segunda temporada, está aumentando aún más su grandeza. Ninguna como ella combina tan bien los casos semanales con la trama serializada, y eso es algo que se nota muchísimo, tanto en calidad como en audiencias. Si todo sigue así, nos quedará muchísimo por disfrutar este año.
En ¡Vaya Tele! | 'The Good Wife' cierra una sólida e interesante primera temporada