Hace poco tiempo que comencé a ver ‘The Big Bang Theory‘, por lo que para mí el camino hasta la mitad de la tercera temporada ha sido casi un continuo. Fue entonces, en el parón de invierno, cuando me di cuenta que las mayores risas me las pegaba con esta serie, y que veinte minutos cada siete días (si es que había capítulo esa semana) me resultaban demasiado escasos. La serie podrá pecar de muchas cosas, pero de aburrida desde luego que no.
Quizá sea esta continuidad por mi parte lo que me impide ver el estancamiento que mucha gente declara haber visto en la serie, centrándose cada vez más en Sheldon (lo cual sí es cierto) y dejando de lado a otros personajes como Rajesh o Howard que están menos aprovechados. Aunque esto puede que sea verdad, todo el quinteto protagonista ha tenido sus grandes momentos a lo largo de la temporada; una temporada que no sé si será la mejor, pero desde luego sí la más atípica y “social”.
Leonard y Penny son pareja
La tercera temporada comenzó con el grupo volviendo de la expedición en el Polo Norte, y con Leonard intentando remontar la relación con Penny, que se había quedado a medio hacer al final de la segunda temporada. Del primer episodio no pasó que echaran un polvo, y poco después ya estaban metidos en una relación que duraría más de lo que yo me pensaba en ese momento.
Sus diferencias traerían bastantes problemas, a ella con sus amigos, a él con su madre (muy grande Diane de ‘The Good Wife’), y a ambos con Sheldon, quien en más de un capítulo ha llegado a comportarse como el hijo de la pareja. Todavía recuerdo a Penny cantándole aquello de “Soft kitty, warm kitty…“, aunque la canción, como el propio Sheldon se encargó de recordarle, sólo funciona cuando está enfermo. Me ha gustado mucho Penny esta temporada; donde muchos ven un personaje prescindible, yo veo el pegamento que pone un poco de cordura cuando las cosas se van de madre.
Pero emulando a Desmond Hume, un buen día a Leonard se le ocurrió decir aquello de “I love you, Penny“, y se lió la marimorena. La respuesta de Penny no fue la esperada (que te respondan diciendo “gracias” no es demasiado romántico) y a partir de entonces la rubia se empezó a agobiar. Sólo hizo falta la aparición del maléfico Will Wheaton para malmeter y separar una pareja que ya estaba pendiente de un hilo. El fin de esta temporada no nos deja nada claro la situación entre ambos (el portazo que le da Penny es por la borrachera que llevaba), pero a mí estos dos me resultan más divertidos cuando están juntos.
Sheldon sigue siendo la estrella
No me extraña nada que los guionistas se centren cada vez más en Sheldon, pero es que la calidad humorística de este personaje (y sobre todo de Jim Parsons) es sublime. Por muy llorón, moco, crío y malcriado que pueda parecer, Sheldon intenta ser cada vez más social, y sus habilidades a la hora de relacionarse con la gente han evolucionado mucho durante esta temporada.
Que nadie le quite su asiento del salón, que ya tenía reservado aun cuando no había muebles en el salón (genial el capítulo de cuando Leonard y Sheldon se conocieron), y cuidado si eres Will Wheaton e intentas meterte con él, ya que sacará lo peor de sí mismo para intentar destruirte. Por no hablar de sus frases lapidarias que, salvo por las referencias culturales, mucho se parecen a las de Sue Sylvester. Pero eso sí, con menos afán destructivo. Una muestra:
En el siglo XVIII, el Rey Rama IV de Siam fue capaz de dividir un imperio entre las principales potencias europeas para no perder su trono. ¿Cómo es que tú no eres capaz de separar el orégano del resto de la pizza?
Esta temporada ha sido, además, la de la consolidación del Bazinga como coletilla tras una broma (horrorosamente traducida en el doblaje como “¡Zas, en toda la boca!”). El capítulo con Sheldon obsesionado intentando encontrar la solución a una fórmula es, probablemente, uno de los mejores de toda la serie, y la escena final en la piscina de bolas escapando de la persecución de Leonard es de lo mejorcito que le he visto a este personaje.
Howard y Rajesh
Al igual que Leonard, Howard también encontró novia (quién iba a decirlo) gracias a una amiga que Penny le presentó. No duraron mucho, y el interés que ponía Howard en conservarla tampoco es que fuera excesivo, pero sí que nos regaló grandes momentos con Rajesh, quien estaba muy celoso por la poca atención que recibía de Howard; un conflicto que más bien se parecía al de una pareja que al de un par de amigos.
Rajesh sigue desaprovechado, sigue siendo ese bufón que pone una nota de humor muy de vez en cuando, pero cada vez que habla sube el pan. Empieza a cansar ya su mutismo selectivo hacia las mujeres, y a pesar de que un chupito de alcohol lo cura sin problema, ya va siendo hora de darle más protagonismo a Raj y quitarle todas esas barreras que impiden ver un personaje que, potencialmente, puede ser muchísimo más divertido.
Y ahora llega Blossom
El final de temporada más bien se parece al final de un capítulo cualquiera. Howard y Raj buscan a Sheldon una cita por internet, y a pesar de las pocas esperanzas, el programa exprime al máximo el algoritmo y encuentra un “match” a nuestro científico loco. Ni más ni menos que Mayim Bialik, la mujer a una nariz pegada recordada por todos como la adolescente Blossom en la sitcom de los 90.
Se ha discutido mucho cuál será su papel en la serie y si va a ser un personaje recurrente la próxima temporada. En el último capítulo lo cierto es que se ve cierta química (si es que a eso se le puede llamar química) entre ambos, pero como un amigo me dijo hace poco, probablemente con este último cliffhanger los guionistas pretenden ver la reacción que provoca en la gente el hecho de que Sheldon pueda echarse novia o similar.
A mí no me disgustaría que lo hicieran, siempre y cuando conservaran la esencia friki de Cooper, algo que no será demasiado difícil viendo que la naturaleza de Amy (vamos a llamarla por su nombre) es igual de friki, convirtiéndose casi en la versión femenina de Sheldon Cooper. Un giro de argumento que habrá que ver cómo desarrollan en la siguiente temporada. ¿Alguien se imagina cómo puede ser un Sheldon enamorado? O peor ¿Un Sheldon sexualmente activo? Madre mía, la que nos espera.