'La Serpiente' es una de las series de moda. Desde su llegada al catálogo de Netflix el pasado 2 de abril, su popularidad no ha dejado de crecer. No cuesta entender los motivos que han llevado a muchos a quedar atrapados por esta coproducción entre BBC y Netflix sobre la historia real del escurridizo asesino en serie Charles Sobhraj, pero no todo lo que cuenta sucedió como vemos en ella, siendo especialmente importantes los cambios en su resolución.
A continuación vamos a repasar todo lo que cambia 'La Serpiente' en lo referente al -cuidado con los spoilers de la serie de aquí en adelante- arresto definitivo del astuto Sobhraj. Y es que seguramente el final real se sintiera un poco como un bajón en lo visto hasta entonces, pero como mínimo resulta conveniente cómo fue la caída definitiva del personaje interpretado por Tahar Rahim.
El final de la serie
En el episodio final de 'La Serpiente' vemos cómo Sobhraj vuelve a Nepal con una actitud casi desafiante, confiando en que va a poder moverse con libertad por el país ante la inexistencia de pruebas en su contra, llegando a dejar que le fotografíen para que aparezca en la prensa y las autoridades vayan a por él, aunque no existiera ninguna orden de busca y captura.
El exceso de confianza acaba volviéndose en su contra cuando Knippenberg localiza las pruebas necesarias para incriminarle justo cuando estaba a punto de salirse con la suya. Luego textos sobreimpresos nos informan de que se desconoce qué fue lo que le hizo volver y que fue condenado, habiendo permanecido en prisión desde entonces.
Esta última parte sí se asemeja mucho a la realidad, pero en todo lo anterior se hicieron multitud de cambios para llevar a la misma resolución. Lo cierto es que Sobhraj sí que regresó a Nepal en 2003, pero su llegada pasó bastante desapercibida inicialmente y parece que se debió a su interés para crear un negocio de agua mineral procedente del Himalaya o relacionado con la exportación de pashmina. Nunca quedó del todo claro.
Lo que sucedió realmente
Sobhraj visitaba con frecuencia el Casino Royale del Hotel Yak & Yeti, siendo allí donde el veterano periodista Joseph Nathan se fijó en él por su parecido con Sobhraj. Habían pasado muchos años desde sus asesinatos en el país y no estaba seguro de que eso hombre con una calvicie incipiente fuera Sobhraj, pero Nathan decidió hacer todo lo que estuvo en su mano para asegurarse de que no se fuera.
Su plan le llevó a hablar con un gerente del hotel para que atendiera con mimo a Sobhraj para asegurarse de que no se marchara y al mismo tiempo formó un pequeño equipo para seguirle a todas partes. Las sospechas permanecían, pero era imposible aclarar si ese hombre envejecido y con una calvicie incipiente se trataba o no de él.
Aquí es donde entra en escena el diplomático S Ramesh, quien había comentado previamente a Nathan que sentía cierto interés por el blackjack, lo cual hizo que ambos coincidieran en el casino el 16 de septiembre de 2003. Al de poco de llegar, Nathan se levantó a dar una vuelta por el lugar y la casualidad quiso que Sobhraj estuviera allí.
Nathan volvió con Ramesh y le señaló a Sobhraj, el cual fue rápidamente identificado por Ramesh. Al día siguiente se publicaba en The Himalayan Times un artículo desvelando la presencia de Sobhraj en Katmandú, por lo que la policía pronto procedió a iniciar una búsqueda exhaustiva para dar con él.
Ahí es donde no queda muy claro qué es lo que hizo Sobhraj, porque la policía hizo redadas en varios hoteles para dar con él, pero no le localizaron hasta la tarde del 18 de septiembre. ¿Dónde estaba? En el mismo casino, jugando como si nada poco antes de ser arrestado por varios asesinatos. Y es que las órdenes de busca y captura contra él seguían activas, siendo el único país del mundo en el que se exponía a ser arrestado.
Ramesh desveló recientemente que poco después de ser detenido Sobhraj comentó a la policía que poseía una productora cinematográfica en País y que había vuelto a Nepal para rodar un documental televisivo sobre las artesanías locales. No consta que eso fuera cierto, pero añade más dudas sobre la aparente apatía de la que hizo gala...
A partir de ahí, los caminos de la serie y la realidad vuelven a coincidir, y es cierto que las pruebas recabadas por Knippenberg fueron esenciales para condenar a Sobhraj, pero como ya habéis podido comprobar, sus últimos días libre fueron muy diferentes a lo que nos cuenta esta miniserie.