Para todos los que sois padres, muchas felicidades; y para los que no lo sois por vía de sangre pero tenéis una relación más que especial con vuestros sobrinos, vecinos, amigos... muchas felicidades también. Porque muchas veces, ser padre no significa sólo "poner la semillita en mamá" sino convertirse en el apoyo, el soporte y una fuente inagotable de cariño. Así también lo hemos visto en la ficción.
Walter y Jesse
No tenemos que ser los más listos del mundo para darnos cuenta de que la relación de Walter y Jesse en 'Breaking Bad' era cada vez más la de un padre con su hijo que la de dos socios que se unen para cocinar meta. La sobreprotección de Walter hacia el joven le llevó, de paso, a cometer los actos más atroces, pero su afecto era indudable.
Ecbert y Athelstan
Hasta tal punto adora el rey Ecbert al monje reconvertido en vikingo, que no duda en proteger al hijo que éste tuvo con su propia nuera. Así, en 'Vikings', se juega con la idea de que el futuro rey Alfredo, una importante figura para la unificación de Inglaterra, es un descendiente ilegítimo al que el amor de Ecbert por todo lo que Athelstan le enseñó, abrió el camino del trono.
El Perro y Arya
Extraños compañeros de viaje los que vemos en 'Juego de Tronos'. Enemigos que se vuelven íntimos y viceversa. Una de las parejas que más logró conmovernos fue la formada por Arya, la chica que lo perdió todo y El Perro, el hombre que, desde niño, nunca tuvo nada. Un secuestro que terminó en una profunda relación afectuosa de ésas que se demuestran con gestos más que con palabras.
Gabriel y los Jennings
No todos los padres postizos son amables y desean lo mejor para sus "hijos", aunque, de manera superficial, sea eso lo que parezca. En las complicadas vidas de los personajes de 'The Americans', los Jennings cuentan con el dictamen de un miembro de la KGB que les supervisa. En la última temporada, Gabriel era quien, con una sonrisa, pero un mensaje claro y directo, les marcaba el camino a seguir.
Will y el tío Phil
Una de las series que acompañaron nuestras sobremesas fue 'El príncipe de Bel-Air', en la que Will Smith se convertía en un hijo más para los Banks. La relación entre estos dos nos dejaba momentos muy divertidos pero también tiernos, pues Phil era todo un padrazo para ese chico de Philadelphia que nunca había contado con el afecto de su padre biológico.
Hank y Alex
En 'Supergirl', la serie de The CW, también tenemos una de esas relaciones tremendamente especiales. En su momento, Hank prometió cuidar y proteger a Alex mientras trabajaban en el DEO. El paso del tiempo (y de los capítulos) ha logrado que los dos sean cada vez más cómplices, guardando importantes secretos el uno del otro.
Voreno y Lucio
Es lo que tiene marcharse ocho años a la guerra, que cuando vuelves, te topas con un nieto que, en realidad, es un hijo ilegítimo de tu mujer y tu cuñado. En 'Rome', el personaje de Lucio Voreno se veía ante la tesitura de aceptar o no a un hijo fruto de una infidelidad. Al final, claro, los buenos sentimientos (aunque opacados) del buen centurión, ganaban a todo lo demás.
Kublai Khan y Marco Polo
A la espera de que llegue la segunda temporada de una gran serie de Netflix que quizá ha pasado desapercibida para muchos, nos podemos recrear en una de las curiosas relaciones que 'Marco Polo' ha construido. Venido de la otra parte del mundo, poseedor de unos conocimientos que sorprenden en la corte del Khan, Kublai no duda en convertirse en protector del joven viajero.
Tony y Christopher
Una de las relaciones más intensas y dolorosas de 'Los Soprano' fue la que vivimos con Tony y Christopher. Más que cómplices, eran familia, aunque la vida del último fue separándoles más y más hasta llegar hasta ese fulminante momento de la última temporada en la que Tony llevó a cabo una de las acciones más polémicas de esta gran serie.
Salvador y los ministéricos
Por último, nos acercaremos a una de nuestras series favoritas de la ficción nacional. En 'El Ministerio del Tiempo', Jaime Blanch interpreta al jefe jefazo que, a pesar de su gesto adusto, no puede disimular que es un hombre sensible que se preocupa por todos sus agentes, formando una numerosa familia que no para de crecer, incorporando miembros de todos los siglos y condiciones.
En ¡Vaya Tele! | Los múltiples perfiles del padre televisivo
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